El nuevo Aibo de Sony arrasa ¡Tan mono como el original y más listo!

Aibo marcó un antes y un después en el sector de la robótica de consumo cuando Sony comercializó el modelo original en 1999 en forma de mascota perruna de Inteligencia Artificial.

Fue toda una revolución. Comercializados originalmente como mascotas artificiales para consumo, pronto fueron adoptados ampliamente para desarrollo de tecnologías robóticas e interacción humano-máquina en centros de investigación y universidades. Después de una decena de versiones, su desarrollo fue descontinuado como también el de su sucesor, de nombre QRIO.

Hace unos meses se rumoreó que Sony había retomado el desarrollo de un nuevo Aibo y esta semana ha sido puesto a la venta en Japón con el éxito esperable, agotando existencias si bien la compañía no ha facilitado datos de venta concretos salvo las 30 primeras unidades entregadas en una ceremonia especial en la sede central de Sony en Tokio.

El nuevo Aibo (Artificial Intelligence Robot y «compañero» o «amigo» en japonés) tiene un aspecto tan simpático como el original en un concepto en el que han colaborado diseñadores punteros japoneses, con el objetivo de lograr movimientos y expresiones más naturales.

Renovado con las últimas tecnologías de inteligencia artificial y aprendizaje profundo, Sony promete que cada Aibo será capaz de desarrollar una personalidad propia, tras aprender palabras y gestos y responder las órdenes. Puede actuar de «perro guardián» con la cámara conectada que incluye y entre sus defectos, destaca el apartado de la autonomía, apenas dos horas.

El nuevo AIO tiene un precio al cambio de 1.481 euros a los que habrá que añadir otros 673 euros que el usuario deberá abonar cada tres años para el almacenamiento de su personalidad en el sistema en nube que Sony ha preparado para ellos. La firma ha confirmado que estarán disponibles en el mercado internacional, pero sin fecha definida. Tienes un montón de vídeos del funcionamiento del robot en diferentes situaciones en la zona de aibo(Japan) de YouTube.

Personalmente me quedo con mi perrita callejera, natural y problemática como la vida misma, pero ahí tienes el nuevo Aibo, muy especial por su hermano que revolucionó la robótica de consumo y por las posibilidades de avances en IA y aprendizaje profundo.