Análisis LG NB3520A

Los espectaculares televisores de perfil fino que pueblan las tiendas de electrónica tienen muchas ventajas, pero también un incoveniente importante: es muy complicado producir un buen sonido en tan poco espacio. Por ello, muchos usuarios se plantean adquirir soluciones de audio por separado, como la barra de sonido que protagoniza nuestra análisis; así es la LG NB3520A.

Uno de los hándicaps habituales cuando uno se plantea mejorar el sonido de su televisor es evitar engorrosos procesos de instalación y cableado, tan habituales en las primeras generaciones de los sistemas «cine en casa». El LG NB3520A recurre a modernas tecnologías inalámbricas y sólo necesita un enchufe para llenar de buen audio el salón de nuestro hogar. Este recurso, seguramente intorerable para los puristas del audio, sí nos parece una alternativa interesante teniendo en cuenta el público objetivo al que va dirigido el producto.

El pack está formado por una barra principal de generosas dimensiones (50 mm. de fondo y 80 mm. de alto) y un subwoofer que se conecta a ella vía Bluetooth. LG ha optado por un diseño discreto y sin estridencias, en color negro piano y donde sólo destaca una pequeña pantalla LED que, afortunadamente, es configurable (nada peor que una luz fija bajo nuestro televisor mientras disfrutamos de una película).

La conectividad está resuelta con una doble entrada óptica digital, un puerto USB y un mini jack para audio analógico. La ausencia de HDMI hace imposible controlar el dispositivo con el mando de nuestro televisor (tendremos que usar el incluido con el aparato), vía CEC.  En términos de calidad no hay diferencias entre este estándar y la entrada óptica, máxime teniendo en cuenta que no soporta formatos de audio en alta definición.

Poner en marcha el LG NB3520A es un juego de niños: basta conectar el cable óptico desde nuestro televisor, reproductor de Blu-ray o cualquier otro dispositivo a cualquiera de las dos entradas disponibles. Además, podemos añadir otras fuentes de audio gracias al puerto USB (pendrives, discos duros externos, etc.) o sin cables, gracias al soporte Bluetooth. Es evidente que el estándar A2DP comprime la música y no ofrece la calidad de AirPlay o alternativas basadas en DLNA, pero a cambio ofrece compatibilidad con prácticamente cualquier dispositivo.

Sin entrar el terrenos peliagudos ni interminables debates -necesariamente subjetivos- relacionados con la calidad de audio que pueden ofrecer soluciones como la de LG, sí aseguramos sin género de dudas que es infinitamente superior a la de cualquier televisor moderno, incluyendo los de gama alta. Por pura física, el sonido aparece mucho más lleno de matices, es fácil distinguir voz y música y el pequeño subwoofer resulta una ayuda para dar volumen al conjunto, ofreciendo una experiencia fantástica con cine y videojuegos.

No nos han convencido tanto las opciones de emulación 3D; aunque en función de las dimensiones de la estancia el efecto puede estar más o menos logrado, desde nuestro punto de vista es mucho mejor lograr un 2.1 de calidad que un sonido multicanal poco preciso, un tanto artificial y con demasiado eco.

Conclusiones

La LG NB3520A es una muy buena barra de sonido. No inventa nada nuevo, pero ofrece una potencia más que suficiente para cualquier perfil de usuario, el sistema inalámbrico funciona muy bien y tiene un precio realmente ajustado (menos de 300 euros).

Este producto es una opción muy recomendable para usuarios que quieren mejorar considerablemente la calidad de sonido de su televisor, tienen un presupuesto ajustado y quieren prescindir de cables. Entre gastar 300 euros en una solución 2.1 de esta categoría o un multicanal de gama baja no tenemos dudas: es mucho mejor optar por la primera opción.

En la lado negativo es una lástima la ausencia de HDMI (apenas hubiera encarecido el precio del producto), un mando a distancia mejorable y unos modos 3D que todavía necesitan evolucionar para acercarse a la experiencia que puede ofrecer un sistema de cinco altavoces.