Perseverance encuentra posibles señales de vida pasada en Marte

En pocos días se cumplirán cuatro años desde que el dúo formado por el rover Perseverance y el helicóptero Ingenuity abandonó la Tierra rumbo al planeta rojo. Alrededor de seis meses y medio después, tras recorrer una distancia aproximada de 200 millones de kilómetros, muchos nos emocionamos al saber que el viaje había concluido exitosamente (y más aún al ver las imágenes de su aterrizaje) y que, por lo tanto, ambos vehículos ya estaban listos para acometer todas las tareas propias de la misión MARS 2020.

En estos años, Perseverance ha estado trabajado a buen ritmo, si bien a principios de este año se identificó un problema que afectaba a uno de sus instrumentos. Ingenuity, por su parte, tenía previstos cinco vuelos sobre la superficie marciana pero, tras completarlos, el control de la misión determinó que podían extender su vida mucho más de lo inicialmente previsto. Y tanto que así fue porque, pese a que un accidente ocasionó la rotura de una de sus aspas y, en consecuencia, su final, se despidió del servicio tras haber completado la friolera de 72 vuelos.

Este tipo de misiones siempre suele abordar diversos objetivos, y en el caso de MARS 2020 los objetivos para Perseverance eran (y siguen siendo, en realidad, pues el rover se mantiene muy activo) la toma de muestras variadas de la superficie del planeta y la búsqueda de señales que permitan comprobar si pudo haber, en su momento, vida en el planeta rojo. A esto se debe la elección del emplazamiento de la misión, el cráter Jezero, pues se sabe que en la antigüedad albergó un lago, y es de sobra conocida la relación entre el agua y la vida.

Pues bien, cuando el rover lleva ya cerca de tres años y medio de exploración, se ha producido un hallazgo de lo más prometedor pues, según comunica la NASA, Perseverance ha encontrado una roca que podría ser la confirmación de que hubo, en el pasado remoto, vida en Marte. Por supuesto, la agencia espacial estadounidense se muestra muy cauta, afirmando que lo que parecen señales de fósiles también podrían tener otros orígenes no relacionadas con la presencia de vida en el planeta.

También hay que recordar, como ya hemos hecho en otras ocasiones, que hablamos de formas de vida de tipo microbiano, y que al hablar del pasado nos referimos a miles de millones de años, cuando las condiciones de Marte eran más propicias para la vida. Dicho de otra manera más clara, no hablamos de formas de vida complejas, para desazón de conspiranoicos que, obviamente, ya han empezado a publicar mensajes contando que la NASA nos oculta los hallazgos del Perseverance (y es curioso que lo hagan, precisamente, cuando la agencia ha realizado este anuncio).