El gran valor de PS5 Pro es una tecnología disponible en PC desde 2019
Con la presentación de PS5 Pro quedó claro que PSSR era una de las novedades más importantes de esta consola. Esta tecnología es un reescalado inteligente acelerado por hardware que permite mejorar el rendimiento renderizando a una resolución inferior a la resolución objetivo, y que consigue una mayor calidad gráfica que otras tecnologías de reescalado más básicas que no utilizan IA ni hardware especializado, como AMD FSR, por ejemplo.
En una entrevista Tymon Smektala, director de la franquicia Dying Light en Techland, ha confirmado que las mejoras que ha recibido PS5 Pro a nivel de potencia GPU son importantes, pero al mismo tiempo también ha reconocido que PSSR representa un avance tan grande que podría convertirse en la pieza clave de esta nueva consola, es decir, en la mejora más importante de todas.
El director de la franquicia Dying Light, una de las más relevantes y avanzadas a nivel técnico, está diciendo que una tecnología de reescalado basada en IA podría ser más importante que el uso de una GPU más potente. Interesante, porque hasta hace relativamente poco algunos medios especializados restaban interés a este tipo de tecnologías, e incluso llegaron a decir que no debíamos dar tanta importancia a esta tecnología como para priorizar la compra de una tarjeta gráfica sobre otra. Qué equivocados estaban.
PSSR es un reescalado exclusivo de PS5 Pro
Ya os he dado algunas pistas al principio del artículo, pero sé que es un tema que os interesa mucho, así que voy a profundizar en él. Esta tecnología no deja de ser un reescalado, lo que significa que la base de su funcionamiento es el mismo que el de otras tecnologías similares. Lo que hace es renderizar la imagen a una resolución inferior a la nativa y luego la reescala a la resolución objetivo.
Ese proceso de reescalado puede partir de diferentes resoluciones. Por ejemplo, puede renderizar un 33%, un 50%, un 58% o un 67% de los píxeles y cubrir los píxeles faltantes a través del reescalado de la imagen. La diferencia clave está en la manera en la que realiza ese proceso de reescalado, y en las tecnologías en las que se apoya. Un reescalado como FSR 3 utiliza elementos espaciales y temporales, pero no se apoya en inteligencia artificial ni en hardware especializado.
PSSR sí utiliza inteligencia artificial, y se apoya en un hardware especializado que es exclusivo de PS5 Pro. Los algoritmos de IA permiten mejorar la calidad del reescalado, algo que notaremos tanto en la nitidez y el nivel de detalle de la imagen como en la estabilidad de la misma. El hardware especializado libera a la GPU de la carga de trabajo que supone aplicar un reescalado impulsado por IA, acelera el proceso y evita que tenga un impacto negativo en el rendimiento.
Sin hardware especializado sería necesario derivar a la GPU la carga de trabajo que representa PSSR, y esto reduciría considerablemente el rendimiento en juegos. Por eso no es viable utilizarla en PS5, porque sería totalmente contraproducente, ya que esta consola no tiene potencia suficiente para mover esta tecnología, y por eso está limitada a otras tecnologías de reescalado más sencillas, como AMD FSR.
Con PSSR es posible reescalar de 1080p a 2160p (de FullHD a 4K) manteniendo una mayor calidad y estabilidad de la imagen. En sus primeras pruebas con esta tecnología Digital Foundry pudo confirmar que la diferencia que ofrece es notable, y que en términos de calidad de imagen PSSR funciona tan bien que supera a AMD FSR 3.1, aunque queda por debajo de NVIDIA DLSS.
NVIDIA DLSS y el inicio del reescalado inteligente
Fue en 2018 cuando se produjo el anuncio de NVIDIA DLSS, una tecnología que llegó junto al trazado de rayos acelerado por hardware en las GeForce RTX 20. Estas tarjetas gráficas fueron las primeras dentro del mercado de consumo general (la TITAN V no cuenta porque era una solución para el mercado profesional) que incluyeron núcleos tensor para acelerar IA, y núcleos RT para acelerar trazado de rayos.
Su debut tuvo lugar en febrero de 2019, y la verdad es que fue bastante accidentado, y con razón. La primera versión de NVIDIA DLSS tenía muchas carencias, necesitaba un entrenamiento individualizado por juego, y emborronaba tanto la imagen que era imposible compensarlo con mejoras de rendimiento. Juegos como Metro Exodus y Battlefield V fueron los primeros en utilizar esta tecnología, y como dije los resultados no fueron nada buenos.
NVIDIA supo reaccionar y en 2020 lanzó DLSS 2.0, una versión muy superior que corregía todas las carencias y los problemas de la original, y que ya no necesitaba un entrenamiento individualizado por juego. La mejora a nivel de calidad gráfica entre la primera y la segunda versión era enorme, y la diferencia en términos de rendimiento también fue significativa.
A partir de ahí NVIDIA DLSS 2 se convirtió en todo un referente dentro de su categoría, y se ha mantenido como la mejor tecnología de reescalado inteligente que existe hasta el momento. Intel desarrolló XeSS, su propia solución de reescalado inteligente, pero no ha conseguido llegar al nivel de la opción de NVIDIA, y AMD todavía no ha logrado aplicar inteligencia artificial acelerada por hardware a FSR, así que juega en un nivel inferior.
Es curioso ver a dónde nos ha llevado la industria. Las críticas a NVIDIA por apostar por DLSS fueron feroces, y esta tecnología no ha dejado de ser cuestionada incluso tras alcanzar un estado de madurez significativo, y de demostrar que puede marcar una gran diferencia. Seis años después ha tenido que venir Sony a dar la razón al gigante verde apostando por PSSR, y los desarrolladores han corroborado el rol diferencial que puede tener un reescalado inteligente.
El futuro de los videojuegos pasa por la IA
NVIDIA lo ha dicho en muchas ocasiones, y está claro que no se equivoca. La incorporación de PSSR en PS5 Pro es solo el inicio de una nueva etapa en la que la inteligencia artificial estará cada vez más presente en consolas, y por tanto en juegos, todo con el objetivo de mejorar el rendimiento y para permitir la utilización de motores gráficos y tecnologías cada vez más exigentes, como el trazado de rayos completo.
Estoy convencido de que muchas de las funciones que disfrutamos en PC, como la generación de fotogramas y la reducción de ruido potenciadas con IA, acabarán llegando de una forma u otra a las consolas, y que estas contarán con hardware específico para poder acelerar todas las tareas necesarias para poder utilizar dichas funciones.
Puede que la gran revolución de las consolas de próxima generación, conocidas de momento como PS6 y Xbox Next, sea la implementación de una generación de fotogramas inteligente combinada con un reescalado impulsado también por IA. Ya hemos visto que algunos juegos de PS5 y Xbox Series X han integrado la generación de fotogramas presente en AMD FSR, aunque el resultado no ha sido bueno. Es lógico, porque sin IA y sin hardware especializado esas tecnologías están, como dije, en otro nivel, y no para bien.
En este sentido quiero recordaros que la división Xbox de Microsoft ya ha dejado caer que la IA será clave en el salto que marcarán las consolas de próxima generación. No tenemos todavía detalles concretos, pero viendo las tecnologías que están disponibles a día de hoy en PC podemos hacernos una idea aproximada de lo que está por venir. Yo apostaría, como dije, por la generación de fotogramas como pilar central de la próxima generación. Dentro de unos años espero poder confirmar con vosotros si acerté o si me equivoqué.