NVIDIA RTX, IA al servicio del arte con Adobe
Aunque no suele ser de las primeras empresas tecnológicas nombradas al hablar de inteligencia artificial, Adobe lleva muchos años siendo pionera en la aplicación de la misma en los procesos creativos, y la ejecución de la inteligencia artificial en el PC gracias a la capacidad de cómputo de la plataforma NVIDIA RTX marca una salto cualitativo de primer nivel, pues proporciona a los creadores y editores todas las ventajas de no depender de la nube en muchos de sus flujos de trabajo.
Esta semana, NVIDIA dedica la entrada su serie AI Decoded precisamente a este punto, a la enorme contribución que ofrecen las capacidades avanzadas de cómputo de IA de sus GPU, tanto discretas como integradas, para cualquier proceso creativo en el que las capacidades generativas de los modelos más recientes pueden marcar una gran diferencia. Y esto, hablando de Adobe, nos lleva sin duda a Firefly, el conjunto de herramientas y funciones presentadas por Adobe en marzo del año pasado, y que en el tiempo transcurrido hasta ahora no ha parado de crecer, tanto en funciones como en alcance.
La aceleración RTX de NVIDIA ofrece mejoras significativas de velocidad y rendimiento para las funciones de IA en las aplicaciones de Adobe. Por ejemplo, la herramienta Enhance Speech en Adobe Premiere Pro, que utiliza IA para eliminar el ruido no deseado y mejorar la calidad de los diálogos, es hasta 4,5 veces más rápida en PCs con RTX. Por su parte, las herramientas de selección de máscara aceleradas por RTX, como Seleccionar sujeto y Seleccionar cielo en Adobe Lightroom, permiten a los usuarios crear máscaras complejas con solo hacer click en un botón. La aceleración RTX también beneficia a otras funciones de IA, como la generación de formas y el cambio de color en Adobe Illustrator, y la creación de texturas a partir de texto en Adobe Substance 3D Sampler, por no hablar de la que, probablemente, sea una de las funciones de IA más y mejor valoradas en Photoshop, el relleno generativo.
Adobe dedica mucho trabajo y análisis para identificar los flujos de trabajo de sus usuarios, lo que se traduce en una información que emplea para mejorar las funciones y herramientas de sus aplicaciones, y esto es algo que también se ha hecho, desde el primer momento, en la implantación de funciones basadas en IA, pero esto además no se circunscribe exclusivamente a la velocidad en la obtención de resultados, también tiene una componente fundamental en otro aspecto fundamental para la comunidad creativa.
Me refiero, por supuesto, a la privacidad en lo referido a los contenidos procesados, y a la seguridad de saber que no se están empleando contenidos protegidos no reproducibles sin autorización en el entrenamiento de los modelos. Con respecto a este segundo punto, Adobe ha comunicado, desde el primer día, que cuenta con los permisos necesarios para emplear dichos materiales, y que por lo tanto los creadores que recurran a Firefly pueden confiar en que no se encontrarán con problemas a posteriori en este sentido.
Por su parte, la posibilidad de emplear las funciones de IA generativa directamente en el dispositivo gracias a la capacidad de cómputo de la plataforma NVIDIA RTX garantiza que las creaciones nunca saldrán del ordenador en el que son procesadas y, además, que tampoco serán empleadas para el entrenamiento de los modelos, es decir, que el creador siempre tendrá un control absoluto sobre su obra. Y esto, en tiempos en los que las polémicas sobre el mal uso de contenidos protegidos están a la orden del día, marca una enorme diferencia.