Android Go, Android One y Android Oreo ¿Cuáles son sus diferencias?
Google ha anunciado en el MWC 2018 de Barcelona la nueva generación de terminales bajo Android Go y Android One. Enfoques diferentes que han presentado varios fabricantes y llegan actualizados a la última versión del sistema operativo, Android 8 (Oreo). Obviamente, con Windows Phone/Mobile muerto y enterrado y sin la participación de Apple, Android ha sido el sistema triunfador absoluto de la feria.
Ese año se celebra el décimo aniversario del lanzamiento del primer terminal con Android. Si su llegada estuvo marcada en sus inicios por la revolución que había supuesto unos meses antes el primer iPhone, la realidad es que el sistema móvil de Google ha venido siendo el gran protagonista los años siguientes si tenemos en cuenta su adopción.
Según los últimos datos, el sistema con base Linux tiene una cuota de mercado del 80%, supera a Windows en el total global de dispositivos conectados con una base de 2.000 millones de dispositivos activos y cuenta con 1.300 marcas y 24.000 productos únicos producidos en esta década.
Google entrega la versión estándar del sistema libre de royalties (aunque bajo ciertas condiciones) a centenares de fabricantes para la creación de dispositivos y también comercializa sus propios terminales. Además, amplía la distribución de Android con un par de programas Android Go y Android One bajo su control, pero bajo marca y producción por terceros. Y van a ser importantes porque los hemos visto en varios fabricantes. Experiencias diferentes cuyas características vamos a repasar para ver donde encaja cada una en la industria del móvil.
Android Go
Es una variante ligera del sistema operativo móvil de Google optimizada para trabajar sobre smartphones de gama de entrada a la plataforma, con hardware que contempla 1 Gbyte de memoria RAM e incluso menos. Fue presentado en el Google I/O 2017 y la primera versión final estable llega de la mano de la última versión general del sistema, Oreo.
De acuerdo con Google, los beneficios para el usuario final serán tangibles, con mejora del tiempo de arranque de un 30 por ciento y una optimización de espacio de almacenamiento hasta dos veces el sistema operativo “regular”. Ello se logrará con el grupo de apps optimizadas bajo “Google Go”, Google Assistant Go, YouTube Go, Google Maps Go, Gmail Go, Gboard, Chrome o el nuevo administrador de archivos, Files Go.
Todas estas apps (y las adicionales) no podrán superar los 10 Mbytes de espacio y también usan menos memoria. Incluyen características para trabajar en modo off-line y cuentan con funciones para ahorro de datos. También la tienda oficial tendrá un tratamiento “Go” y la Play Store para Android Go tendrá un espacio personalizado, bien definido para indicar que están dedicadas a esta versión ligera de Android.
Un programa muy interesante para el que busque terminales básicos y tremendamente económicos (desde 50 dólares). En Barcelona hemos visto la presentación de algunos de estos terminales, como el Nokia 1 o el Tempo Go de ZTE. El objetivo es conocido y según Google, pretende sumar los “próximos mil millones de usuarios” móviles.
Android One
Google anunció este programa en 2014 y en principio estaba destinado a proporcionar a los países emergentes acceso asequible a los dispositivos Android y, por extensión, a Internet. Con Android Go en el mercado, el programa One apunta a metas superiores manteniendo su principal característica, la utilización de la versión «stock» del sistema operativo, sin capas añadidas por lo que se considera la versión más «pura» que puede ejecutarse.
El programa es controlado directamente por Google, pero los terminales se comercializan bajo marca propia por terceros. También incluyen el compromiso mínimo de actualizaciones de seguridad regulares durante tres años directamente por Google; actualizaciones del sistema operativo Android durante dos años; inclusión en la interfaz principal de las apps y servicios de Google y un hardware que tiene que ser aprobado previamente basado en pruebas de rendimiento.
Las características responden a las principales críticas que se realizan sobre los fabricantes de Android. La falta de actualizaciones en un tiempo razonable o simplemente su cancelación, dejando los terminales cuasi obsoletos vía software. Si a ello unimos que -con escasas excepciones- las capas de personalización y apps añadidas por terceros no mejoran el sistema, tendremos la explicación a la buena acogida de este programa.
En Barcelona hemos visto anuncios interesantes de nuevos terminales que llegarán con Android One (Oreo), especialmente de la mano de Nokia. Ya había terminales interesantes sobre este programa como el Moto x4 o el Xiaomi A1, pero smartphones como el Nokia 8 Sirocco de gama alta confirman la subida de nivel de estos terminales. Visto el tratamiento de Android de algunos fabricantes (sea por incapacidad o por motivos comerciales para que compremos nuevos terminales) Android One se imponen como el mejor programa de distribución de Android. A pesar de tener que cargar con todo lo de Google, lo que mercería un capítulo aparte.
Android Oreo (8.0)
Es la última versión estándar de Android. Google presenta una versión cada año y lo entrega (libre de royalties) a los fabricantes que lo requieren. El programa no impone requisitos de hardware como los anteriores y por ello podrás verlo en todas las gamas de producto de smartphones y también en tablets o televisores inteligentes.
Sobre la versión regular, recordemos de código abierto, los fabricantes aplican sus propias interfaces y aplicaciones como fórmula para diferenciarse del resto y personalizar sus propios terminales. Algunos, incluso, firman contratos con otros proveedores para instalar sus apps y servicios, como Samsung y Microsoft en la versión dedicada del Galaxy S8. Otros como Amazon, desarrollan un sistema propio sobre Android, Fire OS, que elimina directamente los servicios de Google en su versión nativa.
Con escasa excepciones y como hemos dicho más arriba, las capas de personalización añadidas en la parte superior de Android a modo de interfaz de usuario no mejoran el sistema y en la mayoría de ocasiones penalizan su rendimiento, funcionamiento, estabilidad y en algunas ocasiones hasta puede comprometer la seguridad.
También hay abundante bloatware y es tan problemático o más que el de PCs. Alguna app es interesante, pero la mayoría son redundantes con lo que ya ofrece el sistema operativo y/o peores que las que el usuario puede instalar de la tienda de aplicaciones oficial y que en todo caso el fabricante podría ofrecer de forma transparente como descarga alternativa para el usuario que así lo requiera.
Una problemática que resuelve programas como Android Go y Android One, aún entendiendo que si no te gusta el control de Google en ellos lo llevas crudo. La alternativa final es el uso de ROMs personalizadas Android proporcionadas sobre terceros desarrolladores, aprovechando las posibilidades de Android como sistema de código abierto, que permite obtener su código, añadir funciones, y construir sus propias imágenes del sistema operativo.