Android: Google quiere que crezca más allá de los smartphones

Está claro que, a día de hoy, Android reina de manera indiscutible en el mercado de los smartphones. Su principal rival, iOS, nunca llegará a hacerle sombra, rivales como Windows Phone y Firefox OS no llegaron a nada y acabaron cancelados, y otros siguen peleando por encontrar su hueco, una apuesta tremendamente difícil, y que a día de hoy no nos muestra ningún rival capaz de disputarle la posición de oro al sistema operativo de Google.

Todo cambia un poco, sin embargo, cuando pasamos de smarphones a otros dispositivos, y es que el poderío de Android, y sus diversos sabores (no nos engañemos, se llame Wear o Wear OS, para nosotros siempre será «Android para relojes»). Es evidente que los planes de Google pasan por crear un ecosistema de dispositivos presentes en nuestro día a día, desde el reloj hasta el coche, gestionados mediante sistemas operativos firmados por la compañía del buscador.

Uno de los puntos clave para ello es, sin duda, que dichos sistemas operativos cuenten con un buen catálogo de apps listas para ser instaladas, y que permitan sacarle el máximo partido al dispositivo. Sin embargo en este punto nos encontramos con una pescadilla que se muerde la cola: los desarrolladores no crean apps porque hay pocos usuarios, y los potenciales nuevos usuarios finalmente no son tales porque apenas hay apps para esos dispositivos. Android cuenta con una cantidad monstruosa de apps disponibles, pero más allá del smartphone, la lista se reduce sustancialmente.

En Google son bastante conscientes de ello y, como vimos en el pasado Google I/O, los dispositivos más allá del smartphone siguen siendo una prioridad para ellos, y según podemos leer hoy en Engadget, han decidido dar un paso más, y uno muy interesante para los desarrolladores, para incentivar la creación de apps para otros dispositivos. Y es que Google recortará su «mordida» del 30% al 15% a los desarrolladores que creen sus apps de Android para varias plataformas.

En concreto, se han creado varias categorías que, a su vez, integran varios tipos de dispositivos. Las apps relacionadas con el vídeo deben alcanzar Android TV, Google TV y Google Cast, las de audio Wear OS, Android Car, Android TV y Google Cast, y las de lectura deben llegar a tablets, plegables y Entertainment Space. Como puedes comprobar, al menos en primera instancia Google se ha centrado en las apps de consumo de contenidos.

Otras dos condiciones para que los desarrolladores puedan optar a dicho recorte del 15% en la participación que tiene Google en los ingresos generados por las apps es que estas tengan un mínimo de 100.000 instalaciones activas mensuales en Google Play, así como una buena calificación en la tienda. Esto, evidentemente, se lo pone bastante más difícil a los desarrolladores más pequeños, pero seguramente será rápidamente aprovechado por servicios de streaming de audio y vídeo, así como por plataformas de libros como Kindle Unlimited y similares.

Vivimos tiempos convulsos en lo referido a las tiendas de apps, con el juicio entre Apple y Epic Games, la investigación de la UE a Apple y Microsoft anunciado que en la nueva Microsoft Store los desarrolladores podrán monetizar por vías de terceros sin tener que darles ni un céntimo. Ahora, con este paso, Google intenta potenciar Android más allá de los smartphones, pero además da un paso más en la revisión de los costes de deben asumir los desarrolladores en las tiendas oficiales, aportando así algo más de lo que hablar en esta discusión que, sin duda, proseguirá durante los próximos meses y el año que viene.