James Webb: todo listo para el despegue
El proyecto del telescopio espacial James Webb ha cumplido este 2021 la friolera de 25 años. Sí, ya ha pasado un cuarto de siglo desde que se empezó a trabajar en el que sería el sustituto del veterano y querido Hubble. Claro, en aquel momento era difícil imaginar que a estas alturas el Hubble seguiría estando operativo (aunque con los achaques propios de la edad, eso sí) en 2021. Y menos mal que lo ha hecho, pues los sucesivos retrasos en la puesta en marcha de este colosal telescopio espacial nos podrían haber dejado sin ojos en el espacio, de no ser por la resistencia del Hubble.
Sea como fuere, más vale tarde que nunca, y finalmente parece que, salvo incidencias de última hora, mañana a estas horas el James Webb ya habrá iniciado su fascinante viaje, del que nos hará partícipes con las imágenes que podremos observar gracias a él. Tras el último aplazamiento (y esperemos que sea el último de verdad), que ha retrasado un día esta operación por razones meteorológicas, mañana día de Navidad, poco después de la una del mediodía (hora española peninsular) se producirá el lanzamiento, que podrás seguir desde el canal de la NASA en YouTube.
El lanzamiento del James Webb, que recibe el nombre del que fuera el segundo administrador de la NASAdurante la década dorada de la exploración espacial, los años 60 del siglo pasado, será puesto en órbita gracias a un cohete Arianne 5 que despegará de la Guayana Francesa, un recordatorio más de que, aunque el actor más visibles del desarrollo del telescopio ha sido la agencia espacial estadounidense, en realidad se trata de un proyecto internacional en el que también han participado las agencias CSA/ASC (Canadá), CNES (Francia) y ESA (Europa), en una muestra más de lo común que es la colaboración en lo referido a la ciencia, investigación e ingeniería en el espacio.
No todo han sido buenas noticias durante el desarrollo del James Webb. Como ya hemos recordado anteriormente, los retrasos han sido una constante en estas décadas, pero no han sido los de fechas los únicos límites incumplidos. La complejidad de desarrollar el telescopio ha llevado también a que los costes finales hayan sido muy superiores a los previstos inicialmente. No obstante, y aunque evidentemente los sobrecostes siempre son algo censurable, lo más probable es que el fruto que de esta inversión termine por compensar, por mucho, hasta el último céntimo invertido en el mismo.
No debemos olvidar tampoco el colosal tamaño del James Webb. Su espejo primario está compuesto por 18 hexágonos que completan una superficie de 6,5 metros, es decir, cerca del triple del espejo del Hubble, cuyo espejo es de 2,4 metros. Además, evidentemente la tecnología integrada en el mismo es mucho más actual, y es que recordemos que el veterano telescopio fue lanzado en 1990. Y si nos paramos un momento a valorar la evolución de la tecnología en estos 31 años, no cuesta imaginarse el salto evolutivo que hay entre ambos.
Sea como fuere, si deseas ver el lanzamiento puedes hacerlo en el canal de YouTube que hemos añadido más arriba y, por supuesto, una vez que el James Webb ya se encuentre operativo, prestaremos mucha atención a todo aquello que nos permita observar.