Diez consejos para utilizar tu smartphone de forma eficiente

Si te preguntase si sabes utilizar tu smartphone estoy convencido de que la respuesta sería un sí, ¿pero sabes hacerlo de manera eficiente? Puede que nuestros lectores más avanzados respondan con otro sí rotundo, pero es probable que aquellos menos versados en la materia no estén del todo seguros.

Para utilizar tu smartphone de forma eficiente no basta con controlar los tiempos de uso y gestionar mínimamente el consumo de datos y de otros elementos asociados a tu tarifa mensual. Entran en juego otros aspectos que, como descubrirás en este artículo, pueden marcar una diferencia importante, y que te serán de gran ayuda.

¿Te preguntas por qué deberías aprender a utilizar tu smartphone de forma eficiente? Pues es muy sencillo, porque:

• Disfrutarás de una experiencia de uso mucho más satisfactoria.
• Tu smartphone envejecerá mejor, y acusará de forma menos marcada el paso del tiempo.
• Serás más productivo, versátil y eficiente en tu día a día.
• Controlarás tu tiempo de una forma más precisa, y lo aprovecharás mucho mejor.
• Tendrás bajo control uno de los dispositivos más importantes en tu día a día.
• Sabrás cómo reaccionar ante posibles imprevistos, y podrás apoyarte en tu smartphone.
• También podrás controlar los gastos necesarios para utilizar tu smartphone.

Cómo utilizar tu smartphone de forma eficiente: nociones básicas

Antes de entrar directamente a ver los diferentes consejos, quiero compartir con vosotros una serie de ideas básicas que cualquier usuario debe tener claras desde el principio.

Nuestro punto de partida para poder utilizar un smartphone de forma eficiente es muy simple: debemos ser conscientes de las posibilidades, y de las limitaciones, que presenta nuestro smartphone. Por ejemplo, si utilizamos un smartphone de gama baja, debemos ser conscientes de que su rendimiento y sus prestaciones podrían acabar siendo insuficientes para nosotros. Lo mismo aplica a otros aspectos, como la capacidad de la batería, por ejemplo, que afecta directamente a la autonomía del terminal.

Otra idea básica que debemos interiorizar está relacionada con el sistema operativo y con sus posibilidades. Vamos con otro ejemplo, si utilizamos iOS, debemos tener claro que, al tratarse de un sistema operativo más cerrado que Android, deberemos asumir importantes limitaciones que pueden afectar a nuestras necesidades más básicas. Como contrapartida, disfrutaremos de una mayor seguridad y de un ciclo de soporte (actualizaciones) más largo.

Con Android disfrutaremos de una mayor libertad, podremos descargar aplicaciones desde fuentes externas sin problema, y tendremos a nuestra disposición más opciones de personalización. Sin embargo, tendremos que tener mucho más cuidado, ya que una mayor libertad implica un mayor riesgo de infecciones por malware, y también deberemos asumir un ciclo de soporte más reducido.

Por último, también debes tener claro que el hardware de tu smartphone determinará, de forma irreversible, qué puedes hacer con él y qué no. Por ejemplo, un smartphone de gama media-baja puede ser capaz de cubrir las necesidades básicas de la mayoría de los usuarios actuales, pero sería insuficiente para aquellos que quieran jugar a juegos exigentes, o que quieran hacer fotos y obtener un resultado de calidad.

Si quieres utilizar tu smartphone para fines muy concretos ten mucho cuidado antes de comprar, y asume que, en estos casos, tendrás que hacer una inversión considerable para disfrutar de una buena experiencia.

1.-Ajusta tú mismo el brillo de la pantalla

La pantalla es uno de los elementos más importantes a la hora de utilizar un smartphone. Es el componente que nos permite interactuar con él de forma directa, a través de una interfaz táctil, y también es la encargada de visualizar tanto el sistema operativo como los contenidos multimedia, las imágenes, los juegos y todo lo que tengamos en nuestro terminal.

El brillo de la pantalla puede tener un impacto enorme tanto en la experiencia de uso como en el consumo de batería. Si vas a utilizar tu smartphone en entornos interiores, con una iluminación tenue, puedes ajustar el nivel de brillo a una posición media o baja y conseguir una experiencia de uso óptima. En exteriores, y bajo una luz solar intensa, no tendrás más remedio que subir el brillo al máximo (o casi), de lo contrario no podrás ver bien la pantalla.

Los sistemas de ajuste automático no funcionan del todo mal, pero para conseguir el mejor resultado y disfrutar de una buena experiencia, lo mejor es que seas tú mismo quien ajuste de forma manual el brillo de la pantalla para adaptarlo en tiempo real a cada situación. Ten siempre presente que, como hemos dicho, un brillo más elevado puede reducir enormemente la autonomía.

2.-Limpieza de aplicaciones de forma regular

Utilizar tu smartphone implica descargar aplicaciones. No todos los usuarios siguen la misma tendencia, algunos instalan aplicaciones muy de vez en cuando, otros se limitan a instalar las que conocen y necesitan, y pueden pasar meses sin descargarse una nueva aplicación, y otros, por contra, descargan y prueban aplicaciones con mucha frecuencia.

Este último perfil de usuario tiende a acumular aplicaciones que no necesita, y estas acaban ocupando un espacio muy valioso en su smartphone. El problema se agrava en aquellos casos en los que el usuario ni siquiera es consciente de todas las aplicaciones que tiene instaladas, y que no utiliza desde hace tiempo.

Dedica, al menos una vez al mes, un momento a revisar qué aplicaciones tienes instaladas y cuáles de ellas no utilizas. Borra aquellas que no necesites para recuperar un espacio de almacenamiento que, en la mayoría de los casos, acabarás necesitando a medio o largo plazo.

3.-No tengas miedo a personalizar tu smartphone

Aunque es cierto que Android es un sistema operativo más personalizable, y más abierto que iOS, la verdad es que con la llegada de iOS 14 Apple ha mejorado mucho en este sentido, y ha pasado a ofrecer un grado de personalización mucho más interesante que en versiones anteriores.

Con iOS puedes personalizar aspectos importantes, incluyendo desde los clásicos fondos de pantalla y de inicio hasta los widgets y la organización de la biblioteca de aplicaciones. Esto puede ayudarte, por ejemplo, a tener más a mano aquellas aplicaciones que utilizas con más frecuencia, y a visualizar al instante información útil a través de los widgets.

Si utilizas Android, tendrás acceso a una serie de opciones de personalización mucho más profundas, tanto que podrás cambiar incluso el aspecto de la pantalla de inicio y el «launcher». No tengas miedo a personalizar tu smartphone para adaptarlo a tus gustos, y a tus necesidades.

4.-Aprende a desconectar para que nada te moleste

Y no me refiero a dejar de utilizar el smartphone o a controlar el tiempo de uso, sobre eso ya hablaremos más adelante, sino a desconectarlo de Internet cuando sea necesario. Es algo básico para utilizar tu smartphone de forma eficiente, y para disfrutar de una experiencia más satisfactoria.

En mi caso, por ejemplo, tiendo a desconectar mi smartphone de la red Wi-Fi y deshabilito los datos móviles cuando quiero concentrarme en algo concreto y no tener ningún tipo de interrupción, pero sé que voy a tener que utilizar alguna aplicación de dicho terminal. Otra opción más radical es apagarlo directamente.

Existen también otras opciones intermedias, como silenciar grupos o usuarios en aplicaciones como WhatsApp o Telegram, que pueden ser muy útiles en determinadas situaciones.

5.-Busca nuevas aplicaciones que te sean útiles

Encontrar nuevas aplicaciones que puedan interesarte es una de las mejores maneras de utilizar el smartphone de forma eficiente, aunque la verdad es que puede resultar bastante complicado, debido a la enorme saturación de aplicaciones y herramientas que existe actualmente tanto en la App Store como en la Google Play Store.

Muchas de las aplicaciones que podemos encontrar en ambas tiendas son, generalmente, copias de otras aplicaciones muy populares, y por desgracia también es frecuente dar con aplicaciones y herramientas que a priori parecen interesantes, pero que luego tienen una utilidad discutible y que están cargadas de publicidad molesta.

Con todo, no tires la toalla. Existen aplicaciones útiles y de calidad que te ayudarán a utilizar tu smartphone de forma eficiente. Para que te sea más fácil encontrarlas, sigue las recomendaciones de tu tienda de aplicaciones, y también las de los expertos. Os recuerdo que, a finales del año pasado, compartimos con vosotros este especial dedicado a recopilar nuestras aplicaciones favoritas de 2020.

6.-Cuida las actualizaciones, tanto de las aplicaciones como del sistema operativo

Un sistema operativo actualizado es un sistema operativo a la última, con todo lo que ello conlleva en materia de seguridad, pero también es importante por otras razones. Las actualizaciones a nivel de sistema operativo suelen introducir mejoras a nivel de rendimiento, traen nuevas funciones, corrigen errores y resuelven problemas diversos.

Por otro lado, no debemos olvidarnos que una versión «antigua» de Android o de iOS puede acabar perdiendo el soporte y la compatibilidad con una gran cantidad de aplicaciones. Os pongo otro ejemplo, mi pareja utiliza, todavía, un iPad Mini 2 que le regalé en las navidades de 2013. Sí, todavía sigue «vivo», se ha conservado muy bien y funciona perfectamente, pero ella fue descuidando las actualizaciones hasta tal punto que en pleno 2020 seguía utilizando iOS 8. Cuando algunas aplicaciones empezaron a darle errores, me avisó, lo actualicé a iOS 12 y listo, está muy contenta con el resultado.

Lo mismo aplica a las actualizaciones dedicadas a las aplicaciones, y por supuesto a las actualizaciones de seguridad. Mantener tu terminal actualizado en todos los sentidos te ayudará a utilizar tu smartphone de la mejor manera posible.

7.-Libera espacio trasladando fotos, vídeos y otros contenidos

Es todo un clásico, pero muchas veces lo acabamos pasando por alto, bien por falta de tiempo, o bien por pura dejadez. En mi caso, suele poderme la primera opción, la falta de tiempo. Al momento de escribir este artículo tengo acumuladas en mi iPhone 8 Plus casi 9.000 fotos, y apenas me quedan libres 4 GB de almacenamiento. Tengo que ponerme a pasarlas al PC y hacer una copia de seguridad.

Pasar las fotos, los vídeos y todos esos contenidos que tenemos acumulados en nuestro smartphone nos permitirá recuperar una enorme cantidad de almacenamiento, un recurso limitado y muy valioso que, con el simple uso del terminal, se va agotando de forma gradual.

Os recomiendo que no os limitéis a pasarlas al PC, sino que además, busquéis una forma de hacer una copia de seguridad adicional, bien en la nube o bien en una unidad de almacenamiento externo. Una vez hecho, podéis borrar todos esos contenidos de vuestro smartphone y recuperar mucho espacio. En mi caso espero recuperar unos 55 GB.

8.-Organiza tus aplicaciones

No hay duda de que este consejo está íntimamente relacionado con los puntos dos y cinco. Si eres de los que descarga y utiliza muchas aplicaciones, puede que te acabes encontrando con un batiburrillo de ellas en la pantalla de tu smartphone, y esto te impedirá utilizar tu smartphone de una manera eficiente, ya que perderás tiempo buscando una aplicación en concreta, e incluso puede que acabes abriendo alguna por error.

Por suerte, tanto Android como iOS cuentan con funciones que nos ayudarán a ordenar nuestras aplicaciones de una manera sencilla, y sin esfuerzo. En mi caso, no utilizo demasiadas aplicaciones, pero las que tengo las he distribuido en tres carpetas para tener la pantalla del smartphone lo más limpia posible.

En la carpeta «Aplicaciones» tengo todas aquellas que tienen una utilidad más genérica y las que vienen por defecto en iOS, mientras que en la carpeta «Utilidades» tengo aquellas que realmente utilizo en mi día a día. Finalmente, en la carpeta «Juegos» tengo unos pocos títulos que disfruto muy de vez en cuando. Siguiendo un enfoque similar podrás utilizar tu smartphone de una manera más eficiente.

9.-Familiarízate con la batería, y la autonomía, de tu smartphone

Conocer la autonomía media que ofrece nuestro smartphone bajo un uso medio diario habitual puede sernos muy útil, ya que nos ayudará a tener claro qué nivel de autonomía podemos esperar en una situación concreta, y nos permitirá deducir, con bastante acierto, si deberíamos salir con el cargador, o no.

También puedes introducir pequeños cambios en tus hábitos e ir viendo cómo mejoran los resultados de autonomía y optimizar, de esta manera, la manera de utilizar tu smartphone.

Tanto Android como iOS cuentan con herramientas que miden el tiempo de uso del terminal y de las aplicaciones que tenemos instaladas, y también integran una completa herramienta de análisis y gestión de la duración de la batería, y del consumo de la misma. Con ambas, podemos obtener información muy interesante y mejorar, partiendo de ella, nuestros hábitos.

10.-No te obsesiones con cerrar todas las aplicaciones en segundo plano

Es un mal bastante frecuente. Muchos usuarios todavía creen que cerrar aplicaciones a diestro y siniestro mejorará el rendimiento, ya que se elimina una aplicación en segundo plano y se libera, con ello, la memoria RAM que estaba consumiendo, pero la realidad es totalmente distinta.

Cuando abres una aplicación, esta se sigue ejecutando en segundo plano para que, cuando vuelvas a necesitarla, no tenga que volver a pasar por el procesador. Se recupera el proceso desde la memoria RAM, lo que se traduce en una respuesta instantánea, en situaciones normales, y mejora la autonomía al reducir el consumo de batería, ya que el procesador no tiene que volver a cargarla.

Si cierras todas las aplicaciones, cuando quieras abrirlas de nuevo el procesador tendrá que volver a cargarlas. Mi consejo es simple, si quieres utilizar tu smartphone de forma eficiente, no cierres aquellas aplicaciones que utilizas con mucha frecuencia. Limítate a cerrar aquellas que usas de forma esporádica, o con poca frecuencia, y así lograrás utilizar tu smartphone de la manera más inteligente.