El «HDMI 2.1 Falso» y el abuso del marketing consentido por el organismo promotor
HDMI 2.1 es la versión más avanzada de una de las interfaces más usadas por la industria para conectar pantallas de visualización y transportar contenido de vídeo y audio. Aunque parezca una actualización menor sobre HDMI 2.0, lo cierto es que sus ventajas son apreciables como veremos más abajo.
Traemos la cuestión a colación porque algunos fabricantes están promocionando HDMI 2.1 sin cumplir con sus especificaciones. O las especificaciones anunciadas y que hasta ahora pensábamos que se tenían que cumplir. Ello está llevando a un «HDMI 2.1 Falso» que puede confundir al consumidor, cuando no engañarlo, porque no recibirá las capacidades y características avanzadas que espera y que son las que promete el mismo estándar en sus especificaciones oficiales.
La voz de alarma la ha dado TFT Central. Resulta que han revisado un monitor de Xiaomi para juegos publicitado (bien grande) con dos puertos HDMI 2.1, pero con un asterisco que te lleva a leer la letra menuda (bien pequeña) que te indica que usa capacidades HDMI 2.0. El medio se puso en contacto con HDMI.org, el administrador de las licencias de HDMI y certificador de las mismas para recibir explicaciones sobre el caso.
HDMI 2.1 Falso y los abusos consentidos
Podríamos suponer que esta organización industrial -supuestamente garante de que se cumplan sus mismas normas- ha clarificado la situación, pero nada más lejos de la realidad. La respuesta:
- HDMI 2.0 ya no existe.
- Las características de HDMI 2.0 son ahora un subconjunto de 2.1.
- Todas las nuevas capacidades y características asociadas con HDMI 2.1 son opcionales.
- Si un dispositivo afirma que cumple con 2.1, también debe indicar qué funciones admite el dispositivo para que no haya confusión.
«Para que no haya confusión«. No recordamos un caso donde una especificación industrial provoque mayor confusión y además sea promovida/consentida por la misma organización responsable de la norma. Y el caso debería ser cristalino simplemente por respeto a los consumidores: si no se cumplen todas las especificaciones de un estándar ningún producto debería promocionarse como tal. Además, en esta caso, no hablamos de una actualización menor, como verás en la siguiente imagen:
Presentado en el CES de 2017, la última versión del estándar de audio y vídeo digital cifrado sin compresión que reemplazó al euroconector a comienzos de este siglo, mejoró el soporte para transmitir vídeo de ultra alta resolución hasta 8K con 60Hz (o 4K 120 Hz) en lo que fue un aumento de ancho de banda brutal hasta los 48 Gbps.
Además, esta versión añade soporte para HDR con metadatos dinámicos en todas las resoluciones compatibles y un «modo de juego» con la tasa de refresco variable VVR, una tecnología capaz de ajustar la frecuencia de actualización en función del dispositivo conectado, que en la práctica supone eliminar artefactos y reducir la latencia especialmente al conectar consolas a televisores.
Y más. HDMI 2.1 soporta HDMI Alt, una interesante conexión bajo USB Type-C que permite salida de vídeo desde un dispositivo a una pantalla de visualización externa, sin necesidad de adaptadores y también soporta el canal de retorno de audio eARC. Supuestamente, HDMI 2.1 también necesita cableado especial para cumplir con la norma.
Como verás, son múltiples las mejoras como para que se permitan equipos promocionados como tal y que no cumplan con estas especificaciones. HDMI.org debería clarificar el asunto. El otro grande en interfaces de pantalla, Display Port, es mucho más claro y garante de sus propias especificaciones.