Turtle Beach Stealth Pro, análisis

En pocos años los auriculares para videojuegos han dado forma a una subcategoría tecnológica propia que, además, se ha convertido en una de las más competitivas de la industria. Productos para todos los gustos y presupuestos inundan los lineales y catálogos online abrumando en ocasiones al usuario medio que no tiene claro qué elegir.

En este sentido, firmas con tanta experiencia como Turtle Beach son una garantía. Hasta ahora, la compañía californiana estaba siempre presente en cualquier elección de auriculares de gama media pero los nuevos Turtle Beach Stealth Pro apuntan todavía más alto y quieren jugar la liga de los mayores. Vamos a conocerlos un poco más en este análisis.

Antes de comenzar conviene destacar que hay dos versiones de este dispositivo, una diseñada para PS4/PS5 y otra para Xbox que tienen el mismo precio. Hemos probado la segunda que, además, es compatible tanto con cualquier consola como con PC y otros dispositivos así que nos parece la compra más inteligente a no se que valoremos el punto de personalización extra.

Turtle Beach Stealth Pro, especificaciones técnicas

• Auriculares de diadema, transductores Nanoclear™ de 50 mm con imanes de neodimio
• Respuesta de frecuencia: 10 Hz – 22 kHz
• Cancelación de ruido activa variable
• Micrófono extraíble con cancelación unidireccional. 100Hz – 8 kHZ
• Conectividad con transmisor inalámbrico sin retardo (2,4 GHz) para Xbox, PS4/PS5, PC, Mac y Nintendo Switch
• Bluetooth
• Incluye cargador de baterías, dos baterías recargables, bolsa de transporte, guía de inicio y pegatina.
• Precio: 329 euros

La declaración de intenciones de estos auriculares como producto premium comienza incluso antes de abrir un cuidado embalaje donde la marca aprovecha para presumir de potencial técnico. Los cascos vienen acompañados de un completísimo kit de accesorios y de una guía rápida que nos servirá para ponerlos en funcionamiento en pocos minutos. En cualquier caso, os recomendamos echar un vistazo al manual completo e investigar en las opciones de personalización para dejar el audio a vuestro gusto.

Los Turtle Beach Stealth Pro no son unos cascos discretos ni ligeros pero, a cambio, ofrecen una calidad de construcción y una comodidad en sesiones largas de juego a años luz de productos más baratos donde el plástico es el denominador común. A pesar de su espíritu gamer, no hay colores estridentes ni lucecitas que acaben por cansarnos al poco tiempo.

Merece la pena destacar el esfuerzo por la ergonomía realizado por la marca, con un sistema de ajuste sólido pero que permite el juego suficiente para adaptarse a cualquier tipo de cabeza y que el peso (400 gramos sin micro) se reparta en los puntos clave para no resultar molesto. Mención especial para el diseño de las almohadillas, muy cómodas, poco calurosas y que permiten jugar con gafas sin problema. Sobresaliente sin dudas en este punto.

El mejor modo de aprovechar estos cascos es con el transmisor dedicado, sobre la banda de 2,4 GHz y que garantiza que no tendremos retrasos ni microcortes. Además, funciona como base de recarga de las baterías y, como se incluyen dos de serie, nunca estaremos faltos de autonomía. En nuestras sesiones de juego con Xbox rondamos las 9-10 horas de uso continuo).

En el auricular derecho, Turtle Beach integra controles físicos para encender y apagar, controlar la cancelación y activar el Bluetooth. El sonido se controla con una rueda integrada de gran tamaño y precisión, aunque nos hubiera gustado que fuera más silenciosa. En Xbox, también podemos usarla para controlar la mezcla de sonido de juego y chat, muy útil en determinadas partidas online para decidir en cada momento qué grado de interacción con los demás jugadores queremos tener.

En lo relativo a calidad de audio hablamos de un producto notable con una ecualización de serie muy centrada en los videojuegos y, en concreto, en los FPS. Ofrecen un punto de graves que puede ayudar a detectar pasos o sonidos de recarga e incluyen una función de “oído sobrehumano” que potencia todavía más este punto. En nuestras pruebas funciona mejor en unos juegos que en otros (de nuevo, merece la pena investigar las opciones de audio) y nos convenció mucho en partidas a Call of Duty: Warzone o Halo Infinite, entre otros. Eso sí, tened en cuenta que a cambio de esta “ventaja” perdemos muchos matices de música y efectos de sonido así que solo es recomendable en escenario competitivo.

El nivel de sonido máximo no es muy alto, pero sí nos parece suficiente para la gran mayoría de usuarios. Además, recomendamos mantener activo el sistema de cancelación activa que nos permite una gran sensación de inmersión manteniendo el volumen en niveles saludables.

El micro extraíble ha resultado ser una grata sorpresa, especialmente por lo bien que separa nuestra voz del ruido de fondo. Incluso en escenarios donde no estamos jugando solos se puede hablar por el chat sin problemas. Obviamente, el resultado con el micro integrado es peor, pero es un hardware secundario al que pocos usuarios recurrirán cuando se trata de jugar un buen rato.

Para sacar el máximo partido al sistema podemos usar una app dedicada desde móvil y ordenador que permite personalizar cualquier ajuste (incluyendo la personalización de los botones físicos) y crear preajustes (para un juego, para ver películas) que podemos cargar en el auricular directamente.

Conclusiones

Los Turtle Beach Stealth Pro son un producto excelente, que combinan un alto nivel constructivo, gran calidad de sonido y todas las prestaciones que podemos pedir a la gama alta. Funcionan con prácticamente cualquier dispositivo y se desenvuelven bien tanto con videojuegos como con cualquier contenido multimedia.

En el lado positivo merece la pena destacar su comodidad (si usáis gafas, deben estar entre vuestras opciones) y su foco en ayudar a los jugadores a ser mejores en sus partidas competitivas gracias a las funciones especiales. El micrófono es fantástico y, en general, ofrece una experiencia estupenda en largas sesiones de juego.

Como punto negativo solo he echado en falta una mayor autonomía. No es un problema grave, gracias a la decisión de incluir dos juegos de baterías recargables pero las 10-12 horas reales se quedan cortas en comparación con la competencia en este rango de precios.

Resumiendo, un sistema fantástico, absolutamente recomendable y que debería estar en la lista de candidatos para cualquiera que busque unos auriculares de gama alta con foco en disfrutar al máximo de sus sesiones de videojuegos.