¿Cuándo llegarán las GeForce RTX 40? Entre finales de 2022 y principios de 2023, según un nuevo rumor

NVIDIA lleva un tiempo trabajando en las GeForce RTX 40, también conocidas como RTX 4000, una nueva generación de tarjetas gráficas que están llamadas a convertirse en las sucesoras de las GeForce RTX 30, y cuyo lanzamiento podría producirse entre finales de 2022 y principios de 2023.

Esa franja de tiempo encaja perfectamente con la estrategia que ha venido siguiendo NVIDIA hasta ahora. Por ejemplo, las GTX 10 llegaron al mercado en 2016, y las RTX serie 20 debutaron en 2018, y las RTX empezaron a llegar al mercado en 2020. El patrón está más que claro, y por eso tiene mucho sentido pensar que las GeForce RTX 40 podrían llegar a finales de 2022.

Se espera que los primeros modelos que lleguen al mercado sean, precisamente, lo más potentes, tal y como ocurrió con las GeForce RTX 30. Si esto se cumple, NVIDIA presentará un trío de ases formado por las GeForce RTX 4070, GeForce RTX 4080 y GeForce RTX 4090. Posteriormente, veremos los modelos inferiores, es decir, las RTX 4060 y RTX 4050, aunque no podemos descartar la llegada de versiones «Ti», como ha ocurrido con la serie RTX 30.

En este sentido, es importante destacar algo muy curioso, y es que NVIDIA ya ha lanzado las RTX 3050 Mobile y RTX 3050 Ti Mobile, pero seguimos a la espera de que lleguen al mercado las versiones de escritorio de ambas tarjetas gráficas. No tenemos una fecha concreta, así que ahora mismo solo podemos esperar, ya que aunque lo más normal sería que dichas versiones llegasen, también cabe la posibilidad de que no lo hagan.

¿Qué podemos esperar de las GeForce RTX 40?

Pues mejoras importantes, tanto a nivel de arquitectura como de proceso de fabricación. Esta nueva generación gráfica utilizará la arquitectura Ada Lovelace que, si se cumplen todos los pronósticos, será una evolución menor de Ampere, y la última arquitectura de núcleo monolítico de NVIDIA. Toda la serie GeForce RTX 40 estará fabricada, en teoría, bajo el nodo de 5 nm de TSMC, lo que supondría un salto notable frente al proceso de 8 nm de Samsung que utiliza Ampere.

Según varios rumores, la GeForce RTX 4090 tendrá un total de 18.432 shaders, una cifra increíble que nos habría parecido imposible hace cosa de un par de años, pero que hoy, sin embargo, es algo perfectamente viable. NVIDIA lo tiene relativamente fácil si mantiene los 128 shaders por unidad SM, y si aprovecha adecuadamente las posibilidades que le dará el salto al nodo de 5 nm.

Es imposible adelantar qué mejora de rendimiento será capaz de ofrecer Ada Lovelace gracias a las clásicas mejoras a nivel de arquitectura, y al refinamiento de diversos elementos a nivel de silicio, pero obvia decir que, cuando lo sepamos, seremos de los primeros en contároslo.

Por lo demás, cabe pensar que NVIDIA mantendrá la división de hardware especializado que vimos en Turing y en Ampere, lo que significa que Ada Lovelace tendrá también una cantidad determinada de núcleos tensor para tareas de inteligencia artificial y núcleos RT para trazado de rayos.

Para amenizar la espera, el gigante verde lanzará, entre finales de este año y principios del año que viene, las GeForce RTX 30 Super, una revisión menor de sus principales tarjetas gráficas de consumo general. Todavía no se ha confirmado qué modelos podría lanzar NVIDIA, pero todo parece indicar que veremos, al menos, una RTX 3060 Super, una RTX 3070 Super y una RTX 3080 Super. Las especificaciones no han trascendido, pero todas ellas deberían quedar a medio camino entre los modelos estándar y las versiones Ti.