HyperX Alloy Core RGB, análisis: la membrana de la realidad

Acostumbrados a verles brillar por su gama de auriculares, en esta ocasión hemos tenido la oportunidad de probar un pack compuesto por el set completo de periféricos de HyperX, con el anteriormente analizado HyperX Pulsefire Core, el recién llegado a España HyperX Alloy Core RGB y primer teclado de membrana gaming presentado por la compañía y el accesorio reposamuñecas HyperX Wrist Rest.

Especificaciones HyperX Alloy Core RGB

• Interruptores: Membrana
• Tecnología: Anti-Ghosting multitecla
• Tasa de sondeo: 1.000 Hz Ultrapolling
• Iluminación RGB: 5 zonas personalizables con 6 modos y 3 niveles de brillo pre-configurados
• Software: Sin soporte
• Conectividad: Cable trenzado de 1,8 metros con salida USB-A 2.0
• Dimensiones: 443,20 x 175,31 x 35,68 mm (alcanzando aproximadamente los 263 mm con reposamuñecas)
• Peso: 1.121 gramos (1.439 gramos con reposamuñecas)
• Compatibilidad: Total para Windows 7 en adelante y Linux, y limitada para macOS
• Otros: Resistente a salpicaduras
• Precio: 49,99 euros

Desde el primer momento, el diseño del teclado causa una muy buena primera impresión. Y es que a pesar de pesar de estar construido bajo un único marco formado íntegramente en materiales plásticos, su acabado mate, sus líneas llenas de detalles y los keycaps ABS con retroiluminación le otorgan una mayor presencia frente a otras opciones y teclados de su mismo rango de precios.

Por último, destaca también la inclusión de dos logotipos serigrafiados, con un monograma reducido situado en la parte central del borde inferior, y un logotipo completo de color plateado, más acentuado y visible, situado en la parte central superior junto a la salida del cable de conexión.

En cuanto a su parte trasera, destaca la presencia de cuatro pequeñas piezas de goma antideslizante distribuidas entre las cuatro esquinas, así como unas patas retraibles con las que podremos levantar ligeramente la parte delantera para lograr una inclinación más cómoda. Y es que de hecho la elevación del teclado en plano no resulta para nada pronunciada, por lo que a nivel personal, estas patillas resultan casi un imprescindible para el mismo.

Aunque no deja sorprender sin embargo que el HyperX Alloy Core RGB supere el kilo de peso por sí sólo, alcanzando una cifra muy ligeramente por debajo de otras opciones reforzadas con metal disponibles en del mercado.

Pasando así a los interruptores, el HyperX Alloy Core RGB abandona los ya más recurrentes sistemas de switches mecánicos para volver a una configuración de membrana en un circuito único sobre el que están montadas las teclas, manteniendo un rendimiento bastante bueno, y una mucho más notable reducción de su precio.

Así pues, destaca también la propia tipografía de las teclas, con una gran diferenciación para la iluminación RGB.

Y es que mientras que los caracteres ofrecen unos acabados grises bastante sutiles mientras el teclado está apagado, quizás incluso llegando a dificultar en algún escenario de menor luz el reconocimiento de los mismos, la legibilidad del teclado iluminado resulta de lo más agradable para todas sus intensidades.

Algo que nos lleva a los botones de control adicionales, divididos en ambas esquinas superiores para la diferenciación de sus funciones: en la esquina izquierda encontraremos los botones destinados al rendimiento del propio teclado, y los controles básicos para el patrón y la intensidad de la iluminación, así como el añadido modo para juegos; mientras que en la parte derecha se recogerán los botones para gestión de reproducción y volumen de contenidos multimedia reproducidos en el ordenador.

Por último, no podemos dejar atrás el accesorio HyperX Wrist Rest, un reposamuñecas de espuma viscoelástica y gel que, además de una enorme comodidad y reposo para las muñecas, se corona con un acabado de micro tejido, con un acabado realmente suave y agradable para la piel. Un extra también reseñable de cara a los clásicos accesorios de cuero sintético, ofreciendo una mayor resistencia y vida útil.

Aunque la pega de este accesorio es que actualmente no se vende junto con el teclado, sino que tendremos que comprarlo aparte sumando otros 35 euros al teclado, casi doblando su valor.

En cuanto a la experiencia de uso, en esta ocasión preferimos comenzar por su uso en ofimática. Y es que el hecho de que las teclas del HyperX Alloy Core RGB cuenten con una fuerza de accionamiento notablemente más baja que los teclados mecánicos nos presentan ciertas ventajas y desventajas, con una escritura que se siente bastante ligera y fluida, sin llegar a notarse ningún tipo de fatiga durante el uso prolongado.

Además, no deja de resultar curioso que, pese a tratarse de un teclado de membrana, no nos encontraremos con un margen de activación demasiado elevado, sino ligado a la pulsación completa de la tecla. Un punto muy a favor que nos permitirá evitar algunos problemas como las activaciones accidentales durante los roces o toques sutiles, ofreciendo una mayor precisión.

Aunque, sí que es cierto que seguiremos notando una diferencia notable de cara a los interruptores mecánicos, destacando sobre todo la ausencia de un indicador de activación sensible al tacto u oído, que si bien nos deja un bastante positivo uso silencioso, puede llegar a quedarse algo corto en cuanto al feedback sensitivo de los dedos.

No obstante, si bien disponemos de dos grandes soportes como el anti-ghosting multitecla o la rápida tasa de sondeo de 1000Hz, todavía podemos sacarle algunos «peros» de cara al ámbito gaming. De hecho es en este punto de activación poco marcado donde, en algunos juegos de reacción rápida como los shooters o MOBA, notamos la mayor diferencia con los interruptores mecánicos lineales, habiendo sufrido en más de una ocasión la frustración de no pulsar lo suficientemente fuerte (o profundo) una tecla, haciéndonos fallar en el uso de alguna habilidad o cambio de arma, con el pequeño resquemor extra de saber que habíamos pulsado la tecla en cuestión.

Dicho esto, cabe resaltar que se trata de un proceso especialmente marcado cuando hablamos del cambio de un teclado mecánico al HyperX Alloy Core RGB, así como su factor temporal, sólo presente hasta que nos afianzamos al estilo de uso del propio teclado.

Sin embargo, uno de los detalles que quizás más nos haya sorprendido, en este caso no para bien, es la ausencia de compatibilidad con el software NGenuity de HyperX. Algo que limitará en gran medida la personalización de las teclas, además de provocar ausencias más notables como la falta de macros programables, una mayor personalización de la iluminación, o  falta de una memoria integrada para guardar perfiles.

Como ventaja, estas ausencias nos permiten que podamos utilizar el teclado y todas sus funciones con un modelo 100% «Plug and Play», pudiendo sacar el máximo provecho desde el primer segundo con tan sólo conectarlo al ordenador.

Disponibilidad y precio

Recién aterrizado en España, ya podemos encontrar el HyperX Alloy Core RGB disponible a través de la web oficial de la marca, con distintas opciones de venta a través de distribuidores locales como Game, PcComponentes, MediaMarkt o Amazon, en los que comparte un reducido precio de apenas 49,99 euros. Un precio que si ya de por sí resulta realmente accesible, nos ofrecerá una muy recompensada inversión.

Sin duda se trata de un teclado orientado para los jugadores de nivel de entrada, ofreciendo una experiencia de uso bastante buena y versátil para otras tareas como el trabajo o el estudio. Además, su configuración de uso inmediata, así como sus controles de iluminación integrados, nos permitirán disfrutar de la experiencia RGB sin demasiada complicación. En general, un teclado idóneo para introducirse al gaming sin la necesidad de gastar a lo grande.