España regulará la publicidad de las criptomonedas

El panorama de las criptomonedas, a nivel global, dista mucho de ser razonablemente uniforme. Mientras que una lista creciente de países las prohíben por completo, otros como El Salvador las abrazan con auténtica devoción, incluso pese a las señales que apuntan a que de seguir comprando Bitcoin su economía puede entrar en una situación bastante comprometida. Sea como fuere, lo que sí que es evidente es que, sea con uno u otro enfoque, los reguladores empiezan a pisar el acelerador en este sentido.

Y el último ejemplo lo encontramos dentro de nuestras propias fronteras, pues como podemos leer en el BOE de hoy lunes, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) empezará a regular la publicidad de las criptomonedas, en un paso más tras varios comunicados publicados, de manera conjunta con el Banco de España, alertando de los riesgos asociados a la inversión en los criptoactivos, que es la denominación empleada por el regulador para referirse a las criptomonedas.

Durante estos años la CNMV ha alertado sobre las cripto, poniendo el foco en la complejidad, la volatilidad y la potencial falta de liquidez de estas inversiones. No obstante, hasta ahora sus acciones habían sido exclusivamente informativas, esta es la primera ocasión en la que se toma una medida dirigida a regular un aspecto concreto relacionado con las mismas, en un marco regulatorio en el que también se pone el foco en todo lo referido a la publicidad en la que se cuenta con personalidades públicas para lograr un gran alcance.

En concreto, la CNMV deberá ser informada, por parte de los anunciantes y las empresas que comercialicen criptomonedas, con al menos 10 días de anticipación sobre el contenido de las campañas dirigidas a más de 100,000 personas, una cifra que haría necesario informar de sus acciones en este sentido a aquellas celebridades que, como hiciera Iniesta hace unas semanas al promocionar la plataforma de intercambio de criptomonedas Binance en sus cuentas de Twitter e Instagram, una acción que fue reprobada por el regulador.

Según podemos leer en el BOE, es es parte del ámbito de aplicación de la nueva regulación:

c) «Campaña publicitaria masiva»: campañas publicitarias dirigidas a más de 100.000 personas, utilizando cualquier medio publicitario y en base a los siguientes criterios de medición a partir de la información ofrecida por fuentes utilizadas de forma amplia en el sector de la publicidad:

– Televisión: audiencia de los programas en número de espectadores.

– Radio: audiencia de los programas en número de oyentes.

– Medios impresos (diarios, revistas y suplementos): número de lectores.

– Publicidad exterior (en mobiliario urbano, en medios de transporte o en otros soportes): número de personas estimadas que visualizarían el mensaje publicitario o, de no existir esta estimación, el número de personas que conste en el padrón del municipio o municipios en los que se instale la publicidad exterior.

– Medios digitales y buscadores: audiencia y visitantes estimados.

– Redes sociales: el más elevado entre el número de usuarios estimados en las campañas publicitarias y el número de seguidores de las cuentas utilizadas.

– Vídeos patrocinados: número de seguidores del emisor del vídeo

Con la nueva normativa, que entrará en vigor a mediados de febrero, la CNMV podrá realizar seguimiento de las campañas publicitarias relacionadas con las inversiones en criptomonedas, y además tendrá la capacidad legal de incluir advertencias sobre los riesgos que implica dicho tipo de inversiones en estas campañas. Y es que al igual que otras inversiones, incluso las más seguras, están obligadas a informar sobre su nivel de riesgo, no tiene sentido que hasta ahora la promoción de las inversiones en las cripto se haya escapado de tener que hacerlo.

Hace solo unos días hablábamos de un caso un tanto extremo, el de EthereumMax con Kim Kardashian, y de cómo las celebridades deberían poner un poco más de cuidado a la hora de elegir en qué acciones participan. Ahora, al menos en España, con la supervisión por parte de la CNMV, será más difícil que se puedan dar casos así, y además los mensajes publicitarios sobre inversión en criptomonedas se ajustarán más a la realidad, al tener que informar sobre los riesgos asociados, algo que personalmente me parece una muy buena noticia y un paso en la dirección correcta en un contexto tan complejo.