Análisis, Vivo X80 PRO: ilumina tu vida con su cámara
Hace unos días nos llegó el modelo Vivo X80 PRO para que pudiéramos testearlo y exprimirlo lo máximo posible. Y es que este dispositivo ofrece de las prestaciones más top del mercado, destacando, sobre todo, su módulo de fotografía gracias a la tecnología de Zeiss. Compite de tú a tú con otros dispositivos de gama alta de 2022 como el Xiaomi 12 Pro o el Samsung S22 Ultra, entre otros.
Especificaciones del Vivo X80 PRO
Pantalla | Super AMOLED LTPO de 6,78 pulgadas 20:9 QHD+ a 3.200 x 1.440 píxeles Refresco a 120 Hz |
Chipset | Qualcomm Snapdragon 8 Gen 1 |
Memorias | 12 + 256 GB |
Cámaras traseras | Principal: 50 megapíxeles f/1.75 Gran angular: 48 megapíxeles f/2.2 Cámara de retratos: 12 megapíxeles f/1.85 Periscopio: 8 megapíxeles f/3.4, zoom óptico 5X |
Cámara frontal | 32 megapíxeles f/2.45 |
Conectividad | Dual 5G/4G WiFi 6 Bluetooth 5.2 NFC GPS Dual USB tipo C |
Batería | 4.700mAh Carga rápida de 80W Carga inalámbrica de 50W |
Dimensiones | 164,57 x 75,3 x 9,1 milímetros |
Peso | 219 gramos |
Sensores | Lector de huellas bajo la pantalla |
Software | Android 12 OriginOS Ocean |
Precio | Desde 1099 euros |
Diseño y manejo
Generalmente estoy acostumbrado a usar mi dispositivo OnePlus 9 que es algo más pequeño que este Vivo pero sin pantalla curvada. Adaptarme a tener una superficie algo más grande que manejar fue fácil. Sin embargo la pantalla infinita y yo no nos llevamos muy bien porque tengo manos estrechas y tiendo a usar el teléfono con una. Esto generalmente afecta bastante a la hora de la comodidad de navegación cuando tienes que pulsar con el pulgar en el otro lado de la pantalla. No obstante, tener una pantalla de casi 7 pulgadas se agradece mucho sobre todo a la hora de ver streaming en Twitch o en YouTube.
Por otro lado, el diseño trasero está bastante bien integrado, ya que a pesar de tener cuatro cámaras, sensor y luz, se recoge todo en el tercio más alto del mismo. Y la verdad que para tener tanta cámara y una pantalla grande no lo hace un teléfono muy pesado, sobrepasando ligeramente los 200 gramos, bastante similar a otros.
En cuanto a la ranura de conexión utiliza el estándar USB-C, en la parte de abajo, y junto a ella tiene el lector de SIM.
Pantalla, interfaz y software
La pantalla del dispositivo es una AMOLED de 6’78 pulgadas y curva en los laterales con resolución de hasta 3200 x 1440 píxeles. El propio dispositivo permite configurar la calidad a FullHD o a 2k, además del refresco a 60hz o 120hz. También, dispone una opción para mejoría visual que consiste en la optimización de color y contraste de algunas imágenes, permitiéndonos elegir en qué aplicaciones se va a aplicar dicha mejora. Todo esto evidentemente consumiendo más energía.
En cuanto a la sensibilidad de la pantalla es correcta. El control biométrico me ha parecido muy óptimo (bastante mejor que otros dispositivos) y la sensibilidad de los gestos también es muy fluida. No obstante, el problema que siempre le veo a este tipo de pantallas es la estética curva, pues a la hora de agarrar el teléfono podemos interferir en los gestos. Siempre he pensado que es más estético que otra cosa.
A nivel de software, el smartphone utiliza un sistema operativo Funtouch, que es un Android personalizado por el fabricante. Además de poder configurar mejoras de pantalla que comentamos antes, ofrece una configuración llamada Modo Ultra Juego que optimiza y ofrece varias opciones interesantes para nuestros juegos.
No obstante, una cosa importante que me parece interesante comentar es la experiencia de usuario que he tenido con las notificaciones de sms y la pantalla de bloqueo, sobre todo a la hora de introducir códigos que se envían como sms. Me refiero a los mensajes cortos para poder autorizar un login o un movimiento bancario. Estos no acaban de mostrarse por completo al recibirse haciendo bastante incómodo tener que estar bajando la notificación. También, algo muy incómodo fue a la hora de conectar por bluetooth el coche, no manteniendo la configuración del volumen del mismo a donde lo establecía. Es decir, cada vez que lo conectaba, no estaba donde yo lo había configurado, teniendo que subirlo o bajarlo cada vez que lo utilizaba.
En cuanto al bloqueo, el desbloqueo facial funciona bastante bien cuando hay luz, pero cuando no la hay la película cambia. Lo primero que hace el dispositivo es encender bastante la pantalla intentando iluminarte, algo bastante molesto al estar en la penumbra. Para poder pasar a la siguiente opción de desbloqueo hay que dar a un botón de desactivar, lo que hará que la pantalla deje de estar tan iluminada y ofrezca otra opción de desbloqueo. En mi caso, tengo configurada la opción de huella y patrón, pero aquí la programación ofrece primero el patrón al control biométrico, un orden que no me termina de convencer ya que es más intuitivo el orden inverso. Y por mucho que he intentado configurar el orden, no lo he conseguido.
Rendimiento y autonomía
La combinación del procesador (Snapdragon 8) y de memoria RAM (12GB) hacen de este terminal una auténtica bestia para el uso del día a día. Se pueden tener bastantes aplicaciones corriendo y cambiar entre ellas a la perfección. Sobre todo he utilizado aplicaciones de mensajería, GPS, GDrive en todas su vertientes, Instagram, fotos y aplicaciones de vídeo y audio.
Además, el teléfono lleva de serie un almacenamiento de 256GB, capacidad más que suficiente para realizar bastantes fotos y vídeos, e incluso instalar aplicaciones pesadas.
Por lo que respecta a la autonomía, suele llegar al final del día si no se le da un uso continuo. En el momento que eso cambia, vamos a necesitar cargarlo en algún momento. Hubiera venido mejor una batería con más capacidad que la que lleva (4700mAh) ya que es lo que se presupone en un teléfono de alta gama de más de mil euros.
También creo que es importante mencionar que es un teléfono bastante duro físicamente ya que varias veces ha sufrido buenas caídas al suelo de distintas formas desde una altura generalmente media, llevando solo la carcasa que lleva de serie, y ha aguantado muy satisfactoriamente. Soy un desastre, lo reconozco.
Cámaras (fotografía y vídeo)
El módulo de fotografía y vídeo es lo más destacable de este modelo, pues utiliza tecnología Zeiss. De hecho esto es lo que más me interesaba de este teléfono, ya que uno de mis hobbies preferidos es la pintura de miniaturas. Una vez terminadas siempre acabas haciendo fotografía de ellas y he echado de menos durante bastante tiempo un teléfono que realizara buenas capturas.
El teléfono cuenta con 4 cámaras traseras, donde la principal dispone de 50 megapíxeles además de un focal f/1’57. Asimismo, las otras cámaras se tratan de una ultra gran angular de f/2’2 de apertura y 48 megapíxeles, otra para retrato de 12 megapíxeles y apertura f/1.9, y un sensor periscópico de 8 megapíxeles de hasta 5 aumentos. Respecto a la cámara frontal, es de 32 megapíxeles con apertura f/2’5.
Pero no todo es fotografía. Este módulo permite realizar vídeos desde 1080p a 30fps, hasta los 8K a 30fps, pasando por los 4K a 60fps. Esto ofrece un buen abanico de opciones si lo nuestro es
A todo esto se le suma el añadido de Zeiss, con un cristal que ejerce de revestimiento antirreflejante y un software de tratamiento de imágenes a la hora de realizar capturas, obteniendo muy buenos colores y bastante equilibrada. También dispone de muchos filtros para los más influencers.
Me ha sorprendido para bien y sobre todo el modo de noche, ya que con otros teléfonos siempre he apreciado mucho ruido además de salir demasiado oscuras y con este bastante poco.
Todo esto hace a este dispositivo uno de los mejores candidatos si lo que más nos interesa es la fotografía y el vídeo.
Sonido
El Vivo X80 PRO lleva de serie unos altavoces integrados estéreos y cumplen perfectamente su función. No obstante, a mi gusto me parece que le falta un poco más de potencia de volumen máximo, ya que comparado con mi anterior dispositivo, el OnePlus 9 PRO, me da la sensación que se queda por detrás. Sobre todo esto lo he notado en la ducha, que es donde suelo usar el propio altavoz del teléfono.
Además, a este nivel el la capa de software también permite añadir mejoras de sonido con la superresolución de audio para los que tengan el oído más fino.
También incluyen en la caja unos auriculares de cable, básicos con micrófono, algo que ya no se ve en muchas marcas.
Conclusiones
Para finalizar, las sensaciones con el Vivo X80 PRO han sido en general bastante positivas, sobre todo a nivel fotográfico y de vídeo. No obstante, la capa personalizada de Android del fabricante que lleva creo que debería de ser algo más pulida e intuitiva.
Creo que es un teléfono muy interesante, y aunque poco conocido, ya está luchando en muy poco tiempo con otros titanes como el Xiaomi 12 Pro y el Samsung S22 Ultra, que hemos comentado al principio. Seguramente en el futuro, Vivo seguirá sorprendiéndonos.