Siete distribuciones BSD que resisten el paso del tiempo
BSD (Berkeley Software Distribution) es un derivado de UNIX creado originalmente en la Universidad californiana de Berkeley. Su licencia de software libre, tan permisiva que está cercana al dominio público, le ha permitido mantenerse activo a través de variadas distribuciones de código abierto e incluso ha facilitado el uso de parte de su código también en software propietario.
UNIX es uno de los sistemas operativos más importantes de la historia de la computación y seguramente el más influyente. Nació a finales de los años 60 y aunque su uso ha ido descendido, sigue siendo la base de múltiples derivados para todo tipo de máquinas, desde supercomputadoras a smartphones. Aquí hay que señalar a Linux como gran referencia en variantes que lo usan, pero también otros como Android, iOS o macOS.
BSD es otro grupo de sistemas operativos derivados. En los primeros años de UNIX, sus creadores de los Laboratorios Bell de AT&T autorizaron a la Universidad de Berkeley (y a otras) el uso de su código fuente y sus desarrollares lo usaron con fines de investigación. Cuando AT&T, le retiró el permiso de uso por motivos comerciales y en una decisión absurda que termino convirtiéndose en una batalla judicial. La Universidad terminó creando su propia versión y así nació una BSD que ha realizado contribuciones notables en varios componentes de software, sistema de archivos, pila TCP/IP, memoria virtual u otros.
Hoy la versión original ya no está activa, pero hay otros desarrollos comunitarios de código abierto que usando su licencia (muy permisiva) la han continuado. Además, como la misma permite su uso en software propietario, parte de su código está presente en desarrollos comerciales como Mac OS X, Solaris, PlayStation 4, routers de distintas marcas o el mismo Windows que lo usa en la consola o en la pila de redes TCP/IP.
Distribuciones BSD
Como siempre que hablamos de estos sistemas operativos alternativos, hay que decir que no son reemplazos completos y directos como versión principal de uso a los tres grandes (Windows, macOS y Linux). Tampoco se actualizan con la misma frecuencia, ni sirven para todo y para todos los usuarios. Pero son gratuitos, de código abierto, se pueden instalar en máquinas independientes o en máquinas virtuales y a nivel de consumo, es un buen entretenimiento para el usuario que quiera probar otras cosas introduciéndose en BSD y por extensión en UNIX.
FreeBSD
Quizá el más conocido de este grupo de sistemas y como el resto, aunque no puede llamarse como tal por motivos de licencia, es un UNIX en toda regla. Lleva en el mercado desde 1993 y la última versión FreeBSD 13 llegó el pasado año con importantes mejoras de rendimiento para CPUs de Intel, PowerPC y ARM de 64 bits. También aumentó el soporte de hardware y mejoró todo el apartado de las redes y el arranque EFI, mientras que el cifrado AES-NI se incluyó de forma predeterminada para compilaciones de kernel genéricas.
Se usa para redes, servidores, almacenamiento, seguridad, plataformas integradas y en general en cualquier máquina con arquitectura x86, IA-64, MIPS, PowerPC y UltraSPARC. Dispone de miles de aplicaciones de uso gratuito y es compatible con binarios de sistema tipo UNIX como Linux. Las últimas versiones en producción son la 14.1, la 13.4 y 13.3, que están disponibles en su portal web.
NetBSD
Otro de los más conocidos y antiguos (1993) destaca por su soporte multiplataforma ya que está disponible para -nada menos- que 56 de ellas, x86, ARM, PowerPC o la nueva RISC-V, entre otras. Sus responsables, ponen el foco en la calidad y portabilidad del código, implementación de nuevas tecnologías, seguridad y estabilidad.
NetBSD incluye las herramientas de desarrollo de GNU y otros paquetes que están cubiertos por la licencia GPL y otras de código abierto. Uno de los proyectos más interesantes de NetBSD es su poderoso sistema de paquetes, pkgsrc, un meta sistema en sí mismo. Este desarrollo se ha usado en máquinas tan diversas como servidores, la consola Dreamcast SEGA y en varios proyectos espaciales de NASA. La última versión es la 10 disponible en su portal web.
OpenBSD
Otro de los BSD más conocidos, está especializado en tareas de ciberseguridad y criptografía y llegó como variante de NetBSD ante las «diferencias de enfoque» entre los miembros fundadores, habituales en estos desarrollos comunitarios. Autocalificado como «seguro por defecto» por su extrema revisión y supervisión del código de sus versiones, a la vez activa la menor cantidad de servicios posibles en máquinas de producción.
Se usa bastante en el segmento de la seguridad informática como sistema operativo para cortafuegos o sistemas de detección de intrusos. Multiplaforma y altamente portable (puede ejecutarse en casi una veintena de plataformas distintas de hardware), incluye emulación de binarios para FreeBSD, Linux, BSD/OS y otros, y sus bases de código también se utilizan para ampliar las funcionalidades de Windows y macOS. La última versión disponible es la 7.6 liberada esta misma semana.
DragonFly BSD
Menos conocida que las anteriores, es un fork de FreeBSD que llegó en 2003 con el objetivo de reescribir toda la gestión de concurrencia, SMP y la mayoría de los subsistemas del núcleo. A destacar como aporte propio su instalador, BSD Installer que ha sido adoptado por otras distribuciones de este grupo y su sistema de archivos HAMMER.
DragonFly incluye un núcleo potente con mecanismos SMP eficientes para ofrecer computación transaccional del lado del servidor y de alto rendimiento. Como el resto de BSD, brinda directamente a los usuarios acceso a muchas aplicaciones en forma binaria y código fuente. La última versión disponible es la 6.4.
GhostBSD
Otro creado sobre la base de FreeBSD. Si DragonFly está más destinado a servidores, éste pone su objetivo en el usuario que se acerca a esta plataforma y busca un BSD más sencillo de utilizar.
Para ello, ofrece entornos de escritorio asistidos por GTK (KDE, GNOME, etc.) y un diseño «listo para usar» nada más completar la instalación, con aplicaciones preinstaladas para las necesidades informáticas comunes y ofimáticas y paquetes MATE estándar. La última versión es la 24.07.3.
MidnightBSD
Una distribución que mezcla código de casi todas las anteriores e incluye módulos de GNU como X.org y GCC y un entorno predeterminado de Xfce que será muy familiar a los usuarios de Linux. Apuesta por el usuario de a pie con un desarrollo listo para usar, aunque no falta software avanzado con una variedad de herramientas de desarrollo e implementación de servidores para ingeniería de redes.
La última versión disponible es la 3.2 para versiones x86 de 64 bits, y también sirve imágenes preparadas para máquinas virtuales sobre VMWare.
NomadBSD
Otro de los que usan la base de FreeBSD confirmando que es hoy el desarrollo más importante de la plataforma. Nomad está enfocada a servir como «UNIX portátil» en medios autoarrancables USB que sirven para tareas de reparación del sistema, recuperación de datos o pruebas de software.
Con una interfaz atractiva, es ideal para probar BSD desde un USB sin tocar el sistema principal, si bien la mayoría de las anteriores también lo permite. La última versión es la versión 141R-20240711 y puede grabarse al pendrive con aplicaciones como Rufus.