Un implante cerebral permite a un paciente de ELA volver a hablar
La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad terrible por su carácter degenerativo, y porque afecta al sistema neuromuscular. Por suerte la ciencia y la medicina llevan tiempo trabajando duro para hacerle frente, y el último implante cerebral que se ha acoplado a un paciente se ha convertido en un gran rayo de esperanza para todos los que sufren dicha enfermedad.
Como sabrán muchos de nuestros lectores la ELA era la enfermedad que sufría Stephen Hawking. Esta lo dejó totalmente paralizado y con deformaciones graves, atándolo a una silla de ruedas e incapacitándolo de forma permanente. Los avances científicos y tecnológicos permitieron ha Hawking moverse e interactuar con el mundo de una manera que décadas atrás habría sido impensable.
Los implantes cerebrales y las interfaces cerebro-ordenador son uno de los aliados más importantes del ser human contra la esclerosis lateral amiotrófica, y no dejan de mejorar. El último sistema desarrollado por el hospital UC Davis Health de Estados Unidos ha conseguido resultados muy positivos en Casey Harrel, un paciente de 45 años afectado por ELA que ni siquiera era capaz de hablar debido al deterioro que había sufrido por esta enfermedad.
Casey es capaz de hablar gracias a este implante cerebral
Y lo mejor es que este nuevo sistema que le ha sido implantado puede transformar las señales cerebrales en habla con una precisión del 97%, lo que significa que el índice de errores es mínimo, y que puede comunicarse correctamente con cualquier persona sin tener que preocuparse por la aparición de fallos o errores durante el proceso de conversión.
Su funcionamiento es bastante sencillo de explicar. La interfaz cerebro-ordenador se implanta en las regiones del cerebro que controlan el habla, conocidas como el área de Broca y el área de Wernicke, por eso en el vídeo podemos ver que hay dos implantes colocados en partes diferentes de la parte externa del cráneo del paciente.
En total esos implantes cuentan con 256 electrodos que son los que analizan la actividad cerebral que se produce en esas zonas, y convierten las señales en información interpretable por un ordenador, que es, en última instancia, el que se ocupa de generar el lenguaje.
Interesante, pero lo mejor de todo es que la voz que utiliza este sistema es la que el paciente tenía originalmente, porque se ha utilizado una IA previamente entrenada con muestras de voz del paciente para generar esa voz de salida. Poder volver a hablar debe ser maravilloso, pero hacerlo con la voz que tenías hace que sea todavía más impresionante.