China comienza los ensayos clínicos de la primera vacuna contra el COVID-19
La creación de una vacuna contra el COVID-19 ha dado un nuevo paso después que el Gobierno chino autorizase anoche los ensayos clínicos de un desarrollo experimental calificado como «exitoso» por el grupo científico que lo ha investigado.
Aunque aún faltan meses para que una vacuna contra el COVID-19 pueda administrarse a la población, la noticia es esperanzadora. De hecho, las únicas noticias positivas sobre la pandemia siguen llegando desde China: ayer solo registró un caso de contagio local confirmando que la expansión del coronavirus está bajo control en China.
«La vacuna es el arma científica más fuerte para acabar con el coronavirus», explicó el responsable de la investigación a la cadena estatal CCTV cuando anunció el comienzo de las pruebas en humanos. El jefe de la investigación, Chen Wei, es una eminencia en China. Más allá de ser comandante del Ejército Popular y el principal experto del país en bioguerra militar, es un reputado especialista en ingeniería genética.
De hecho, fue el creador de un aerosol médico para el brote de SARS en 2003, un producto que -dice la información- evitó que 14.000 sanitarios contrajeran la enfermedad. También es conocido como «el exterminador del ébola», al liderar un equipo para crear una vacuna contra la enfermedad mortal.
La nueva vacuna recombinante contra el coronavirus se ha desarrollado «con éxito» y cumpliendo las normas internacionales y nacionales después de más de un mes de investigación donde se ha incluido el estudio de las vacunas contra el ébola. El equipo de investigación dice estar preparándose para la producción a gran escala de la vacuna si los ensayos clínicos en humanos dan resultado como se espera.
Chen y su equipo también están desarrollando una forma más rápida para detectar casos positivos del COVID-19. Las pruebas masivas son muy importantes en este periodo de la pandemia y la Organización Mundial de la Salud las ha recomendado a todos los países.
Esta estrategia ha dado buenos resultados en Corea del Sur, registrando «solo» 81 fallecidos de 8.320 casos diagnosticados y con una curva aplanada hace bastantes días. El problema hasta ahora es que no hay disponibles el número suficiente de kits de detección. Algo que podría cambiar si el método chino (u otros que se están investigando) fuera más sencillo, rápido y suponemos barato.
En cuanto a la expansión del virus, el foco se ha trasladado a Europa y preocupa especialmente Italia y España en plena curva ascendente de positivos y fallecidos. Pero no solo. Los científicos dicen que solo es cuestión de tiempo y que otros países simplemente llevan días o semanas de retraso hasta que sean impactados por el coronavirus.
Es el caso de Alemania, Francia, Reino Unido o Estados Unidos, con un incremento de infecciones importante. También preocupan países como India, el segundo país más poblado de la tierra y seguramente menos preparado para atajar una pandemia como esta por su sistema de salud y densidad de población.
Quedémonos con la noticia positiva en el cuarto día de aislamiento obligatorio en España: China comienza los ensayos clínicos de la primera vacuna contra el COVID-19. Aún quedan muchos meses por delante para que llegue a la población y se desconoce tanto de este coronavirus que no puede asegurarse que no sea estacional y que no mute como el de la gripe. Noticia esperanzadora en todo caso que por supuesto seguiremos porque son decenas los grupos que están investigando una vacuna en todo el mundo.