GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC, análisis: prueba de rendimiento, consumo y temperaturas
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC es una tarjeta gráfica de gama media que no solo cuenta con un diseño totalmente personalizado, sino que además posiciona un escalón por encima de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle que tuvimos la oportunidad de analizar justo ayer, y que como vimos era capaz de superar ligeramente el rendimiento del modelo Founders Edition.
Como hemos dicho, en el caso de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC estamos ante un modelo superior tanto por su diseño como por su calidad de construcción, algo que se deja notar a simple vista, solo tenéis que mirar las fotos para daros cuenta de que, comparada con la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, juega claramente en otra liga.
Pero esto no es todo, la primera trae también un toque de iluminación LED RGB, tiene un sistema de refrigeración más voluminoso, lo que hace que sea más grande y que ocupe más espacio, y viene con overclock de fábrica, algo que obviamente debería mejorar su rendimiento, aunque como veremos más adelante la subida de frecuencias es más bien pequeña, y por tanto la mejora de rendimiento real será acorde a esa realidad.
Con este nuevo análisis terminamos nuestra ronda de pruebas de la nueva gráfica de NVIDIA, un modelo que ciertamente no ha marcado un gran salto de rendimiento en potencia bruta frente a la generación anterior, pero que como ya os he dicho en otros análisis lo ha compensado con un consumo sobresaliente, mejoras en trazado de rayos y con el soporte de DLSS 3, una tecnología que supone una diferencia enorme en juegos compatibles.
GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC: cosas que debes saber
Esta tarjeta gráfica monta, como ya sabemos, una GPU AD106 configurada con un total de 4.352 shaders. A pesar de la reducción de shaders que tenemos frente a la GeForce RTX 3060 Ti, que tiene 4.864 shaders, la GeForce RTX 4060 Ti es entre un 10% y un 15% más potente en rasterización, y en mis pruebas pude confirmar que su consumo medio es de solo 146 vatios.
Esto nos deja una mejora de rendimiento discreta que coloca a la GeForce RTX 4060 Ti en un nivel de rendimiento similar al de la GeForce RTX 3070, pero arroja una relación de eficiencia espectacular, ya que esta última tiene un consumo de 220 vatios. Ese salto ha sido posible gracias a las mejoras que introduce la arquitectura Ada Lovelace, y al uso del nodo de 5 nm de TSMC.
Sin embargo, si introducimos en la ecuación el trazado de rayos la cosa cambia, y en algunas pruebas vemos que la GeForce RTX 4060 Ti se acerca a la GeForce RTX 3070 Ti. Esto ha sido posible gracias a los núcleos RT de tercera generación, pero todavía nos queda otra clave importante que debemos tener muy en cuenta, el DLSS 3.
Con esa tecnología la GPU puede generar un fotograma adicional totalmente independiente de la CPU por cada dos fotogramas renderizados de manera tradicional. Cuando la activamos en juegos compatibles la diferencia que marca es tan grande que la GeForce RTX 4060 Ti puede llegar a multiplicar por cuatro la tasa de fotogramas por segundo.
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC mantiene, como es evidente, todas esas claves. Es una tarjeta gráfica que trae todos los avances que NVIDIA ha introducido con la arquitectura Ada Lovelace, y que ya os he explicado en ocasiones anteriores. No voy a volver a profundizar en ello porque es innecesario, pero si queréis darle una vuelta os invito a leer el análisis de la GeForce RTX 4060 FE, donde encontraréis toda la información sobre el núcleo AD106, y sobre dicha arquitectura.
GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC: análisis externo
En líneas generales se aprecia un salto importante en calidad de construcción y en términos de diseño frente al modelo Eagle, y es totalmente normal puesto que, como anticipamos, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC posiciona en un escalón superior. Incluso en las sensaciones que cada modelo transmite al tacto queda claro que el espacio que ocupa cada una de estas tarjetas gráficas.
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC tiene una estética muy cuidada que hace honor a su nombre, ya que adopta un perfil gaming bastante marcado, aunque sin caer en estridencias innecesarias. Su tamaño es bastante grande, algo que salta a la vista en las fotos, aunque la he acompañado de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle para que tengáis una referencia más clara. Podéis ampliar la galería haciendo clic en ella.
Como se puede apreciar, el modelo Eagle de GIGABYTE ocupa solo dos ranuras de expansión, mientras que la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC excede las dos ranuras de expansión por su voluminoso sistema de refrigeración, y también es un poco más larga que aquella, ya que mide 281 mm.
El sistema de refrigeración que utiliza la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC está formado por tres ventiladores Windforce de 80 mm que pueden girar de forma alternativa, algo que como recordarán nuestros lectores habituales mejora la presión del aire y la refrigeración de la tarjeta gráfica sin incrementar el nivel de ruido. Los ventiladores están lubricados con nano grafeno, lo que ayuda a reducir el ruido y dobla su vida útil.
Los ventiladores se asientan sobre un radiador de aluminio de gran tamaño dividido en bloques interconectados por tubos de cobre. La parte principal, de la que salen esos tubos de cobre, hace contacto con la GPU y con la memoria gráfica, algo muy importante ya que evita que el calor pueda acumularse en ambos componentes, y supone toda una garantía en términos de refrigeración.
En el lateral podemos ver la toma de alimentación de 8 pines que viene, además, con un indicador luminoso para asegurarnos de que la inserción del conector se ha realizado correctamente. No tendremos que recurrir a adaptadores, y también podemos apreciar el interruptor de cambio de BIOS, que nos permite alternar entre una con overclock y otra silenciosa. Justo en el extremo izquierdo tenemos la serigrafía GIGABYTE, y en ella se encuentra un sistema de iluminación LED RGB totalmente personalizable.
Nos vamos a la parte posterior, y nos encontramos una placa metálica de gran calidad que aporta solidez y refuerza la estructura de la tarjeta gráfica. Esta también contribuye a la disipación del calor, y como podemos apreciar tiene una apertura en su extremo para permitir el paso del aire y acelerar el proceso de enfriamiento del radiador.
En la zona trasera, que es la que va atornillada al chasis, tenemos dos conectores DisplayPort 1.4a y dos HDMI 2.1. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC utiliza también el diseño Ultra Durable, lo que significa que ha sido fabricada con componentes de alta calidad (condensadores, bobinas, étc). A pesar de que viene con overclock y con iluminación LED RGB no tendremos ningún problema para utilizarla con una fuente de alimentación de 500 vatios.
Especificaciones de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC
- Núcleo gráfico AD106 en 5 nm.
- 22.900 millones de transistores.
- Graphics Processing Clusters (GPCs): 3.
- Texture Processing Clusters (TPCs): 17.
- 4.352 shaders a 2.310 MHz-2.580 MHz, modo normal y turbo.
- 136 unidades de texturizado.
- 136 núcleos tensor de cuarta generación.
- 48 unidades de rasterizado.
- 32 núcleos RT de tercera generación.
- Bus de 128 bits.
- 8 GB de GDDR6 a 18 GHz (288 GB/s de ancho de banda).
- 22,46 TFLOPs de potencia en FP32.
- 51 TFLOPs en trazado de rayos.
- 353 TFLOPs en FP8 (IA).
- 32 MB de caché L2 (554 GB/s efectivos).
- Utiliza el estándar PCIe Gen4 x8.
- TGP de 160 vatios.
- Precio de lanzamiento: 475,99 euros.
Comparada con la versión Founders Edition, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC funciona a 45 MHz más. Esto supone una diferencia pequeña, pero cuando se aplica el turbo dinámico que utilizan las GeForce RTX 40 puede escalar considerablemente y representar una ligera mejora de rendimiento. Como cabía esperar por su diseño, su calidad de construcción y ese ligero overclock que trae, es un poco más cara que el modelo de referencia.
Equipo de pruebas para el análisis
- Procesador Intel Core i9-13900K
- Placa base GIGABYTE Z790 AERO G.
- Sistema de refrigeración líquida todo en uno Corsair iCUE H150i Elite LCD con tres ventiladores de 120 mm.
- 32 GB de memoria DDR5 Corsair Vengeance RGB a 6.000 MHz con latencias CL40.
- Unidad SSD WD Black SN850 de 2 TB con interfaz PCIe Gen4 x4, capaz de alcanzar velocidades de 7.000 MB/s y 5.300 MB/s en lectura y escritura secuencial.
- Tarjeta gráfica GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC.
- Fuente de alimentación Corsair HX1500i de 1.500 vatios con certificación 80 Plus Platinum.
- Windows 11 actualizado a la última versión disponible.
- Pasta térmica Corsair XTM70.
El banco de pruebas es el mismo que hemos utilizado con los otros dos modelos que hemos analizado, la Founders Edition y la Eagle. Esto es fundamental, porque nos permite evitar discrepancias que se producirían al introducir hardware diferente, y nos facilita una comparativa directa debidamente fundamentada y sin cuellos de botella. Como os dije en los otros dos análisis, esta configuración es suficiente para que cualquier tarjeta gráfica pueda desarrollar todo su potencial sin tener cuellos de botella graves.
Rendimiento de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC en pruebas sintéticas y aplicaciones profesionales
Abrimos nuestra ronda de pruebas de rendimiento en aplicaciones sintéticas y profesionales con el archiconocido Blender, una plataforma que como ya sabéis es una de las más utilizadas para renderizado y modelado 3D. La unidad de medida que determina el rendimiento son las muestras por minuto, y cuanto más alto sea este valor, mejor.
Rendimiento en Blender
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC consigue una puntuación de 2.274 en «Monster», 1.068 en «Junkshop» y 1.148 en «Classroom», lo que significa que es un poco más potente que la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, un modelo que logró una puntuación de 2.246 muestras por minuto en «Monster», 1.052 muestras por minuto en «Junkshop» y 1.132 muestras por minuto en «Classroom».
Rendimiento en V-Ray
Esta es una prueba que mide también el rendimiento en renderizado 3D, y que puede aprovechar el hardware especializado de las GeForce RTX para mejorar el rendimiento. En modo CUDA prescinde de dicho hardware, y por tanto tenemos un resultado distinto e inferior. Los valores que obtiene la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC son buenos, y supera a la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle en ambos modos, como podemos ver en las imágenes adjuntas.
En modo CUDA la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC supera al modelo Eagle por poco, ya que consigue 1.405 «V-pahts» y la Eagle llegó a los 1.382 «V-paths». En modo RTX la primera consigue 1.886 «V-rays» y la segunda 1.877 «V-rays». Esto es posible gracias a ese ligero overclock que trae de casa, como ya os he explicado anteriormente.
Rendimiento en 3DMark DLSS 3
Esta prueba nos permite comparar el margen de mejora que podemos conseguir con la tecnología DLSS 3 (Super Resolution y generación de fotogramas), y es un claro ejemplo del valor que representan tanto la IA aplicada a juegos como los núcleos tensor y el nuevo Optical Flow Accelerator que introdujo NVIDIA con la arquitectura Ada Lovelace, y que es el que hace posible la generación de fotogramas.
Sin DLSS 3 la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC logra 3,41 FPS, y con dicha tecnología activada el rendimiento sube a 62,47 FPS. Hay un salto enorme, y está en línea con lo que hemos visto en los otros dos análisis, aunque en este caso hay una leve mejora gracias al overclock que trae de casa.
Esta tarjeta gráfica supera los 61,80 FPS que logra el modelo Eagle, y alcanza una frecuencia de trabajo ligeramente mayor, ya que como podemos ver en las gráficas adjuntas (haced clic para ampliar) llega a los 2.865 MHz, aunque no es capaz de mantenerlos de forma totalmente estable. El pico máximo de fotogramas por segundo también es más alto, puesto que alcanza los 75,45 FPS, y la temperatura de trabajo se mantiene casi siempre por debajo de los 65 grados C. Un buen resultado en general, sin duda.
Rendimiento en Octanebench
Con esta prueba podemos medir el rendimiento de una tarjeta gráfica en renderizado 3D con trazado de rayos, y también es capaz de sacar partido al hardware especializado que traen las tarjetas gráficas GeForce RTX. En líneas generales no hay sorpresas, ya que el resultado que hemos obtenido sigue la línea que habíamos ido viendo, y la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC supera de nuevo a la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, aunque la diferencia vuelve a ser muy pequeña.
Rendimiento en Passmark GPU
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC consigue un total de 29.432 puntos, lo que la coloca por encima del 98% de las tarjetas gráficas que tiene Passmark en su base de datos, y también le permite superar a la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, que obtuvo 29.162 puntos en esta misma prueba. De nuevo, el «culpable» es ese pequeño overclock.
Rendimiento en 3DMark Spy Extreme
Terminamos con una de las pruebas de rendimiento sintético más conocidas del momento, aunque como ya os he dicho anteriormente no representa el rendimiento real en juegos. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC vuelve a superar levemente a la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, y registra una frecuencia máxima de 2.879 MHz. La temperatura en esta prueba fue más elevada, ya que como podemos ver en las gráficas alcanzó los 66,5 grados C.
Rendimiento de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC en juegos
Podemos sacar en claro, de las pruebas de rendimiento que hemos visto hasta ahora, que ese ligero overclock que trae la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC marca una diferencia pequeña, pero suficiente como para que esta se coloque por encima de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle en rendimiento. Ahora vamos a ver cómo se comporta en juegos, y qué diferencia representa esa subida de frecuencias.
Para variar un poco empezamos con Gears 5, uno de los grandes abanderados del Unreal Engine 4. Con la configuración gráfica máxima, modo locura e iluminación global con 32 rayos, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC logra una fluidez absoluta en 1080p y en 1440p. En 4K consigue mantener medias de 34 FPS, y al reducir la iluminación global a 8 rayos el rendimiento medio sube a 44 FPS. Podríamos llegar a 60 FPS estables en dicha resolución sin problema reduciendo un poco los ajustes gráficos.
Con Ghostwire Tokyo se repite la situación. Si no activamos el trazado de rayos la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC va sobradísima en 1080p, ya que consigue 207 FPS, y también va muy fina en 1440p, puesto que alcanza los 123 FPS. Activar el trazado de rayos reduce significativamente el rendimiento, y es recomendable contrarrestarlo con el DLSS 2 que, como vemos, nos permitirá pasar de 53 FPS a 91 FPS en modo calidad bajo resolución 1440p.
En 4K la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC es capaz de mantener un buen nivel de fluidez sin trazado de rayos, ya que registra 52 FPS de media, pero lo ideal es activar el DLSS 2 en modo calidad para llegar a los 90 FPS. Si vamos a utilizar el trazado de rayos deberemos ajustar el DLSS 2 en modo rendimiento para pasar de 25 FPS a 69 FPS. Los números hablan por sí solos, e ilustran una mejora de rendimiento muy grande gracias al DLSS 2.
Dying Light 2 es un juego muy exigente, incluso sin trazado de rayos activo. Como podemos ver, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC logra 106 FPS en 1080p y 70 FPS en 1440p sin necesidad de recurrir al DLSS 3. En 4K la media es de 34 FPS, pero con activar el DLSS 3 en modo rendimiento subimos a 78 FPS de media.
Con trazado de rayos activado los valores de rendimiento se hunden muchísimo, tanto que en 1080p se reduce a la mitad y en 4K directamente es injugable. Con el DLSS 3 en modo rendimiento podemos mejorar tanto el rendimiento que esos 3 FPS en 4K se convierten en 57 FPS, y en 1440p pasamos de 32 FPS a 94 FPS.
El DLSS 3 también puede hacer «magia» en Destroy All Humans 2 Reprobed, un título donde la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC está muy cómoda en 1080p y 1440p, tanto que no necesitaríamos DLSS 3 para jugar con total fluidez. No obstante, la mejora de rendimiento que lograríamos es tan grande que en 1080p pasaríamos de 121 FPS a 213 FPS, y en 1440p subiríamos de 84 a 140 FPS, y todo con el modo calidad. En 4K sí es recomendable activar el DLSS 3 en modo rendimiento, ya que pasamos de 42 FPS a 85 FPS, es decir, doblamos la tasa de fotogramas por segundo.
En Lyra, un título multijugador basado en el Unreal Engine 5, vemos que la diferencia que marca el DLSS 3 es enorme, tanto en la tasa media como en la mínima. Gracias a dicha tecnología la experiencia deja de ser prácticamente un pase de diapositivas lleno de tirones a convertirse en algo totalmente fluido, y sin tirones marcados.
Pasamos ahora a un juego que no necesita presentación. Microsoft Flight Simulator no solo es exigente, también es propenso a sufrir cuello de botella a nivel de CPU cuando baja la resolución, lo que hace que el DLSS 2 solo sea efectivo hasta cierto punto. Por eso, cuando utilizamos el DLSS 3, que añade la generación de fotogramas, la mejora de rendimiento es muy grande incluso en 1080p. Como podemos ver, el DLSS 3 hace que podamos jugarlo con total fluidez en 1080p y 1440p, y que el rendimiento en 4K pase de unos pobres 19 FPS a unos interesantes 57 FPS.
Con Red Dead Redemption 2 tenemos un título que tira de potencia bruta, y que necesita de una tarjeta gráfica potente para funcionar correctamente. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC cumple tan bien que puede moverlo a 44 FPS en resolución 4K y con calidad máxima. Si activamos el DLSS 2 en modo rendimiento podríamos llegar a una media de 66 FPS sin reducir la configuración de calidad gráfica. También podríamos utilizar el DLSS 2 en modo rendimiento y reducir levemente la calidad gráfica para movernos en la franja de 60 FPS.
Resident Evil 4 Remake generó mucha polémica por el tema del consumo de memoria gráfica, y porque en su lanzamiento daba problemas cuando superábamos el máximo de memoria gráfica de nuestra tarjeta y activábamos el trazado de rayos, algo que no ocurría con las entregas anteriores de la saga que utilizaban el mismo motor gráfico. Este problema ha sido resuelto, y ahora podemos ejecutarlo sin problemas aunque superemos el máximo de memoria gráfica de nuestra tarjeta.
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC logra una experiencia totalmente fluida en 1080p y en 1440p, y las tasas de FPS mínimos son buenas, lo que significa que no se producen microtirones. Sin embargo, al activar el trazado de rayos en 1440p y 4K el rendimiento cae sustancialmente, y aunque podemos compensarlo con el FSR 2 realmente no vale la pena, porque el trazado de rayos que utiliza este juego es muy pobre y en ocasiones incluso empeora el acabado de charcos y pequeñas acumulaciones de agua.
Saltamos ahora a ver hora el rendimiento en A Plague Tale: Requiem, un título que es de los más exigentes que podemos encontrar actualmente, y vemos que la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC consigue 66 FPS en 1080p y 44 FPS en 1440p. En 4K apenas llega a 21 FPS, y si activamos el trazado de rayos tenemos 13 FPS.
Si activamos el DSS 3 en modo calidad la media sube a 125 FPS en 1080p y 92 FPS en 1440p. En 4K también hay una mejora importante, ya que la media pasa de 21 FPS a 50 FPS, y podemos llegar a 65 FPS si lo configuramos en modo rendimiento. Con trazado de rayos activo resolución 4K y DLSS 3 en modo rendimiento la media sube de 13 FPS a 46 FPS.
Nos toca ahora ver los resultados de Shadow of the Tomb Raider, un juego que puede presumir de tener una excelente optimización y una factura técnica tan buena que, todavía a día de hoy, sigue siendo un referente en muchos aspectos. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC va sobrada en 1080p, incluso con trazado de rayos activado, y es capaz de mantener 66 FPS en 1440p con trazado de rayos activo.
Al pasar a 4K la tasa de fotogramas por segundo se reduce notablemente, pero esos 54 FPS de media siguen siendo suficiente para jugar con fluidez. No obstante, podemos llegar a los 82 FPS solo con activar el DLSS 2 en modo calidad. Si queremos activar también el trazado de rayos y mantener la resolución 4K necesitaremos recurrir al DLSS 2 en modo rendimiento, ya que este hará que pasemos de 30 a 67 FPS.
Uno de los mejores juegos que existen a día de hoy a nivel técnico, y un auténtico referente en trazado de rayos. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC logra 68 FPS en 1080p y calidad máxima y aguanta el tipo muy bien al activar el trazado de rayos, ya que como podemos apreciar se mueve en los 40 FPS. Es recomendable activar el DLSS 3 en ambos casos con la configuración en modo calidad, ya que pasaremos a 163 FPS y 110 FPS de media, respectivamente.
En 1440p y 4K el rendimiento baja considerablemente, pero de nuevo podemos activar el DLSS 3 en modo rendimiento para pasar de 40 a 134 FPS en 1440p, y de 27 a 66 FPS en 4K. Si activamos el trazado de rayos con ambas resoluciones la experiencia será óptima en 1440p con DLSS 3, ya que podemos llegar a los 100 FPS, mientras que en 4K tendremos una media de 46 FPS. Con todo, es impresionante porque gracias a dicha tecnología pasamos de 2 FPS a 46 FPS.
Terminamos nuestra ronda de pruebas con Control, un clásico que sigue siendo uno de los títulos más exigentes, y también uno de los que mejor ha utilizado el trazado de rayos, puesto que aplica esta tecnología incluso a los escombros que se generan al destruir el escenario. Como podemos ver, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC va muy bien en 1080p incluso con trazado de rayos, y sin tirar de DLSS 2.
En 1440p esta tarjeta gráfica aguanta el tipo sin trazado de rayos y alcanza los 68 FPS, pero al activar esa tecnología el rendimiento cae a 41 FPS, lo que hace que sea recomendable activar el DLSS 2 en modo calidad para llegar a los 72 FPS. En 4K necesitamos tirar de DLSS 2 en modo calidad para subir de 21 a 65 FPS, y en 4K con trazado de rayos podemos pasar de 12 FPS a 57 FPS con el DLSS 2 en modo rendimiento.
Queda claro, tras ver los resultados de estas pruebas de rendimiento, que la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC es una tarjeta gráfica un poco más potente que la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, gracias a ese ligero overclock que trae de casa, y da lo mejor de sí en 1080p y 1440p, dos resoluciones en las que se mueve muy cómoda.
Su rendimiento con trazado de rayos también es digno de mención, aunque sin duda el plato fuerte lo tenemos en el dúo que forman Super Resolution y la generación de fotogramas, ya que ambas tecnologías nos ayudan a mejorar enormemente el rendimiento. Gracias a estas tecnologías puede ofrecer también una buena experiencia en muchos casos incluso con resolución 4K.
Temperaturas, consumo y frecuencias de trabajo
Como la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC viene con un pequeño overclock cabe esperar un ligero aumento de las temperaturas de trabajo, pero os puedo confirmar que en juegos sus valores se han mantenido en una media de 64 y en una máxima de 65, dos valores muy buenos. Esto tiene una explicación, y es que al final ese overclock es muy pequeño, y el sistema de refrigeración que utiliza la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC excede las necesidades reales de refrigeración de esta tarjeta gráfica, lo que se traduce en esas excelentes temperaturas que estamos viendo.
Echando un vistazo al consumo tampoco vemos nada raro, tenemos una media un vatio más alta que la de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, pero su máximo está un vatio por debajo. Los valores de consumo que registra esta tarjeta gráfica son muy buenos, y confirman una vez más que la GeForce RTX 4060 Ti es la tarjeta gráfica más eficiente que existe dentro de su categoría. A efectos comparativos, la Radeon RX 6700 XT tiene un consumo de 230 vatios y ofrece un rendimiento inferior.
Terminamos con un vistazo a las frecuencias de trabajo de la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC. Repasar los distintos niveles de frecuencia registrados nos permitirá valorar la estabilidad de las frecuencias, y también ver cómo escala ese pequeño overclock con el modo turbo dinámico de la tarjeta gráfica.
- Mínimo en juegos: 2.715 MHz.
- Media estable: 2.760 MHz.
- Media estable más alta: 2.805 MHz.
- Máximo registrado: 2.865 MHz.
La diferencia que marca ese pequeño overclock que trae la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC se deja notar en todo el escalado de frecuencias, como podemos ver en los datos que os acabo de compartir, aunque la oscilación que se produce es un poco mayor que la que hemos visto en la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Eagle, y esto hace que al final su impacto en el rendimiento sea bastante pequeño. Estamos hablando de una mejora de entre uno y tres fotogramas por segundo, dependiendo del juego y de la configuración gráfica.
Notas finales
La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC se presenta como un modelo personalizado con un diseño y una calidad de acabados premium. Tiene una estética gaming muy cuidada, un sistema de refrigeración de primer nivel y cuenta, incluso, con un toque de iluminación LED RGB que le da un toque de distinción.
A todo lo anterior debemos unir, además, ese pequeño overclock que trae de casa, y que como hemos visto mejora ligeramente el rendimiento frente al modelo FE tanto en juegos como en aplicaciones profesionales, y también en pruebas de rendimiento sintéticas. Con todo esto en mente, es perfectamente comprensible que su precio sea mayor al del modelo de referencia.
No obstante, la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC tiene un precio bastante razonable, ya que se puede comprar desde 475,99 euros, lo que significa que es 35,99 euros más cara que el modelo Founders Edition, y que el modelo Eagle. En este sentido, creo que GIGABYTE ha sabido hilar fino, y que el precio está equilibrado.
A nivel técnico y de rendimiento no queda nada que no hayamos dicho ya en los análisis anteriores. La GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC ofrece un rendimiento excelente en 1080p, rinde muy bien en 1440p y se defiende en 4K, aunque gracias al DLSS 3 es capaz de ofrecer un buen nivel de fluidez incluso en dicha resolución, y en muchos juegos.
Las mejoras que introduce Ada Lovelace tanto en materia de eficiencia como de trazado de rayos, y también en IA aplicada a juegos, son sin duda los valores que destacan en la GIGABYTE GeForce RTX 4060 Ti Gaming OC, y en todas las GeForce RTX 4060 Ti en general. A nivel de rendimiento en rasterización no tenemos un salto tan importante como cabría esperar, pero todas esas mejoras que trae la nueva arquitectura de NVIDIA demuestran que es posible marcar una gran diferencia sin tirar de potencia bruta.
Buen rendimiento en 1440p.
Más potente que la FE.
Bajo consumo.
Calidad de construcción.
Buenas temperaturas.
Mejoras en trazado de rayos.
Rendimiento con DLSS 3.