The Witcher III en Nintendo Switch frente a la versión de PS4
Durante el evento Nintendo Direct de ayer tuvimos la oportunidad de confirmar que The Witcher III iba a llegar a Nintendo Switch en una edición especial, ya que incluirá, además del juego original, las dos expansiones que llegaron posteriormente: Hearts of Stone y Blood and Wine.
Nada más ver el tráiler de presentación me quedó claro que The Witcher III iba a presentar importantes sacrificios a nivel técnico para poder funcionar de forma estable en la portátil de Nintendo, y ahora que tenemos más información sobre el trasfondo técnico de dicha versión hemos podido confirmar los peores presagios.
The Witcher III funcionará en 720 x 540 píxeles, es decir, en 540p cuando se ejecute en modo portátil manteniendo una tasa de FPS variable que, en teoría, debería mantenerse entre los 20 y los 30 fotogramas por segundo. Cuando se utilice en modo dock la resolución subirá a 1.280 x 720 píxeles, pero será una resolución dinámica, es decir, podrá reducirse de forma inteligente en función de la carga gráfica de cada escena para evitar importantes caídas de rendimiento.
La resolución es muy baja, pero lo más importante es que la configuración de calidad gráfica que han utilizado encaja con el nivel «bajo» del juego en PC. Dicho de una manera más simple, The Witcher III funcionará en baja resolución y calidad baja, ¿pero cómo posiciona frente a la versión de PS4?
Sabemos que la consola de Sony es capaz de moverlo en 1080p manteniendo medias de 30 FPS y con un nivel de calidad gráfica que entra dentro de lo que podríamos considerar como «medio». Esto ya augura una diferencia importante entre ambas versiones, ¿pero realmente es tan marcada? Podéis juzgar por vosotros mismos gracias al vídeo que acompañamos.
No hay duda de que las diferencias entre ambas versiones son muy grandes, pero en cualquier caso la llegada de The Witcher III a Nintendo Switch sigue siendo una buena noticia y representa, además, todo un logro, ya que hablamos de uno de los juegos con mejor acabado gráfico de la presente generación funcionando en una consola que tiene un procesador ARM con cuatro núcleos Cortex A57 y cuatro núcleos Cortex A53, una GPU Maxwell de NVIDIA (GTX 900) con apenas 256 shaders (la GTX 750 tiene 640 shaders) y 4 GB de LPDDR4 compartida.