Rise of the Tomb Raider, análisis

Nuestra famosa aventurera, Lara Croft, recibió su nueva entrega, Rise of the Tomb Raider, el pasado 28 de enero para PC. El juego vio la luz para Xbox One el pasado noviembre y  se espera que llegue a PS4 a finales de este año. El título está cargado de aventura y acción, y es que no podía faltar en esta nueva saga de la cazatesoros.

Lo hemos probado en un PC con una gráfica muy básica pero que aún así ha respondido muy bien,  con control por teclado y ratón.

En Rise of the Tomb Raider encontramos un modo historia que ronda las 15 horas de juego en un modo normal, ya que podemos elegir entre cuatro niveles de dificultad. Como decíamos al principio, el título está repleto de acción y niveles vertiginosos en los que tenemos que estar atentos para reaccionar porque sino seguramente nos despeñaremos por algún acantilado o nos ensartarán en alguna estaca. También disfrutaremos de niveles amplios en los que tendremos que usar el instinto de supervivencia de Lara.

Partimos de una jugabilidad muy básica, típicos controles de un juego de este género, movimientos muy simples que enseguida manejamos. Pero obviemos esto, ya que lo que realmente engancha de este título son los niveles emocionantes que podemos a jugar. Los desarrolladores han conseguido que el jugador se introduzca dentro de la historia y maneje a Lara como si fuera su alter ego en una aventura que también engancha. Por lo que en este aspecto tienen nuestro beneplácito, nos ha gustado mucho.

Por otro lado, Rise of the Tomb Raider vuelve a tener un sistema de experiencia como el de la primera entrega de la nueva saga. Por si alguno no sabe como va,  durante el juego conseguiremos experiencia y podemos mejorar distintas habilidades de nuestro personaje. Aparte de experiencia, encontraremos distintos tesoros que nos permitirán canjearlos por más mejoras.

Por el contrario, también hay que mencionar aspectos negativos al respecto. Y es que los movimientos que realiza nuestra protagonista son, muchas veces, exagerados. Nos referimos, sobre todo, a los saltos que hace mientras trepamos.  Ya sabemos que pertenece a una saga de acción ficticia que emula prácticamente una película estilo “Indiana Jones” pero creemos que esos movimientos anti gravedad  podrían haber sido más cuidados.

Por lo que respecta al apartado gráfico, Rise of the Tomb Raider está muy logrado. A pesar de que nuestra tarjeta gráfica era muy normalita (una ATI R7), el juego funcionaba totalmente fluido a nivel alto. Nos ha llamado mucho la atención los paisajes y entornos por los que nos hemos movido, además de las luces. También, los modelados de Lara están muy logrados.

Desafortunadamente Rises of the Tomb Raider trae pocas innovaciones ya que bebe totalmente de la primera entrega de la nueva saga. Los aspectos a destacar creemos que son dos: el primero es por la evolución que vamos apreciando en el personaje (por historia) y la segunda y más interesante, es que algunos niveles contienen mapas bastante grandes.

En conclusión, creemos que Rise of the Tomb Raider es un buen juego, fiel al género y muy entretenido. Cumple con el objetivo de divertir y captar la atención del jugador hasta el final de su historia. Otra buena entrega para la nueva saga de Tomb Raider.