Nintendo Switch 2 frente a Xbox Series S ¿cuál sería más potente?

Nintendo Switch 2 está ya bastante perfilada a nivel de especificaciones. Aunque todavía no hay nada confirmado por parte de Nintendo tenemos tanta información de confianza que sabemos, a grandes rasgos, qué es lo que podemos esperar de esa nueva y esperada consola de la compañía japonesa, cuyo lanzamiento se producirá en 2024.

Una de las preguntas que más os estáis haciendo en este sentido es cómo se comparará Nintendo Switch 2 con Xbox Series S, la consola de nueva generación económica de Microsoft, y francamente creo que es una excelente cuestión y un tema muy interesante. Por eso, he querido hacer un análisis comparativo con la información que tenemos ahora mismo para ofreceros una respuesta.

Antes de poder dar una respuesta concreta es necesario ver las especificaciones de cada consola, ya que estas nos darán la información que necesitamos para poder establecer una comparativa directa y extraer datos concretos de rendimiento que nos sirvan como referencia. También tendré en cuenta las tecnologías soportadas por cada consola, y os explicaré cómo pueden llegar a marcar la diferencia.

Especificaciones de Nintendo Switch 2 (estimadas)

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• Pantalla LCD de 8 pulgadas con resolución 1080p. Más adelante llegaría una versión con panel OLED.
• SoC NVIDIA Tegra T239, una versión personalizada de Tegra Orin. Debería utilizar el nodo de 5 nm de TSMC, aunque hay rumores que dicen que podría utilizar el nodo de 8 nm de Samsung, algo que tendría sentido a nivel de costes pero que sería contraproducente en materia de eficiencia y temperaturas. El TDP compartido sería, como máximo, de 30 vatios.
• CPU de 8 núcleos ARM Cortex-A78C, de los cuales uno o dos núcleos quedarían reservados a sistema operativo y aplicaciones básicas. No tengo información sobre sus posibles frecuencias de trabajo, pero la GPU tendría preferencia en este sentido.
• 12 GB o 16 GB de memoria LPDDR5 unificada sobre un bus de 128 bits, lo que nos dejaría un ancho de banda de 102,4 GB/s.
• GPU personalizada basada en la arquitectura Ampere, pero con mejoras exclusivas de  Ada Lovelace. Tendría 1.536 shaders, 12 núcleos RT para trazado de rayos, 48 unidades de texturizado, 48 núcleos tensor para IA, 24 unidades de rasterizado y Optical Flow Accelerator de tercera generación (Ampere, sin soporte de generación de fotogramas).
• Otras claves importantes de la GPU: la velocidad de trabajo debería situarse entre los 1.000 MHz y los 1.400 MHz, dependiendo de si se usa la consola en modo dock o en modo portátil, de lo que consiga escalar NVIDIA este núcleo gráfico con un TGP tan limitado. Tendrá conectividad DisplayPort con un ancho de banda al nivel de una salida HDMI 2.1, contará con códecs NvEnc de octava generación (al nivel de Ada Lovelace), utilizará gestión dinámica de frecuencia mejorada (al nivel de Ada Lovelace) y tendrá nuevo motor de descompresión de archivos.
• En cuanto a tecnologías soportadas, una GPU de ese tipo sería compatible con DLSS 2 Súper Resolución y con Reconstrucción de Rayos, aunque esta última tecnología no tendría un uso real porque está pensada especialmente para el trazado de trayectorias.
• No será compatible con Generación de Fotogramas de NVIDIA porque estará equipada con un Optical Flow Accelerator de la generación anterior (Ampere). Tened en cuenta que esto podría cambiar, aunque es poco probable.
• Unidad de almacenamiento SSD PCIe o UFS con al menos 128 GB de capacidad.

Especificaciones de Xbox Series S

• APU AMD personalizada y fabricada en el nodo de 7 nm de TSMC.
• CPU Zen 2 con 8 núcleos y 16 hilos a 3,6 GHz (3,4 GHz con 16 hilos activos). Normalmente trabaja en modo 8 núcleos con SMT desactivado.
• GPU Radeon RDNA 2 con 1.280 shaders, 80 unidades de texturizado, 32 unidades de rasterizado y 20 unidades de aceleración de trazado de rayos de primera generación.
• El núcleo gráfico funciona a 1.565 MHz y tiene un TBP compartido con la CPU de 100 vatios, lo que le permite escalar a frecuencias mucho más altas que una solución integrada para consola portátil, donde el espacio, la refrigeración y el consumo son mucho más limitados.
• 10 GB de memoria GDDR6 unificada repartida en dos bloques, uno de 8 GB con un ancho de banda de 224 GB/s y otro de 2 GB con un ancho de banda de 56 GB/s. Este último bloque es el que se reserva a sistema operativo y aplicaciones, aunque Microsoft liberó 512 MB adicionales para juegos de este bloque.
• SSD de 512 GB PCIE Gen4 a 2,4 GB/s en velocidad de lectura secuencial.
• Sin unidad óptica, utiliza únicamente el formato digital.
• Soporte de DirectX 12_2, que es el nivel más alto ahora mismo dentro de la versión Ultimate de dicha API. Acelera trazado de rayos, es compatible con AMD FSR 2 y por arquitectura podría soportar también sin problema AMD FSR 3 Fluid Motion Frames.

Nintendo Switch 2 frente a Xbox Series S: potencia bruta

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Ese listado de especificaciones que acabamos de ver nos permite empezar a hacernos una idea de cómo se comparan ambas consolas, pero ambas utilizan arquitecturas muy diferentes. También tienen distintas configuraciones de TDP, lo que obviamente afecta al rendimiento máximo que son capaces de alcanzar y de mantener, siendo la más limitada en este sentido Nintendo Switch 2.

Xbox Series S utiliza una CPU x86 basada en la arquitectura Zen 2, pero altamente personalizada. Su procesador tiene importantes recortes tanto a nivel de FPU como de frecuencias de trabajo, y también la caché L3, que se reduce de 32 MB a 8 MB. Con una CPU ARM Cortex-78C de 8 núcleos podríamos llegar a una configuración máxima de 8 MB de L3, pero tendríamos mayores limitaciones a nivel de frecuencia y su rendimiento en general sería mucho más bajo que el de la CPU Zen 2 que monta Xbox Series S.

Lo mismo ocurriría con la GPU de Nintendo Switch 2, aunque este componente es sin duda el más interesante, porque utilizará, en teoría, una arquitectura más avanzada que el núcleo gráfico de Xbox Series S, ya que será una solución personalizada basada en Ampere pero con mejoras exclusivas de Ada Lovelace. Si finalmente se opta por un una configuración con 1.536 shaders y una velocidad aproximada, en modo portátil, de alrededor de 1 GHz su potencia bruta sería de 3,07 TFLOPs en FP32, una cifra que quedaría por debajo de los 4 TFLOPs que de Xbox Series S.

Sé lo que estáis pensando, que los TFLOPs no lo son todo cuando hablamos de juegos, y tenéis toda la razón, pero he querido daros este dato para que tengamos una referencia sólida de la que partir. También influirá mucho en el rendimiento del núcleo gráfico en juegos el ancho de banda del sistema  de memoria, y en este caso Nintendo Switch 2 solo llegaría a 102,4 GB/s, menos de la mitad de esos 224 GB/s de ancho de banda que tiene la consola de Microsoft.

Tenemos una CPU con un rendimiento inferior, menos potencia en FP32 y la mitad de ancho de banda, tres datos que ya nos permiten intuir que a nivel de potencia bruta en juegos Nintendo Switch 2 va a estar claramente por debajo de la consola de Microsoft. Sin embargo, estos datos también dejan claro algo muy importante, y es que esta portátil debería superar sin problemas a PS4.

Si Nintendo configura esta consola con 12 GB de memoria unificada los desarrolladores tendrán bastante margen para trabajar sin problemas, y los ports de títulos de la generación actual a Nintendo Switch 2 deberían ser relativamente sencillos y mantener un nivel de calidad bastante digno, algo muy diferente de lo que ocurría con las adaptaciones a Nintendo Switch, que normalmente llegaban con calidades ultra bajas y resolución dinámica a 360p. En los noventa jugábamos a Quake en resolución 320p, así que podéis haceros una idea.

Tampoco debemos olvidarnos de que al final estamos hablando de una consola híbrida, y que esta va a estar limitada a nivel de TDP. Lo más probable es que Nintendo la coloque en un margen de 30 vatios, lo que supondría una diferencia muy grande frente a Xbox Series S, que tiene un TDP de 100 vatios. Esto es posible porque dicha consola es de sobremesa, tiene mayor tamaño y peso, y puede montar sistemas de alimentación y de refrigeración más potentes.

Tecnologías soportadas: Nintendo ganaría la partida

Aunque a nivel de potencia bruta tendríamos un ganador claro, y es totalmente lógico. Sin embargo, en lo que tecnología respecta Nintendo Switch 2 sería una consola más avanzada, y esto podría permitirle acortar diferencias con Xbox Series S. La tecnología más importante sería NVIDIA DLSS 2, que realiza un proceso de reconstrucción y reescalado de la imagen acelerado a través de los núcleos tensor y utilizando inteligencia artificial.

Con DLSS 2 no solo es posible mejorar el rendimiento, sino que además escala mejor y se mantiene una mayor calidad de imagen incluso partiendo de conteos de píxeles más bajos, lo que sitúa a este tecnología claramente por encima de FSR 2 de AMD. Para que os hagáis una idea, DLSS 2 en modo rendimiento con resolución 1080p se suele ver casi igual de bien que FSR 2 en modo calidad con la misma resolución.

Teóricamente, esa GPU Ampere podría trabajar también con la interpolación de fotogramas de AMD FSR 3, así que no debería haber problemas de compatibilidad en este caso. Por otro lado, una adaptación de la Reconstrucción de Rayos a las posibilidades reales de Nintendo Switch 2 podría llegar a marcar también una diferencia importante. No debemos olvidar, además, que un núcleo RT de tercera generación de NVIDIA es mucho más avanzado y rinde mucho mejor con trazado de rayos que uno basado en RDNA 2.

Con todo, en este caso las limitaciones a nivel de ancho de banda de Nintendo Switch 2 afectarán negativamente a su rendimiento con trazado de rayos, tanto que creo que podría acabar quedando incluso un poco por debajo de Xbox Series S en ese sentido. Pensad que no hablamos de una diferencia de un 20% o de un 50%, sino que la consola de Nintendo tendría menos de la mitad de su ancho de banda.

En líneas generales estoy convencido de que, si se cumplen las especificaciones que hemos visto en este artículo, Nintendo Switch 2 podrá ofrecer una experiencia muy buena en modo portátil incluso con juegos actuales en 1080p, y la tecnología DLSS 2 en modo rendimiento debería conseguir un resultado excelente en una pantalla de 8 pulgadas.

Siento una gran curiosidad por ver qué sería capaz de ofrecer Nintendo Switch 2 en modo dock. Soy consciente de que no podemos esperar milagros en este sentido, porque al final lo más probable es que ocurra lo mismo que con el modelo original, es decir, que se produzca un aumento de frecuencias en CPU y GPU, pero esto podría ser suficiente para mejorar el rendimiento de forma considerable en juegos. Pensad que un simple aumento de la velocidad de la GPU la lleve de los 1.000 MHz a los 1.300 MHz aumentaría la potencia en FP32 a 3,99 TFLOPs.

Cómo quedaría posicionada la nueva consola de Nintendo

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Ya os he respondido a esta pregunta de una manera bastante simple anteriormente, pero voy a profundizar un poco más en este tema para que no lo tengáis más claro. Si se cumplen las especificaciones que hemos visto en este artículo, Nintendo Switch 2 sería más potente que PS4 incluso en modo portátil, y sí, gracias a su soporte de tecnologías más avanzadas y al uso de una unidad SSD o UFS ofrecería una experiencia muy superior en juegos.

La pregunta que podemos hacernos ahora es si sería superior a PS4 Pro, y la respuesta es que sí en muchos aspectos. Esta consola tiene un GPU superior en potencia bruta, pero más limitada a nivel de tecnologías, tiene la desventaja de estar atada a un disco duro de solo 100 MB/s y su CPU Jaguar genera un cuello de botella enorme, tanto que la versión de Cyberpunk 2077 para dicha consola queda en ridículo si la comparamos con la versión de Xbox Series S.

Nintendo tiene una oportunidad de oro con esta consola, y para NVIDIA también podría ser un producto muy importante, porque si las cosas salen tal y como os he comentado en este artículo ese chip Tegra personalizado podría generar un enorme interés en el diseño de futuras consolas. Sí, me refiero a las Xbox y PlayStation de próxima generación, que de momento utilizan APUs Ryzen de AMD, pero que podrían acabando por dar el salto a una solución NVIDIA.

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