Análisis Edifier S3000 Pro: altavoces premium para quienes huyen de los cables
Cumplir el sueño de disfrutar de sonido de alta calidad sin necesidad de (muchos) cables. Esta es la promesa que nos hacen los chicos de Edifier con unos altavoces que son, por derecho propio, el buque insignia de la marca asiática: S3000 Pro.
Pensados para el usuario que quiere mejorar su experiencia de cine en casa, pero también con vistas puestas en el mercado del audiófilo aspiracional, los Edifier S3000 Pro ofrecen prestaciones de gama alta, manteniendo una relación calidad-precio que resulta difícil encontrar en otras fabricantes, lo que ha convertido a la marca asiática en una de las más populares en marketplaces como Amazon o tiendas on-line como ZocoCity, que amablemente nos ha cedido una unidad de prueba.
Compuesto por dos cajas de 5,6 kg. de peso, Edifier presenta un diseño clásico, en el que para su construcción se ha optado por madera MDF de alta resonancia (21 mm de espesor) y plásticos de alta calidad. Su parte baja ofrece una placa gruesa que proporciona un buen soporte para el altavoz y con la que aspira a evitar las temidas resonancias.
Kleernet o cómo escuchar un CD de forma inalámbrica
Pero hablábamos antes de promesas, o en este caso, de cómo Edifier nos ayuda a librarnos del cable más engorroso con el que tenemos que lidiar cuando queremos instalar una nueva pareja de altavoces amplificados (esto no ocurre cuando nuestros altavoces son pasivos) en nuestra casa: el que une ambos altavoces. Para ello se apoya en Kleernet, una tecnología propietaria de transmisión inalámbrica de audio que presenta varias ventajas sobre Bluetooth.
Gracias a la misma, ambos altavoces se emparejan de forma automática (todo lo que tenemos que hacer es conectar cada unidad a un enchufe diferente y pulsar el botón “Pair”), siendo capaz de transmitir audio sin pérdida a una distancia máxima de 22 metros. Pero decíamos que Kleernet presentaba varias ventajas sobre el más conocido Bluetooth. Las principales son su prácticamente inexistente latencia y la ausencia de interferencias. Para ello Kleernet desarrolla la transmisión inalámbrica de audio en bandas de 2.4 GHz, 5.2 GHz, y 5.8 GHz. Especialmente en las más altas (la de 2.4 GHz está pensada para su uso en grandes distancias), la competencia con otras señales inalámbricas como pueden ser redes WiFi, Bluetooth, FM, etc. es prácticamente inexistente lo que nos asegura una señal completamente limpia.
A esto hay que sumar que gracias a Kleernet podemos transmitir de forma inalámbrica audio de hasta16-bity 44.1 kHz o lo que es lo mismo: calidad CD. Esto tal vez pueda “echar para atrás” a los aficionados a la música digital de más calidad como la que encontramos en plataformas como Qobuz o Tidal, pero incluso en estos casos, el no tener que “cablear” una habitación creemos que compensa. Dicho lo cual, el que Edifier hubiese permitido ofrecer esa opción como conector que podemos utilizar si nos interesa, hubiese sido una opción interesante.
Finalmente otra ventaja que merece la pena destacar es que Kleernet permite la retransmisión de música en hasta cuatro dispositivos de forma simultánea, por lo que podemos emparejar estos altavoces con otros situados en la misma habitación o crear un espacio multi-room con facilidad. Al ser un estándar además, podemos combinar estos Edifier con dispositivos de otras marcas que lo integran, como Sennheiser, AKG, RCA, Focal, Sleek Audio…etc.
Calidad de audio
Además del acierto al apostar por Kleernet, los S3000 PRO llevan mucha calidad en su interior. Comienza con un DAC PCM 5242 que admite una frecuencia de muestreo de entrada de 24 bits/192Hz con una relación señal/ruido de hasta 114dB. Aunque no llega a los 32 bits que vimos cuando hablamos del Fiio K9 Pro ni tiene soporte MQA, desde luego es más que suficiente para cubrir las necesidades del 90% de los usuarios, que al contar con estos altavoces difícilmente y salvo en casos muy concretos, deberían optar por añadir a su configuración un DAC externo.
El control del sonido se realiza a través de un procesador xCore multi-core de XMOS una de las marcas más reputadas en el panorama de los controladores de audio, mientras que para el procesamiento del sonido se ha optado por el chip TLV320AIC3268 dispuesto para controlar el rango dinámico, que suprime el recorte de picos de las señales de entrada excesivas, evita las distorsiones y protege de forma eficaz a los altavoces contra posibles daños.
El sonido en ambas cajas se reparte entre los 120W del woofer de 6,5 pulgadas con recubrimiento de aleación de aluminio que proporciona una buena respuesta en los tonos medios y graves, mientras que los 8W del tweeter de cinta plana brinda unos agudos bien definidos.
Todo esto se traduce en una experiencia sonora de gran calidad y si debemos poner un pequeño “pero”, es cierto que acusan cierta falta de dinamismo que les lleva a generar una ligera resonancia en momentos muy puntuales. Con eso y con todo, teniendo en cuenta que estamos trabajando con unos altavoces cuyo precio no supera los 700 euros, no podemos sino aplaudir el buen trabajo de la marca que nos ha sorprendido por esa latencia inexistente incluso cuando transmitimos audio por Bluetooth.
Conectividad y el mando que no estaba a la altura
También y como viene haciendo Edifier en casi todos sus altavoces, ofrecen amplísimas opciones de conectividad. En este caso contamos con entrada USB digital, coaxial, entrada de fibra óptica y dos entradas analógicas RCA, lo que nos asegura que podremos conectar prácticamente cualquier dispositivo de transmisión de audio del mercado. A esto hay que sumarle su conectividad Bluetooth 5.0 que incluye decodificación de audio aptX y aptX HD.
Junto a las opciones de conectividad, en la parte trasera encontramos tres selectores con las que podremos controlar tanto volumen, como control de bajos y control de ganancia. Nunca he acabado de entender por qué Edifier sitúa estos controles en una parte tan poco accesible en sus altavoces (a menos que los situemos sobre una peana), cuando sería más intuitivo tenerlos bien en un lateral, bien en la parte superior… pero probablemente sea una decisión de diseño.
El conjunto se completa con un mando con el que podremos controlar las distintas fuentes de entrada, el volumen de los altavoces y algunas opciones de ecualización. Es la parte más floja del por otro lado más que notable equipo. Frente a la sensación premium que transmiten los altavoces, el mando construido en plástico ligero, ofrece una sensación pobre, con teclas frágiles al tacto…siendo tal vez su defecto principal el hecho de que en ningún momento se indica qué fuente de entrada está seleccionada. Es como si de alguna forma, no se hubiese prestado atención a este elemento de la misma forma que sí se ha hecho con todo lo demás.
Conclusiones
Los Edifier S3000Pro son un claro ejemplo de la filosofía de la marca: alta calidad a precios asequibles. Y en este sentido, tanto por un diseño exterior impecable, como por una calidad sonora a la que se le pueden poner pocos peros en este rango de precios, son una compra más que recomendable.
El uso de tecnologías tan interesantes como Kleernet e incluso el gran rendimiento que ofrecen sobre Bluetooth, así como sus amplísimas opciones de conectividad, son otros de los argumentos que inclinan la balanza a su favor. En su contra juegan en cambio esos detalles que parece que nunca acaban de pulir muchas compañías asiáticas, como el ofrecer un mando en consonancia, no ofrecer una opción cableada para poder conectar ambos altavoces si así lo deseamos o el incluir los controles físicos en un espacio poco accesible.
Dicho lo cual, los pequeños contratiempos que encontramos en estos Edifier, no restan puntos a un conjunto notable y del que desde luego vais a disfrutar al máximo sin tener que invertir demasiado dinero.