Cinco razones para comprar un PC Windows frente a Mac y otras cinco para apostar por Apple

PC Windows frente a Mac… ¿Qué plataforma elegir en 2023? Un PC no dura para siempre y un día tocará la hora de actualizarlo (si es posible) o de comprar uno nuevo en la búsqueda de mayor rendimiento o autonomía, mejor conectividad, menor consumo, nuevos factores de forma, acceso a las nuevas tecnologías, capacidad de ejecutar el software que necesitamos y en general lograr una mejor experiencia de la principal herramienta informática.

El usuario que necesite/quiera comprar un ordenador personal nuevo en 2023 está de enhorabuena porque acaban de presentarse grandes novedades para las dos plataformas principales. Por un lado, en el CES 2023 se presentaron centenares de equipos nuevos de todos los fabricantes aprovechando el lanzamiento de nuevas plataformas de procesamiento de Intel y AMD, y también nuevos chips gráficos, destacando especialmente los de NVIDIA.

Apple no participa en estas ferias globales, pero la semana pasada ha renovado catálogo con modelos nuevos y como los anunciados con Windows, con protagonismo para los nuevos motores de hardware que en este caso han llegado de los propios chips diseñados por la firma de Cupertino para completar su apuesta por la arquitectura ARM.

Hay otras alternativas a las dos grandes y aquí podemos encontrar a GNU/Linux o el Chrome OS. Lamentablemente, Linux sigue sin alcanzar la cuota de mercado que su calidad de desarrollo, gratuidad y código abierto merece y ello lo penaliza para conseguir que más fabricantes apuesten por el sistema libre. En cuanto al sistema de Google para PCs, sí tiene detrás el soporte de los principales fabricantes y ha mejorado mucho en ventas, pero su impacto es aún limitado.

Hay que decir que los equipos nuevos con sistema preinstalado son los que más suman en cuota de PCs y aquí Microsoft tiene un control total del canal OEM impidiendo el lanzamiento de alternativas. Aunque puedes encontrar fabricantes especializados en Linux y también para Chrome OS, las opciones son tremendamente reducidas frente a lo que llega de Windows y macOS. Pero entre ellas, ¿qué plataforma debo elegir a la hora de comprar un PC nuevo? En este artículo señalaremos las principales ventajas que a nuestro juicio tienen cada una de ellas.

PC Windows frente a Mac: ventajas

Capacidad de elección de hardware

Windows es un sistema operativo independiente del hardware. Microsoft lo diseña pensando en ejecutarse en tantos sistemas como sea posible y el dominio del canal OEM comentado hace el resto. Es el sistema operativo elegido por la gran mayoría de los usuarios finales, los OEM de hardware y los integradores de sistemas, por lo que disfruta de un excelente soporte en todos los ámbitos.

Su flexibilidad para elegir qué tipo de experiencia informática desea cada usuario es enorme, incluyendo la capacidad de crear tu propio PC desde cero, con soporte para los componentes principales (CPU, GPU, RAM, almacenamiento…), secundarios (todo tipo de periféricos y accesorios) y siempre bajo estándares normalizados por la industria.

Lo mismo podemos decir de su versatilidad en factores de forma. Windows soporta desde grandes máquinas de trabajo profesionales a mini-PCs, pasando por diseños especiales de portátiles como los convertibles que no tiene Apple en su catálogo y llegando hasta formatos de placa única como las Raspberry Pi o productos de la Internet de las cosas que Windows también soporta con una versión especial. Si buscas versatilidad y flexibilidad, Windows gana por goleada a Mac.

Actualizaciones de hardware y reparaciones

Pocos fabricantes facilitan de manera general la actualización de hardware como nos gustaría a los usuarios, pero Apple, la que menos. La integración masiva de componentes, chips de memoria soldados, baterías integradas… Por otro lado, Apple lidera el movimiento contra el derecho a reparar y si tienes que llevar un Mac al taller fuera de la garantía (oficiales cuasi obligatorios) vas a tener que dejarte un pastizal.

Como ejemplo, citar la memoria unificada que usa Apple que puede mejorar el rendimiento, pero que descarta la ruta de actualización que ofrecen otros PCs. Conectado con la mayor capacidad de elección de hardware, elegir un PC Windows te ofrecerá por lo general una mayor capacidad para actualizar componentes y mayor oferta en tiendas de terceros para mantenimiento o reparaciones.

Cuando los videojuegos son una prioridad

Si hay una tarea donde Windows domina sobre el resto de plataformas son los videojuegos. Por supuesto, se puede jugar en macOS (al igual que en Linux o Chrome OS) y Apple ha mejorado en soporte de software y en rendimiento los últimos años, pero es incomparable con las posibilidades de Windows, omnipresente entre los jugadores.

Parte de «culpa» la tiene DirectX, la interfaz de programación de aplicaciones (API) propietaria de Microsoft. Aunque existen otras especificaciones estandarizadas para crear contenido multimedia y juegos como OpenGL y su prometedora variante Vulkan, el dominio de Windows en PCs convierte a DirectX en referencia para juegos en ordenadores personales, y con ello, en una de las características más evidentes donde Windows supera a otros escritorios como el de macOS.

Lo vemos directamente en el número de juegos disponibles para cada plataforma, en los estudios que trabajan para una u otra o en las capacidades tecnológicas alcanzadas por cada una de ellas. NVIDIA o AMD crean sus características más avanzadas y optimizan sus tarjetas gráficas pensando en Windows y lo mismo podemos decir de las grandes productoras de videojuegos, de las tiendas digitales como Steam o Epic Games, y del soporte a los juegos VR con modelos Oculus o HTC que tendrás que conectar a un PC con Windows.

Además, Microsoft impulsa el apartado de juegos en PC conectándolo con sus consolas Xbox y sus servicios de suscripción como Game Pass. Los casi 70.000 millones de dólares que Microsoft está dispuesto a pagar por Activision Blizzard es una buena muestra de su ambición en juegos y de un dominio que lejos de reducirse se amplía cada vez más.

Cantidad de software

La cantidad de aplicaciones disponibles para Windows es muy superior a las existentes para macOS y a todo lo que llega de la propia Microsoft hay que sumar las de centenares de desarrolladores que programan para Windows y que cubren cualquier tipo de tarea que necesites. La distancia se amplía aún más si consideramos solo las de código abierto, las gratuitas o las de mercados específicos como el empresarial donde se programa para Windows de manera preferente.

Decir que con la llegada de los nuevos Mac con arquitectura ARM Apple ha cerrado el grifo de manera oficial a la instalación de Windows nativa que con procesadores Intel soportaba y que era una buena manera de que un usuario de Mac también tuviera acceso a las aplicaciones de Windows que necesitara y juegos inexistentes para Mac. Sí pueden ejecutarse bajo virtualización, pero sin el mismo rendimiento.

Hay que mencionar que Apple ha conseguido convertir a la App Store en líder de tienda de apps, pero son para móviles, y no ha conseguido replicar el mismo éxito en el escritorio informático. Quizá ni lo ha intentado… Aquí hablamos de cantidad de aplicaciones (de su número) no de la calidad de los desarrollos y es por ello que no es éste un apartado donde podamos considerar ganador absoluto a un PC Windows frente a un Mac.

Precio

Un Mac tiene sus ventajas como veremos a continuación, pero ten claro que a igualdad de hardware deberás pagar una «prima» que en ocasiones no es baladí. Apple tiene sus seguidores y mercados objetivos y el que quiera entrar en su plataforma deberá pagar por ello. Cuando Apple usaba la arquitectura x86 de Intel la comparación era directa y cualquier componente costaba más caro que su equivalente montado en un PC Windows. Hoy, con ARM, a pesar de la rebaja de costes, los de Cupertino no han bajado el precio de ninguno de sus ordenadores personales.

Y si quieres aumentar el nivel de la CPU, montar una gráfica dedicada o aumentar la capacidad de memoria o el almacenamiento sobre la configuración base, prepara la chequera porque el precio será siempre más elevado que el de ningún otro fabricante de PCs. El «impuesto» de Apple existe, aunque para ser justos hay que decir que es la marca que menos se deprecia con el paso del tiempo (una muestra la tenemos es el elevado precio de la segunda mano) y que los argumentos de calidad de construcción, la experiencia de usuario, soporte oficial y el acceso a un sistema como macOS no lo compense como opinan los millones de usuarios que los usan y no cambian.

Mac frente a PC Windows: ventajas

Si apuestas por ARM

Apple está sorprendiendo a la industria por el gran nivel que están alcanzando sus soluciones de diseño propio bajo arquitectura ARM. El programa silicon (reemplazo de los procesadores x86 de Intel a favor de diseños propios bajo la arquitectura RISC licenciada por ARM) está siendo todo un éxito y bajo esta arquitectura la distancia es sideral con cualquier otro fabricante, incluyendo las alianzas de poderosos actores como Microsoft y Qualcomm incapaces de dar respuesta a lo que llega de Apple.

Y no es magia; es fruto del trabajo de décadas. Es conocido que Apple usa esta arquitectura en sus dispositivos de movilidad (móviles, tablets, wearables…) desde el lanzamiento del primer iPhone, a pesar que Intel le puso un cheque en blanco sobre la mesa para usar arquitecturas x86. La inversión en ingeniería ha sido elevada desde entonces y ha facilitado su uso también en PCs. Pero Apple empezó con ARM mucho antes.

Conviene recordar que los de Cupertino se implicaron en el desarrollo de esta arquitectura poco después que la empresa Acorn Computer lo iniciara a comienzos de los 80. De hecho, un ARM6 fue el motor de la PDA Apple Newton. Y si Apple no es hoy co-fundadora de ARM fue porque Acorn temía que su presencia echara para atrás al resto de fabricantes para usar sus desarrollos y por ello decidió crear una nueva compañía llamada Advanced RISC Machines (ARM) que persiste hasta nuestros días. Será difícil que otro fabricante le quite a Apple su puesto de privilegio en ARM.

Si usas iPhone, iPad, iWatch…

Apple trabaja en una estrategia de «ecosistema completo» que ya quisieran para sí otros fabricantes. De hecho, hace tiempo se rumoreó el desarrollo de un sistema operativo único y una sola tienda de aplicaciones para manejar cualquier producto de Apple. De momento no es el caso, pero el camino parece marcado y la realidad más allá de que sus nombres sean distintos es que tienen muchísimas partes comunes.

Si usas un móvil iPhone o un tablet iPad, en macOS te sentirás como en casa ante su enorme nivel de integración. Y es que muchas de las tareas se complementan a la perfección. Puede responder mensajes de texto en un iPhone usando la aplicación Mensajes en el Mac o usar Handoff para responder o realizar llamadas y en general para continuar cualquier tarea en otros dispositivos distintos donde se iniciaron con la función de ‘Continuidad’.

Muchas de las aplicaciones que usas en su iPhone, como Correo, Mensajes, Calendario, Notas y Recordatorios, tienen la contrapartida en Mac y son inmediatamente reconocibles por cualquier usuario. Otro grupo de funciones que conectan dispositivos llegan de las tecnologías inalámbricas como AirPlay y AirDrop, que permiten usar un Mac como una pantalla inalámbrica o enviar archivos a un iPhone con un solo clic.

O conectas un iPhone a un Mac y usas el explorador de archivos Finder para crear copias de seguridad locales y transferir archivos. O sincronizas las contraseñas Wi-Fi de un iPad y un Mac simplemente vinculados a una misma ID de Apple. O desbloqueas un Mac mediante un reloj inteligente iWatch. Estas funciones y otras, son posible gracias al sistema de almacenamiento en nube iCloud presenta en todo el ecosistema.

Microsoft también está trabajando en esta integración adoptando Android como su sistema móvil de referencia, pero el nivel de integración es simplemente incomparable y si usas un dispositivo móvil de Apple seguramente acabarás en Mac cuando compres un ordenador personal.

macOS

El sistema operativo de Apple es absolutamente fundamental para la experiencia de un Mac y para muchos usuarios motivo suficiente para comprar un ordenador de Apple, Los lectores más jóvenes no lo recordarán, pero hubo un tiempo en que Apple licenciaba su sistema operativo a terceros integradores. Hace tiempo que esa estrategia terminó y hoy solo se puede usar en sus equipos. O por los cuatro entusiastas que aún probamos técnicas de Hackintosh, cada vez más complicadas por el cambio de arquitectura.

macOS es para una parte de analistas el sistema operativo de escritorio más refinado que existe. Combina la confiabilidad de su núcleo Darwin (basado en UNIX para el que cuenta con certificación) con la facilidad de uso de otros sistemas como Windows. Comparte muchos de sus frameworks con otros sistemas de Apple como iOS, iPadOS, tvOS y watchOS, con los que está estrechamente conectado como luego veremos.

Aunque el número de aplicaciones disponibles es incomparable con la de Windows, tiene las principales que todo usuario necesita, de la propia Apple o de terceros, incluyendo la misma Microsoft con la suite ofimática Office para Mac. Internamente, el sistema gráfico es responsabilidad de Quartz y éste de la fantástica interfaz Aqua, muy valorada al igual que su entorno de escritorio OS X Finder.

El enfoque de seguridad ha sido destacado al no necesitar software antivirus, lo mismo que las actualizaciones del sistema, sin los fallos que se repiten sin cesar en Windows. La última versión es la macOS 13 «Ventura» (decimonovena versión principal de macOS) y soporta las dos arquitecturas de procesamiento que todavía maneja Apple, x86-64 de Intel y lo nuevo que va llegando de ARM.

Ciertamente, una plataforma cerrada y limitada a una decena de equipos es más sencilla de desarrollar que algo como Windows que tiene que soportar miles de equipos de fabricantes y componentes distintos, pero macOS tiene una fama bien ganada entre la élite de sistemas para el escritorio y un punto fuerte en Mac.

Los juegos no son una prioridad

Hablar de «juegos en PC» ha sido tradicionalmente sinónimo de «juegos de Windows». Como decíamos arriba, Microsoft ha aprovechado la altísima cuota de mercado de Windows; su control sobre los OEM; componentes como las librerías multimedia DirectX y en los últimos años una mayor integración con su ecosistema Xbox, para hacerse con la gran mayoría del segmento del juego en PC.

Apple no ha ayudado a cambiar esta realidad y las limitaciones hardware para ejecución de videojuegos de los propios Mac son conocidas. Realmente, Apple no cuenta en su catálogo con ningún equipo dedicado para juegos. La mayoría de equipos montan gráficas integradas (antes de Intel y ahora de ARM) insuficientes para el nivel que buscan los grandes jugones y aunque algunos modelos ofrecen en opción gráficas dedicadas, no son las mejores y además elevan el precio de los equipos a cotas poco razonables.

Ello no quiere decir que no pueda jugarse en un Mac. La tendencia a desarrollar juegos multiplataforma ha favorecido la llegada de grandes juegos nativos para Mac y el servicio Apple Arcade ofrece hoy unos 200 títulos. No son los mejores, ciertamente, pero para juego casual sirven y pueden ser suficientes para los usuarios que no tienen a los videojuegos como una prioridad. Y siempre se puede adquirir una consola dedicada por separado, una estrategia de muchos mackeros.

Precio, valor e imagen de marca

Cualquier Mac, comparado con un PC Windows de idénticos componentes (memoria, almacenamiento…) costará más caro. Y no digamos ya si te montas tu propio equipo, algo que no es posible en Apple salvo con el citado Hackintosh que se ha quedado más como un juego para entusiastas que para algo que podamos considerar productivo.

Dicho lo anterior, ¿cómo se valora en precio el funcionamiento del fantástico macOS y el soporte extendido que proporciona Apple? ¿Cómo se valora una calidad de construcción y acabados por lo general por encima de la media? ¿Cómo se valora una experiencia informática de primer nivel en casi todos sus apartados?

El precio de cualquier producto es muy relativo y en tecnología más. También influye el valor por precio y la imagen de marca, y en este último apartado hay poco que debatir: Apple es la número 1. Como sucede con iPhone frente a los móviles Android, un Mac conserva su valor mucho más tiempo que un PC con Windows y solo hay mirar el mercado de segunda mano.

Tú decides. En la comparativa de un PC Windows frente a Mac hay argumentos a favor de uno u otro. Y alternativas a ambos que llegan de GNU/Linux y Chrome OS.