Intel Arrow Lake-S: primeros detalles y posibles especificaciones

Un nuevo e interesante rumor asegura que los Intel Arrow Lake-S llegarán antes de lo previsto, y que esta generación de procesadores sustituirá a los Intel Meteor Lake-S, cuyo lanzamiento estaba previsto entre finales de 2023 y principios de 2024. Ambas generaciones utilizarán el socket LGA1851, esto no ha cambiado, pero lo importante de esta información es que en teoría Meteor Lake-S habría sido cancelado.

Es importante que tengáis en cuenta que, de momento, todo esto no es más que un rumor, y que por tanto no tiene por qué cumplirse, así que vamos a tomar toda esta información con cautela, sobre todo tras ver las numerosas contradicciones que han ido surgiendo en los últimos días, y que han «confirmado y descartado» la existencia de Meteor Lake-S.

Volviendo a los Intel Arrow Lake-S, esta nueva generación de procesadores utilizará una configuración de 8 núcleos de alto rendimiento y 16 núcleos de alta eficiencia. Los núcleos de alto rendimiento utilizarán la arquitectura Lion Cove, que representa un tock sobre Redwood Cove, y esta última es otro tock sobre Raptor Cove, mientras que los núcleos de alta eficiencia utilizarán la arquitectura Lion Cove, que es un tock sobre la arquitectura Crestmont, que a su vez representa un tock sobre Gracemont.

Por si alguien se ha perdido os recuerdo que un tock equivale a cambios a nivel de microarquitectura para mejorar el IPC, y que con Intel Arrow Lake-S tendríamos dos saltos generacionales frente a Raptor Lake-S, lo que significa que la diferencia de IPC entre ambos podría ser muy grande. También hay que recordar que esta nueva generación de procesadores dará el salto al nodo Intel 20A, y que este supondrá un avance muy grande frente a las generaciones actuales, ya que equivale a los 2 nm.

En total, Intel lanzará tres nuevos chipsets para acompañar al socket LGA1851, el H810, que será el más económico de los tres y se integrará en placas base de gama baja; el chipset B860, que será una solución más completa y equilibrada y dará vida a placas base de gama media y de gama media premium; y por último el chipset Z890, que será el tope de gama y se utilizará para dar vida a las placas tope de gama de dicha generación, y será el único que permitirá hacer overclock a nivel de CPU.

Por lo demás podemos esperar que esta nueva generación esté limitada a memorias DDR5, y que soporte de forma nativa velocidades más elevadas. También ofrecerá soporte del estándar PCIe Gen5, y podríamos ver cambios en el conteo total de líneas PCIe, pero esto todavía está en el aire, así que solo podemos esperar.