Smartphones con cámara de vapor en 2019, Samsung sería el primero
Los smartphones han vivido una importante evolución en términos de potencia que ha hecho que cada vez sea más complicado disipar el calor interno que generan, un problema que podría resolverse con el sistema de cámara de vapor.
Hasta ahora Samsung y otros fabricantes de primer nivel han optado por utilizar pequeñas «tuberías de calor» para mantener bajo control las temperaturas de los SoCs, un sistema que ha funcionado sin problemas a pesar de su sencillez pero que podría acabar siendo insuficiente en las próximas generaciones.
Como podéis ver en la imagen que acompañamos dicho sistema es en esencia un pequeño tubo de cobre que está unido al SoC y que se encarga de evitar que el calor se concentre sobre el mismo, es decir enfría el calor de forma pasiva mediante una transferencia y distribución del mismo sobre una superficie alargada.
En el caso de los sistemas con cámara de vapor la idea tiene puntos en común pero va más allá. Ya os explicamos su funcionamiento recientemente cuando hablamos de Xbox One X, una consola que cuenta con esta tecnología para mejorar el enfriamiento del SoC.
La cámara de vapor viene a ser un bloque de cobre con un líquido refrigerante que recorre un circuito cerrado en el que pasa por dos estados; líquido y gaseoso. Cuando el líquido se calienta se convierte en gas y según va completando el recorrido que tiene marcado se enfría hasta volver a su posición inicial en estado líquido.
Esto permite disipar una mayor cantidad de calor aunque requiere de un mayor espacio a nivel interno, por lo que los fabricantes de smartphones deberían buscar una manera eficiente de integrarlo sin que acabe suponiendo un «engorde» del terminal.