Overwatch llega a Nintendo Switch mediante un port con Android y NVIDIA Shield

Entre finales de 2018 y principios de este año, vimos cómo varios grupos de hackers lograban ejecutar juegos y emuladores en la Nintentdo Switch ajenos a la consola mediante el uso de Linux y Android. Sin embargo, en este tiempo se ha logrado mejorar sustancialmente el rendimiento, compatibles ahora con los gráficos acelerados por hardware, y pudiendo ejecutar juegos más actuales y exigentes como Overwatch.

Para lograr eso, deberemos realizar un jailbreak a la consola, instalar una versión especial de Android (no oficial) para el chip NVIDIA Tegra, e instalar la aplicación de streaming de NVIDIA Shield.

Seguramente más de uno os hayáis dado cuenta ya, pero realmente no se trata de un port al uso, ya que el juego realmente se estará ejecutando en un PC de forma remota. Como mayor punto en contra, esto provoca una dependencia de conexión dentro de una misma red, por lo que tampoco no se podría considerar aún como una versión portátil del juego.

Why wait for console ports? 😏 pic.twitter.com/efNeCJ0EAj

— switchroot (@switchroot_org) June 16, 2019

A diferencia de lo que hemos visto con el port de The Witcher 3, que ha sufrido un considerable downgrade, más que en la propia capacidad de la consola, el rendimiento de estos juegos retransmitidos se basará en la calidad de nuestra conexión a internet y el rendimiento del ordenador desde donde ejecutemos el juego.

Es curioso además que esta vulnerabilidad está basada en el propio hardware de la consola, por lo que por el momento ni Nintendo ni NVIDIA parecen poder hacer nada para corregirla para el actual modelo de la Nintendo Switch.

Como bien decíamos al comienzo de la noticia, se trata de una funcionalidad no oficial, por lo que el hackeo de este sistema operativo puede provocar la rescisión de la garantía de la consola, e incluso que esta deje de funcionar debidamente.

Todavía sin noticias oficiales de las compañías, este port llega respaldado por la constante demanda de los jugadores que llevan años pidiéndoles a Blizzard y Nintendo la llegada de una adaptación para la consola portátil, algo en lo que incluso el propio Jeff Kaplan, director de Overwatch, afirma estar interesado.