Activision Blizzard tendrá que pagar 18 millones por su caso de acoso sexual

Con su acuerdo con Microsoft pendiente todavía de un fino hilo, parece que finalmente Activision Blizzard ha comenzado a avanzar en la resolución de algunas de las ya conocidas demandas a las que se enfrenta la compañía, habiendo ordenado ahora un juez que tendrá que pagar la cuantía de 18 millones de dólares para resolver una demanda federal que acusa a la compañía de fomentar un lugar de trabajo sexista y discriminatorio.

La Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo de Estados Unidos (EEOC) presentó la demanda en septiembre y esa misma tarde, Activision Blizzard acordó establecer un fondo de por la cuantía total estipulada para los empleados que sufrieron acoso sexual y discriminación de género en el estudio, y que trabajaron en la compañía en el periodo desde el 1 de septiembre de 2016 hasta hoy. Los empleados elegibles y los ex empleados deben optar por recibir un pago y pueden presentar reclamos relacionados con el acoso sexual, la discriminación por embarazo y las represalias.

Aunque este fallo no es ni mucho menos el final de los problemas legales para Activision Blizzard. El Departamento de Igualdad en el Empleo y la Vivienda de California demandó por primera vez al estudio en julio de 2021 tras una investigación de dos años sobre las acusaciones de que el sexismo, el acoso por motivos de género y una «cultura de fraternidad» impregnaban las oficinas de la desarrolladora.

Sin embargo, cualquiera que firme como demandante en la demanda de la EEOC no será elegible para participar en el caso del estado, al menos cuando se trata de acoso, represalia o discriminación por embarazo. No obstante, si tienen reclamos adicionales como desigualdades salariales, todavía podrán presentarse en esta demanda.

Además, el DFEH, los activistas y los empleados de Activision Blizzard han argumentado que la cifra de 18 millones es demasiado baja para compensar adecuadamente a todos los posibles reclamantes, que estiman sería adecuada para un máximo de solo 60 trabajadores, cuando la cifra de afectados asciende a varios cientos. Anteriormente, el DFEH de California luchó contra un fallo similar en el caso de Riot Games después de una demanda colectiva de 2018 que alegaba acoso sexual y discriminación desenfrenados en el estudio. Originalmente se ordenó a Riot que pagara 10 millones de dólares a los empleados elegibles, que tras ser bloqueado argumentando que era demasiado pequeño, acabó siendo revisado para incrementarse hasta 100 millones de dólares.

Todavía sumida en esta espiral de mala reputación, ahora queda por ver si estos pagos millonarios podrían afectar a que, en lugar de Activision Blizzard, acabe siendo Microsoft la que de un paso atrás en lo referente a la compra del estudio.