Rendimiento de DOOM Eternal en tarjetas gráficas viejas: la Radeon HD 7970 casi dobla a la GTX 780 Ti

Hace cosa de una semana tuvimos la oportunidad de analizar el rendimiento de DOOM Eternal en 26 tarjetas gráficas, una comparativa muy amplia que nos permitió confirmar que id Software había conseguido un buen grado de optimización.

Durante todas las horas de juego que dediqué a DOOM Eternal para poder publicar mi análisis también pude darme cuenta de que, a nivel técnico, id Software había dado forma a un juego muy cuidado, bien pulido y libre de errores. No experimenté ningún tipo de cuelgue o fallo, y en las escenas de combate más intensas tampoco vi ninguna anomalía en términos de rendimiento.

Sé lo que estáis pensando, que es normal que un juego de nueva hornada rinda bien en tarjetas de nueva generación, pero lo cierto es que esto no es para nada una tendencia, de hecho llevamos unos años acostumbrados a adaptaciones pobres de juegos desarrollados sobre la base de las consolas actuales que llegan a PC con una optimización muy pobre. Por suerte DOOM Eternal es una de las excepciones que rompen esa regla.

Durante los últimos días muchos de nuestros lectores nos han preguntado por el rendimiento de DOOM Eternal en tarjetas gráficas relativamente antiguas, así que hoy hemos querido hacernos eco de un interesante análisis que ha publicado Harwdare Unboxed, donde ponen a prueba las series GTX 600 y GTX 700 de NVIDIA y también las generaciones de AMD que compitieron con aquellas, como las HD serie 7000 y las RX 200 y 300.

Rendimiento de DOOM Eternal: Kepler ha envejecido mal y ha quedado «abandonada»

Tenemos malas noticias para los que compraron una GTX serie 600 o GTX serie 700. Ambas generaciones de tarjetas gráficas fueron comercializadas en 2012 y 2013 y están basadas, salvo las GTX 750 y GTX 750 Ti, en la arquitectura Kepler, conocida por estar totalmente optimizada para DirectX 11 y por no llevarse nada bien ni con DirectX 12 ni con Vulkan.

En DOOM 2016 la GTX 780 Ti ofrecía un buen rendimiento bajo OpenGL, de hecho toda la serie Kepler se defendía bastante bien, pero en DOOM Eternal la situación cambia por completo. La utilización del nuevo motor gráfico idTech 7 y de Vulkan como API exclusiva, unida a una falta total de optimización a nivel de drivers, ha hecho que el rendimiento de DOOM Eternal en una GTX 780 Ti sea desastroso.

No hay otra palabra, dicha tarjeta gráfica, que en 2013 fue lo más potente de NVIDIA y que incluso llegó a superar en algunos juegos a la GTX 970, apenas logra medias estables de 30 FPS con resolución 1080p y calidad baja. Por contra, la Radeon HD 7970, que llegó en 2012 y competía, en teoría, con la GTX 680, la supera de manera arrolladora.

Incluso la Radeon HD 7790, que fue una solución de gama media-baja y que podemos comprar de segunda mano por 20 euros, supera a la GTX 780 Ti. Esto confirma que la arquitectura GCN de AMD ha envejecido mejor, que mantiene un valor residual claramente superior y que la compañía de Sunnyvale ha cuidado mejor el soporte a nivel de drivers.

Si miramos a las series GTX 900 la cosa pinta mucho mejor. Esta serie utiliza la arquitectura Maxwell de segunda generación y tiene un soporte mucho más pulido a nivel de drivers. También se lleva mejor con Vulkan (y con DirectX 12), lo que le permite marcar una diferencia clara en DOOM Eternal. Como hemos dicho la GTX 780 Ti llegaba a superar a la GTX 970 en algunos juegos basados en DirectX 11, pero como vemos el rendimiento de DOOM Eternal en esta última es muy superior: 85 FPS medios en la GTX 970 y 37 FPS medios en la GTX 780 Ti.

En resumen, Kepler ha envejecido muy mal, y obvia decir que las tarjetas gráficas basadas en dicha arquitectura no estarán preparadas para superar la transición de la nueva generación. Maxwell ha envejecido mejor, aunque no llega a un nivel que podamos considerar como óptimo. Las Radeon HD 7000, RX 200 y RX 300 han tenido una evolución muy distinta, y se han mantenido como un valor más sólido con el paso del tiempo.