Corsair 4000D, análisis: minimalismo sofisticado y funcional

Hace unos días se produjo el lanzamiento de la Corsair 4000D, un chasis para PC que viene en formato semitorre, y que se dirige directamente a uno de los sectores más concurridos que existen ahora mismo, el de gama media económica.

Esto quiere decir que la Corsair 4000D tiene un coste contenido, de hecho ha llegado al mercado español con un precio bastante interesante, 87,90 euros en sus dos acabados (color blanco y color negro), ¿pero ofrece un valor lo bastante sólido como para justificar ese precio?

Gracias a Corsair España hemos recibido una Corsair 4000D, concretamente el modelo terminado en color blanco, y hemos decidido hacer un montaje completo para comprobar, de primera mano, todo lo que puede ofrecer este chasis de gama media económica.

Antes de entrar en materia quiero recordaros que la elección del chasis de nuestro PC es muy importante, ya que su papel no se limita al plano estético. De él dependerán aspectos tan importantes como el espacio interno que tendremos para montar otros componentes, las posibilidades de ampliación, la gestión del cableado y el flujo de aire, así que tenedlo muy en cuenta y elegid con cuidado.

Corsair 4000D: primer vistazo

Frontal de la Corsair 4000D

Lo primero que me llamó la atención nada más sacar de la caja el chasis Corsair 4000D es la simplicidad de su diseño, y es que, como podéis ver en las imágenes adjuntas, estamos ante una semitorre con líneas angulosas muy marcadas y un enfoque claramente minimalista que crea un excelente contraste uniendo dos colores, blanco y gris.

El material principal que utiliza este chasis es el acero, aunque combinado con elementos en plástico y una ventana lateral de cristal templado. Como podéis ver en las imágenes el resultado es excelente, tanto en términos de diseño como de calidad de construcción.

Si hablamos de espacio la conclusión es muy simple, la Corsair 4000D cumple de sobra, ya que puede montar tarjetas gráficas con una longitud de hasta 36 cm, es decir, prácticamente todos los modelos que existen actualmente, incluida la RTX 3090 Founders Edition, que mide 31,3 cm de largo, y si quieres montarla en vertical tranquilo, no podrás hacerlo. También admite placas base ATX, y ofrece espacio suficiente para montar hasta seis ventiladores de 120 mm y sistemas de refrigeración líquida AIO con radiadores de hasta 360 mm.

Como sabrán muchos de nuestros lectores la gestión del cableado es fundamental a la hora de elegir un buen chasis, y en este aspecto la Corsair 4000D brilla con luz propia. Corsair ha integrado un sistema de gestión del cableado que nos permite realizar montajes con una mayor facilidad y mantener todo el cableado perfectamente ordenado en el lateral gracias al sistema «Rapid Route», que unifica el cableado principal y nos deja un espacio muy generoso de 25 mm (2,5 cm).

Sistema de gestión de cableado Rapid Route

Por lo que respecta a la distribución de los ventiladores tenemos espacio para tres unidades de 120 mm en el frontal, donde podríamos montar un radiador de 360 mm. En la parte superior podemos colocar dos ventiladores de 120 mm y un radiador de 240 mm, y en la parte trasera tenemos sitio para un ventilador de 120 mm y un radiador de 120 mm.

Si ponemos en contexto todo lo que hemos dicho en el párrafo anterior podríamos montar, por ejemplo, un kit de refrigeración líquida Corsair iCUE H150i Elite Capellix en el frontal y tres ventiladores, dos arriba y uno atrás. También podríamos colocar cinco ventiladores, tres delante y dos arriba, y utilizar un kit de refrigeración líquida como el Corsair H60 2018 en la parte trasera, ya que utiliza un radiador de 120 mm. Como veis, tenemos muchas opciones con la Corsair 4000D.

Para evitar que el polvo invada el interior de la Corsair 4000D y empiece a molestar demasiado pronto, esta semitorre viene con tres filtros de polvo situados en la parte frontal, en la zona superior y en la parte baja, justo donde se ubica la fuente de alimentación. Son muy fáciles de extraer y de limpiar.

Localización de los tres filtros de polvo.

En el lateral tenemos una ventana de cristal templado que se inserta a través de un sistema deslizante, lo que significa que no utiliza ningún tipo de tornillería, y que podemos quitarla y ponerla en segundos, y sin esfuerzo. La Corsair 4000D viene acompañada de dos ventiladores Corsair de 120 mm con tecnología AirGuide, que mejora el flujo de aire acelerando la entrada de aire frío del exterior, aunque obviamente podemos montar los ventiladores que queramos.

Estos son los dos ventiladores incluidos.

Si miramos en la zona superior nos encontramos con el filtro de polvo, y también con los botones de encendido y de reset, además de un puerto USB Type A, un puerto USB Type C y un conector jack de 3,5 mm para auriculares. Siempre es útil tener estos puertos situados en la parte delantera, ya que son de fácil acceso y simplifican la conexión de ciertos accesorios.

Ya hemos terminado nuestro primer vistazo a la Corsair 4000D, pero antes de entrar a ver el equipo que hemos montado y a contaros nuestra experiencia de uso vamos a repasar sus especificaciones clave.

• Chasis de tipo semitorre con unas medidas de 453 mm x 230 mm x 466 mm.
• Peso: 7,85 kilogramos.
• Construido en acero, plástico y cristal templado.
• Dispone de siete ranuras de expansión en horizontal y dos en vertical.
• Es compatible con placas base MB MITX, MATX, ATX y EATX.
• Admite dos unidades de almacenamiento en formato de 3,5″, y cuatro de 2,5″.
• Podemos colocar hasta seis ventiladores de 120 mm.
• Admite un radiador de 360 mm en el frontal, de 240 mm en la parte superior (280 mm si utilizamos memoria RAM CORSAIR VENGEANCE LPX) y de 120 mm en la parte trasera.
• Incluye dos ventiladores de 120 mm con tecnología AirGuide.
• Espacio dedicado para la fuente de alimentación.
• Fácil gestión del cableado gracias al sistema «Rapid Route».
• Tres filtros de polvo fáciles de limpiar.
• Admite tarjetas gráficas de hasta 360 mm, fuente de alimentación de hasta 180 mm y disipadores de CPU de hasta 170 mm de altura.
• Cuenta con conectores USB Type A, USB Type C y jack de 3,5 mm en el frontal.

La gestión del cableado es perfecta.

Corsair 4000D: nuestra experiencia

Nada mejor para comprobar el valor real que puede ofrecer un chasis que realizar un montaje completo. En esta ocasión hemos aprovechado algunos componentes que teníamos guardados para completar una configuración que, a pesar de no ser puntera, puede mover cualquier juego actual en resolución 1440p sin problemas.

Podemos encuadrar a este equipo dentro de la gama media, como veremos a continuación. Estos son los componentes que hemos utilizado:

• Procesador Ryzen 5 1500X con cuatro núcleos y ocho hilos a 4 GHz.
• 16 GB de RAM Corsair Vengeance LPX DDR4 a 2.933 MHz en doble canal, con latencias 16-16-17-36.
• Placa base MSI B450M PRO-VDH Max.
• Sistema de refrigeración Corsair Hydro Series H100i RGB Platinum.
• Tarjeta gráfica GIGABYTE 980 TI G1 Gaming con 6 GB de GDDR5.
• SSD Samsung Evo 850 de 500 GB (sistema operativo).
• Windows 10 de 64 bits.
• Fuente de alimentación Corsair CV550 con certificación 80 Plus Bronce.
• Tres ventiladores Corsair ML120 RGB Pro.

La placa base que hemos montado tiene formato microATX y dispone de disipación pasiva tanto en la zona del VRM como en la del chipset, aunque no son especialmente voluminosos. En el frontal hemos montado dos ventiladores Corsair ML120 RGB Pro, y en la parte trasera hemos colocado otro ventilador Corsair ML120 RGB Pro.

Si os fijáis en la parte superior, veréis que hemos montado el radiador de 240 mm de la Corsair Hydro Series H100i RGB Platinum, acompañado de dos ventiladores Corsair ML Pro RGB de 120 mm. Encaja sin problemas, y junto a los demás ventiladores da un toque de color al interior del chasis.

El proceso de montaje ha sido muy cómodo, gracias al enorme espacio interior que ofrece la Corsair 4000D, y la gestión del cableado ha sido coser y cantar, gracias al sistema «Rapid Route». Como podéis ver en las imágenes, el interior ha quedado perfecto, limpio de cables, y la GIGABYTE 980 TI G1 Gaming, que es una tarjeta gráfica enorme, encaja sin problemas, tanto que todavía queda espacio de sobra, lo que significa que podríamos poner una tarjeta gráfica aún más larga.

En cuanto a las temperaturas que hemos registrado, el Ryzen 5 1500X se ha mantenido casi siempre por debajo de los 60 grados ejecutando juegos como The Division 2, DOOM Eternal y Resident Evil 2 Remake. Por su parte, la GIGABYTE 980 TI G1 Gaming (trae overclock de casa) ha registrado valores medios de 70 grados. Son cifras muy buenas que confirman que la Corsair 4000D nos ha permitido realizar un montaje que no solo está equilibrado y es atractivo desde un punto de vista estético, sino que además presenta una excelente refrigeración.

Notas finales y valoración

La Corsair 4000D es un chasis perfecto para montar prácticamente cualquier tipo de configuración que se nos ocurra. Gracias a su gran espacio interior, tenemos sitio de sobra para montar una tarjeta gráfica de alto rendimiento con una longitud de hasta 36 cm. Los modelos más grandes, como la GIGABYTE 980 TI G1 Gaming que hemos utilizado, rondan entre los 28 y los 32 cm, así que no tendremos problema.

También disponemos de espacio suficiente para dar forma a un buen sistema de refrigeración. En este montaje hemos utilizado un radiador de 240 mm en la parte superior, pero como hemos dicho la Corsair 4000D admite sin problemas un radiador de hasta 360 mm. Podemos jugar mucho con la configuración interior y montar diferentes conjuntos de refrigeración.

Los valores de temperatura que hemos registrado en la CPU y en la GPU son excelentes, como hemos visto en el apartado anterior, y la gestión del cableado que ofrece la Corsair 4000D nos ha permitido terminar un montaje totalmente limpio y visualmente atractivo, sin tener que hacer ningún esfuerzo importante.

No hay duda, la Corsair 4000D es una semitorre asequible, pero con una buena calidad de construcción, un diseño muy cuidado y un gran espacio interno que nos permitirá sacar adelante prácticamente cualquier montaje. La presencia de conectores USB Type A, Type C y jack de 3,5 mm en el frontal se agradece enormemente, ya que nos evita tener que recurrir constantemente a los conectores traseros para utilizar ciertos periféricos, y el sistema de gestión del cableado es de lo mejor que podemos encontrar en su gama. Sobresaliente, y recomendable.