AMD presenta Zen 3 y los Ryzen 5000: un salto enorme que deja a Intel en una situación complicada

Hoy era el gran día, AMD ha presentado, como estaba previsto, la arquitectura Zen 3, base de los nuevos procesadores Ryzen 5000, dirigidos al mercado de consumo general de alto rendimiento, y la verdad es que la compañía de Sunnyvale ha superado todas mis expectativas.

Tenía bastante claro por dónde iban a ir los tiros, y al final toda la información que os hemos ido dando durante las últimas semanas se ha cumplido. Zen 3 mantiene el proceso de 7 nm, trae cambios profundos a nivel interno que afectan, principalmente, a la unidad CCD y a la memoria caché, pero también al predictor de saltos y a otros elementos clave que afectan al rendimiento general del procesador, aunque sobre ello vamos a profundizar más adelante.

También se ha confirmado el salto a la nomenclatura Ryzen 5000. Lo lógico habría sido suceder a los Ryzen 3000 con los Ryzen 4000, pero AMD ha optado por saltar directamente a los Ryzen 5000. No han dicho por qué, pero es probable que esto se deba a las reticencias que tienen en China al número cuatro, cuya fonética es similar a la de la palabra «muerte», y también por diferenciarlos de las APUs Ryzen 4000, que utilizan la arquitectura Zen 2.

Zen 3 lleva a los Ryzen 5000 a lo más alto: Intel en problemas

Una de las últimas informaciones que venía sonando con fuerza aseguraba que Zen 3 iba a mejorar el IPC entre un 15% y un 20%, una predicción que al final se ha cumplido. AMD ha confirmado que los procesadores Ryzen 5000 han mejorado el IPC en un 19% frente a la generación anterior, lo que significa que su rendimiento monohilo supera a los procesadores Intel Core de décima generación (Comet Lake-S), incluso funcionando a menor frecuencia.

Es un logro muy importante, ya que ha permitido a AMD romper la última arma que tenía Intel a su favor, el rendimiento monohilo, ¿pero cómo ha logrado AMD este incremento tan enorme del IPC? Pues a través de numerosos cambios que están presentes a nivel de silicio. Estos han sido los más importantes:

Rediseño de las unidades CCD

En Zen 2, cada chiplet estaba formado por dos unidades CCX que integraban cuatro núcleos y 16 MB de caché L3, dando forma a una unidad CCD. Pues bien, en Zen 3 este diseño ha cambiado por completo, ya no existe esa división de 4 + 4 núcleos y de 16 + 16 MB de L3, se han eliminado esos dos bloques CCX para dejar paso a una unidad única con 8 núcleos y 32 MB de caché L3.

Esto significa que los ocho núcleos se comunican ahora con una latencia menor, y pueden acceder a los 32 MB de caché L3 disponibles (antes cada bloque de cuatro núcleos solo podía acceder a 16 MB de L3).

Otras mejoras a tener en cuenta

Como anticipamos, son muchos los elementos que han influido en ese aumento del IPC que trae Zen 3, y que convertirá a los Ryzen 5000 en los procesadores más potentes del mercado de consumo general. El más importante ya lo hemos visto en el apartado anterior, el salto a una unidad CCD con ocho núcleos y 32 MB de L3 unificados, pero AMD también ha introducido ajustes importantes en el predictor de saltos, la latencia de las cachés y los motores de ejecución.

Se ha confirmado también un aumento de las frecuencias máximas de trabajo. Desconocemos los valores con los que podrán trabajar los Ryzen 5000 con todos sus núcleos activos, pero está confirmado que el Ryzen 9 5950X, que suma 16 núcleos y 32 hilos, podrá llegar a los 4,9 GHz en modo turbo. Es probable que con todos su núcleos activos pueda mantenerse entre los 4,4 GHz y los 4,5 GHz.

Zen 3 también marca un salto importante en términos de eficiencia, como podemos ver en la imagen adjunta, ya que ha multiplicado en 2,8 veces el rendimiento por vatio consumido frente al Core i9 10900K.

AMD consigue la corona del rendimiento y confirma cuatro CPUs Ryzen 5000

Ya tenemos claros los puntos más importantes de la arquitectura Zen 3. AMD ha mantenido el diseño MCM y el chiplet como base, pero ahora cada unidad CCD tiene una estructura monolítica de 8 núcleos y 32 MB de caché L3, lo que supone una mejora enorme por todo lo que hemos explicado anteriormente.

También han mantenido el proceso de fabricación en 7 nm y las configuraciones de núcleos que habíamos visto en la generación actual, lo que significa que no romperán la barrera de los 16 núcleos y 32 hilos. En términos de rendimiento, el salto ha sido, como anticipamos, enorme. AMD ha logrado superar a Intel en rendimiento monohilo, incluso trabajando a frecuencias inferiores, algo que ya os anticipé en ocasiones anteriores, y es que al final el IPC es más importante que la velocidad de trabajo. Recordar lo que ocurrió con los Athlon 64 y los Pentium 4, sin ir más lejos.

En las imágenes adjuntas podéis ver que la mejora de rendimiento que ha conseguido AMD frente a Zen 2 es impresionante, y que el Ryzen 9 5900X logra imponerse sin problemas al Core i9 10900K, tanto en rendimiento monohilo como en multihilo. Es simplemente impresionante, pensad, por un momento, que en 2017 nadie daba un duro por AMD, dicho mal y pronto, y que en solo tres años la compañía de Sunnyvale ha logrado arrollar por completo a Intel.

Modelos, precio y disponibilidad de los Ryzen 5000

AMD ha confirmado un total de cuatro nuevos procesadores Ryzen 5000. Todos estarán disponibles a partir del 5 de noviembre de este mismo año, y serán compatibles con las placas base AM4 equipadas con chipset B450 y superiores, aunque necesitaremos una actualización de BIOS para activar la compatibilidad con dichos modelos.

• Ryzen 9 5950X: tendrá 16 núcleos y 32 hilos a un máximo de 4,9 GHz, 72 MB de caché y un TDP de 105 vatios.
• Ryzen 9 5900X: tendrá 12 núcleos y 32 hilos a 3,7 GHz-4,8 GHz, 70 MB de caché y un TDP de 105 vatios.
• Ryzen 7 5800X: tendrá 8 núcleos y 16 hilos a 3,8 GHz-4,7 GHz, 36 MB de caché y un TDP de 105 vatios.
• Ryzen 5 5600X: tendrá 6 núcleos y 12 hilos a 3,7 GHz-4,6 GHz, 35 MB de caché y un TDP de 65 vatios.

El Ryzen 9 5950X tendrá un precio de 799 dólares. Por su parte, el Ryzen 9 5900X costará 549 dólares, mientras que los Ryzen 7 5800X y Ryzen 5 5600X llegarán al mercado por 449 y 299 dólares, respectivamente. Podemos apreciar una subida de precios bastante clara frente a la generación anterior que ronda los 50 dólares de media.

Antes de terminar os confirmo que AMD está trabajando en Zen 4, y que esta nueva arquitectura utilizará el proceso de 5 nm. De momento se encuentra en fase de diseño, lo que significa que todavía está en una etapa temprana.