Windows 11 rinde peor en juegos, y sufre un error que puede ralentizar tu conexión a Internet
Solo un día después de su lanzamiento hemos podido confirmar que Windows 11 rinde peor en juegos, gracias a una interesante, y completa, prueba que ha publicado el conocido medio alemán ComputerBase. Dicho sistema operativo supone un importante paso adelante por parte de Microsoft, de hecho está pensado para aprovechar, de forma adecuada, las configuraciones híbridas que utilizarán los procesadores Alder Lake-S de Intel, formados, como sabemos, por un bloque de núcleos de alto rendimiento y otro de alta eficiencia.
Microsoft también ha introducido avances importantes en este sistema operativo, entre los que podemos destacar DirectStorage, una característica sobre la que ya os hemos hablado anteriormente, y que permitirá utilizar la GPU del sistema para tareas de descompresión de datos procedentes del SSD. A todo lo anterior debemos sumar, además, los cambios a nivel de interfaz, que a mi juicio dotan a Windows 11 de un aspecto más moderno y más atractivo.
En las pruebas de rendimiento sintético, con un Threadripper 3970X, Windows 11 pierde de forma clara frente a Windows 10, y por si esto fuera poco, vemos que Windows 11 rinde peor en juegos. Lo único positivo que podemos decir de este nuevo Windows es que consigue mejorar de forma notable el rendimiento del SSD en operaciones aleatorias 4K, como se aprecia en las capturas de CrystalDisk Mark.
Curiosamente, al utilizar un procesador Intel Core i5-11600K, el rendimiento de Windows 11 es ligeramente mejor que el de Windows 10 en Cinebench R20, y en algunas otras pruebas, como se puede ver en la imagen adjunta, cosa que no ocurre al utilizar un Ryzen 9 5950X. Creo que esto refleja un patrón claro, y que ese patrón indica que el rendimiento de Windows 11 es un poco mejor con procesadores Intel. Tened en cuenta que todas las imágenes han sido traducidas del alemán con la herramienta de traducción de Google Chrome, así que hay algunos errores menores en ellas, pero se entienden perfectamente.
Windows 11 rinde peor en juegos: Microsoft tiene trabajo por delante
La comparativa de rendimiento es tan amplia que podemos apreciar algunas excepciones, pero si hacemos un balance medio la conclusión está muy clara, Windows 11 rinde peor en juegos que Windows 10. Por ejemplo, con un Ryzen 9 5950X y una RTX 3070, Metro Exodus registra medias de 114,2 FPS y 82,9 FPS, mientras que en Windows 11 estas se reducen a 111,2 FPS y 81,1 FPS.
Es cierto que en la mayoría de los casos las diferencias no son muy marcadas, pero la verdad esto varía en función del equipo utilizado, y de la resolución empleada. Así, en el equipo anterior Kingdom Come registra una variación mínima, pero con un Core i5-11600K y una RTX 3070 ese mismo juego pasa de un mínimo de 42,2 FPS en 4K con Windows 10 a 38,6 FPS en Windows 11 manteniendo dicha resolución.
De todos los resultados que he visto, el que mejor ilustra que Windows 11 rinde peor en juegos que Windows 10 es F1 2020, un título que, con un Threadripper 3970X y una RTX 3080 Ti, registra 237,2 FPS en 1080p (calidad máxima) en Windows 10, mientras que en Windows 11 el rendimiento baja hasta los 197,8 FPS. Imaginamos que esa diferencia se reduciría al subir la resolución, y esto parece indicar que Microsoft debería dar un vistazo al gestor de tareas de Windows 11 y al soporte de CPUs AMD.
Aunque en algunos casos la diferencia es mínima, la conclusión que podemos sacar está muy clara. Como anticipamos, Windows 11 rinde peor en juegos que Windows 10, y en algunas pruebas de rendimiento sintético también, aunque esto varía en función de la configuración que utilice nuestro PC. También se aprecia una tendencia a mostrar un peor rendimiento en CPUs AMD, y todo parece indicar que, para poder sacar el máximo partido a los procesadores Intel Alder Lake-S, necesitaremos utilizar Windows 11.
Ahora mismo, tengo claro que lo mejor para un usuario normal es seguir en Windows 10, al menos hasta que Microsoft termine de pulir dicho sistema operativo. Y hablado de pulir, al gigante de Redmond se le acumula el trabajo, ya que hemos podido confirmar que Windows 11 no solo rinde peor en juegos, sino que también presenta fallos que afectan a la gestión de la memoria, produciendo una fuga que acaba consumiendo una cantidad innecesaria por la no liberación de aquella, y también da errores con el software de redes Intel Killer, que acaba reduciendo gravemente el rendimiento.