Justin Long ya no quiere ser (ni tener) un Mac
Si hay un referente en las campañas de comunicación dirigidas a «hacer sangre» al rival en este sector, sin duda ese es Justin Long. Ahora bien, es bastante probable que no sepas de quién estoy hablando. Y lo que es peor, porque me hace sentir muy viejo, es que si eres bastante demasiado joven, ofensivamente joven incluso, es bastante probable que la referencia que voy a dar para que los «míos» sepan de quién se trata también te deje un poco igual que estabas.
Hola de nuevo, soy mismo David que escribió el párrafo anterior, pero después de dedicar diez minutos a hacer respiraciones profundas para relajarme, y estoy dispuesto a dejar de lado el tema de la edad para volver al foco de la noticia. Eso sí, una cordial, incluso amistosa petición, no seáis tan jóvenes, que me carcome la envidia. Eso sí, al menos puedo decir que no reniego de lo que fui en mi juventud. Sí de alguna insensatez, claro, pero no de la persona que fui, que es más de lo que puede decir Justin Long, probablemente el switcher más switcher que haya conocido la historia.
Mitades de la primera década de este siglo, con la vuelta de Steve Jobs unos años antes y el enorme giro de timón dado por la compañía con el como capitán, Apple ha salido del agujero y ha vuelto a situarse en la cima gracias a sus iMac, MacOS X y, sobre todo, el iPod. Así, y con la compañía deseando darle una buena dentellada a Microsoft y todo el ecosistema del PC con Windows, Cupertino lanza una de las campañas publicitarias más malintencionadas, divertidas y recordadas. Una campaña en la que Justin Long afirmaba ser un Mac:
Eran los tiempos de Windows Vista, así que cualquiera entenderá que eso hacía que Apple jugara con ventaja, y basta con revisarlos por encima para verificar que le sacaron muy buen partido. La campaña jugaba además, la baza de una imagen mucho más desenfadada, informal, un rollo bastante más juvenil (ya volvemos con éstas…). En fin, que ser un Mac molaba, molaba un montón, y ser un PC con Windows Vista era gris, triste, aburrido...
Dio mucho que hablar, además, que no resultaba demasiado difícil ver representaciones de Bill Gates y Steve Jobs en los actores que interpretaban al PC con Windows Vista y al Mac. ¿Esto fue casual? ¿Depende de la percepción de cada uno? ¿O quizá el propio Jobs tuvo que ver en aquello, y aprovechó para sacarse la espinita por lo ocurrido con Gates en la MacWorld Expo de 1997? (si no sabes a qué me refiero, te lo cuento al final de este artículo). No sé tú, pero yo me imagino a Jobs diseñando meticulosamente la campaña, más o menos con esta cara:
El fenómeno iMac fue solo el principio, después llegaron los iBooks, que posteriormente se convirtieron en MacBooks, los ordenadores (tanto sobremesa como portátiles) de Apple llegaron a más usuarios que nunca, el iPhone fue el artífice de que sus números la elevaran a los altares… en fin, esa historia la conoces, y nos lleva al momento actual, en el que aún con algunos problemas que afrontar, sigue siendo una de las compañías con mayor nivel de capitalización bursátil y con una imagen que vale millones, literalmente. Y, hasta 2010, Long formó parte de la construcción de dicha imagen.
En 2020, lo recordarás, Apple anunció Apple Silicon, es decir, su despedida de Intel, un golpe bastante sonado para el gigante de los procesadores, que además en aquel momento no estaba pasando precisamente por su mejor época. Sin embargo, aunque a una escala menor, decidieron devolverle el golpe a Apple. ¿Cómo? Pues con Justin Long, de nuevo. Solo que en esta ocasión, el actor anteriormente conocido como «Soy un Mac», volvía a tomar partido en este enfrentamiento, solo que… bueno, mejor que veas el vídeo
Justin Long, el que en su momento fuera una especie de alter ego de Steve Jobs, el que había encarnado el culmen tecnológico que era en su momento un iMac G3, protagonizó una serie de vídeos (ahora ocultados en su mayoría por Intel en YouTube) en los que se ponía el foco en las ventajas del ecosistema de Intel+Windows frente al de Apple. Me pregunto si el departamento legal de Apple se dedicó a revisar concienzudamente los contratos firmados para la campaña «Soy un Mac», pero dado que no tuvimos al respecto, podemos entender que
Así las cosas, el bueno de Long, el Mac humano, parecía haber encontrado su nueva plataforma preferida, en la que cabía entender que se establecería y perduraría. Intel era su nueva arquitectura su nuevo hogar, pasaba de rollos raros con ARM y esas cosas en las que se había metido Apple, lo suyo era la veteranía, fiabilidad y polivalencia de x86/64. Con Windows, por supuesto, no tenemos noticia alguna de que en algún momento se animara a probar Linux.
Y así están las cosas… o así estaban hasta la presentación de Qualcomm en Computex 2024. Sí, la presentación en la que tuvimos la confirmación oficial de que Snapdragon X llegará a todos los factores de forma de PC, es decir, que dará el salto al escritorio. Una presentación que, como ya te contamos, no fue especialmente destacable (ni para bien ni para mal, ni frío ni calor), pero que reservaba una sorpresa prácticamente al final. Puedes verla a continuación:
¡Anda! Es el bueno de Justin Long con su Mac (parece haber vuelto a las andadas), solo que parece un poco molesto con las notificaciones y con algunos mensajes de error. Pero entonces vemos que ha accedido a un buscador web para encontrar… ¿qué? ¿cómo? ¿¡ESTÁ BUSCANDO UN PC CON UN SOC SNAPDRAGON!? ¿Qué ha pasado, Justin? ¿Qué fue de los PC con Intel que tanto te gustaron en 2021 y que parecían ser tu elección? ¿Estarán ahora los abogados de Intel revisando la documentación de los contratos para la campaña que hicieron con Long en 2021? ¿Se pondrán de acuerdo con los de Apple para poner una demanda colectiva contra el actor?
Uno de los grandes problemas que enfrenta el ecosistema del software libre es contar con presupuesto más ajustados que los que tienen las grandes multinacionales pero, ¿no sería genial que Canonical invirtiera en una campaña en la que Justin Long reconoce que, en realidad, el hardware es lo de menos, y que a él lo que le gusta es Linux? No sé tú, yo pagaría por ver eso.