William Shatner en el espacio: El documental
Que me aspen si en alguna de las muchísimas horas que, en mi infancia y juventud, dediqué a ver al Capitán Kirk (William Shatner) explorando el Universo a bordo de la NCC-1701 Enterprise mientras seducía a las nativas, se me pasó por la cabeza que en algún momento de su vida, pero de su vida real, el actor de origen canadiense y mito para más de una generación, llegaría a subirse a una nave y a volar al espacio.
Y sin embargo, tal y como te contamos hace algunas semanas, realmente ocurrió. A bordo del New Shepard de Blue Origin, en el meridiano del mes de octubre, William Shatner se elevó por encima de los 100 kilómetros de la superficie terrestre, traspasando así la línea de Kármán, considerada por muchos como la división entre la atmósfera terrestre y el espacio exterior. No es, como escuchábamos en la introducción de Star Trek, la última frontera, sino en todo caso la primera del ser humano en su periplo espacial, pero sin duda es todo un hito para al actor, que además se ha convertido con mayor edad al viajar al espacio.
Y por si faltaba épica en la historia, tras el aterrizaje William Shatner citó nada menos que a Sir Isaac Newton, “No sé lo que puede parecerle al mundo, pero para mí ha sido como un niño jugando en la orilla del mar que se divierte ahora y después encontrando un guijarro más suave o una concha más bonita que las normales, mientras el gran océano de la verdad se extiende sin descubrir ante mis ojos”. Con ese don de palabra no sorprende que gozara de tanto predicamento entre las locales.
Claro, tal conjunto de elementos destacables de este vuelo no podían quedar ahí y, visto con un poco de retrospectiva, parece claro que esto es algo que estaba más que decidido desde el mismo momento que William Shatner tomó la decisión de subirse al New Shepard para excursión espacial. Y como podemos leer en Yahoo! Finance, su aventura espacial se verá reflejada en un documental elaborado por Blue Origin y Amazon.
En el documental podremos ver no solo el propio vuelo, sino también lo transcurrido antes y después del mismo, y William Shatner tendrá que compartir protagonismo con el resto de los participantes del vuelo, Chris Boshuizen, cofundador de la compañía de nanosatélites Planet Labs, Glen de Vries, cofundador de una plataforma de investigación clínica y Audrey Powers, vicepresidenta de Misiones y Operaciones de Vuelo de Blue Origin. Sería genial que adoptaran los roles de Spock, McCoy y Uhura, pero entiendo que esto es mucho pedir.
Sea como fuere, es evidente que Blue Origin necesita visibilizar al máximo sus vuelos espaciales como vía de monetización y de imagen, toda vez que sus aspiraciones de participar en la aventura lunar de la NASA finalmente no se han cumplido, y que su actual proyecto de estación espacial requerirá que la compañía muestre el músculo suficiente como para poder acometer tamaño desafío. William Shatner puede convertirse en un excelente embajador de marca, y apuesto a que esta idea lleva ya bastante tiempo rondando por los departamentos de marketing de Amazon y Blue Origin.
Y ojo, que esto último no es una crítica. Ya he planteado en más de una ocasión mis dudas sobre la utilidad de este tipo de vuelos frente a sus consecuencias, pero debo confesar que, aunque yo era más de La Nueva Generación, y si debo quedarme en la clásica entonces de Spock, saber que William Shatner ha volado en el espacio, y que además así se ha acercado un poco más a Gene Roddenberry (el creado de la serie, y cuyas cenizas fueron arrojadas al espacio), me parece algo, como mínimo, entrañable. Y ahora, como dicen los trekkers, Qué la fuerza te acompañe… no, no, era broma: Larga vida, y próspera.