Intel contrata el actor de «Soy un Mac» y lo lanza contra Apple

Los más viejos del lugar recordarán la campaña publicitaria «Soy un Mac» donde en la década del 2000 Apple mostraba las supuestas carencias de los PCs con Windows frente a sus Mac. Ahora, Intel ha recuperado al actor que encarnaba al ordenador de Apple para lanzarlo contra los nuevos Mac M1.

«Soy un Mac» se extendió durante cuatro años y fue una campaña tan polémica como exitosa. Eran tiempos del desastroso (e incomprendido) Windows Vista y Apple lo aprovechó a fondo con la habitual genialidad de su departamento de marketing. Microsoft contraatacó con «Soy un PC». Una campaña de menos éxito mediático, pero con vídeos también memorables que han pasado a la historia de la publicidad tecnológica.

El lanzamiento de Windows 7 y la conversión de Apple en ‘una compañía de móviles’ cerró un frente a frente histórico, si bien ambos gigantes tecnológicos han seguido atizándose de cuando en cuando, casi siempre con estilo y humor.

El mundo de la tecnología da muchas vueltas y los socios pueden convertirse en enemigos en un plazo de tiempo muy breve. Ya ha llovido desde que Apple reemplazó la arquitectura PowerPC a favor de los x86 de Intel. También quedó atrás cuando Apple era la compañía elegida por Intel para estrenar cada procesador que lanzaba al mercado.

Apple comenzó a desarrollar el iPhone e Intel le ofreció un cheque en blanco para que usara sus procesadores. Apple lo rechazó apostando por ARM. Fue el comienzo del fin de una hermosa amistad. Lo que ha llegado después con Apple silicon (o el uso de ARM en los Mac) estaba cantadísimo, aunque hayamos tenido que esperar una década desde que apostáramos por ello.

De «Soy un Mac» a «Soy un… Justin»

Ya decíamos que silicon podía ser terrible para Intel si Apple lograba tener éxito. Y de momento los Mac M1 han demostrado que funcionan. Intel ha reaccionado al lanzamiento con una campaña «Go PC» que se jactaba de que solo las PC podían «impulsar el lanzamiento de un cohete y lanzar Rocket League». Pero pero no esperábamos que recuperara los «Soy un Mac».

No la campaña de Apple, obviamente, sino al actor Justin Long que encarnaba al Mac en los anuncios. Ahora, Long dice ser «solo Justin», un tipo «normal» que se burla de los productos de Apple mostrando lo que a su juicio son deficiencias y destacando los beneficios de un PC con Windows. 

Uno de los anuncios compara la flexibilidad de un convertible como el Lenovo Yoga 9i frente a un MacBook Pro, destacando la capacidad del primero para funcionar como una computadora portátil tradicional, un tablet y otros modos de uso. El anuncio pretende mostrar que para lograr una funcionalidad similar dentro del ecosistema de Apple, además del Mac necesitarías un iPad, un teclado, un lápiz óptico y un dongle.

Otro de los comerciales presenta a alguien jugando en un portátil MSI Gaming Stealth 15M con tecnología Core i7, señalando que «nadie juega en una Mac».

Las computadoras de Apple también son objeto de burla por las barras táctiles en los teclados; la falta de tecnología táctil en la pantalla; el esquema de color repetitivo en los acabados («gris y más gris») o el soporte para múltiples monitores en los M1.

Los vídeos son curiosos y cumplen su papel al señalar carencias en características que ciertamente les faltan a los Mac frente a lo que ofrece un PC con Windows. Pero Intel tendrá que hacer mucho más que marketing en la ofensiva contra los Mac ARM. Apple ha crecido en venta de ordenadores personales, los M1 están funcionando y la respuesta de Intel suena a desesperada.

La situación de mercado actual es altamente complicada para Intel. Silicon no solo reduce los ingresos que le llegaban de la compra de procesadores por Apple, sino que puede animar a otros fabricantes a seguir la estrategia de usar la arquitectura ARM en PCs. Eso sería terrible para Apple.