Apple iPhone 6 Plus

La semana pasada publiqué un análisis del iPhone 6 en el que contaba cómo había sido mi experiencia con el último smartphone de Apple. Como sucede siempre que se habla de la compañía de la manzana, hay muchos usuarios que acusan a los medios donde se ha publicado el análisis de parcialidad y de defender a los productos de Apple por encima de cualquier otro de la competencia.

El principal argumento empleado por los que consideran una basura los análisis con comentarios positivos sobre los productos de Apple es que el medio en cuestión está comprado por los de Cupertino. Aquí «niego la mayor», ya que Apple es famosa entre los medios de Internet por invertir cero euros en publicidad. Podrá gastarse mucho en otro tipo de marketing (la verdad es que lo desconozco), pero que esto represente dinero que llegue a los medios de comunicación, nada de nada.

El segundo argumento es que las redacciones de los medios online están llenas de «fanboys» recalcitrantes a los que todo lo que haga Apple les parece bien. Reconozco que Apple tiene seguidores que casi profesan la «religión de la manzana» (atención a las comillas, no pretendo ofender a ninguna persona religiosa), pero, ¿no sucede lo mismo con muchos usuarios de Android, Windows, Linux o el mismísimo Photoshop?

El tercer argumento (y casi último) es que Apple regala los productos a los que escriben buenas críticas sobre ellos. De nuevo, «niego la mayor». Apple tiene una política de préstamos de productos que en la mayoría de los casos no supera los 30 días de cesión, y sólo en ciertas ocasiones son a más largo plazo. ¿Es diferente Apple en esto frente a otras empresas como Samsung, LG o Sony, por ejemplo? Pues no, no es diferente.

¡Menudos cuatro párrafos tan atípicos para un análisis de producto acabo de escribir! Pero es que todos los «a fondo» que he leído tanto en medios españoles como internacionales sobre la «Generación 6» del iPhone, llevan en sus comentarios críticas feroces contra los autores basándose en alguno de los tres argumentos anteriores. ¿Seré capaz de evitarlos en esta ocasión? Me temo que no, y eso que para mí el iPhone 6 Plus debería pulir algunos detalles para ser «Producto Recomendado», al contrario que su «hermano menor», el iPhone 6, que sí mereció la recomendación.

¿Alguien dijo phablet?

Semanas antes de la keynote de presentación de los nuevos iPhone 6, todo el mundo daba por hecho que Apple lanzaría un phablet (contracción de «phone» y «tablet», es decir, «teléfono» y «tableta», que se usa para hablar de dispositivos con pantallas entre 5 y 6,9 pulgadas).

Los seguidores de Apple no podían continuar viendo cómo Android y las marcas abanderadas de este sistema operativo estaban aprovechando el cambio en los gustos de los usuarios de smartphones, que mayoritariamente demandaban pantallas más grandes. Las cuatro pulgadas del iPhone 5, 5s y 5c habían cumplido su cometido, en plan «Gran Muralla China», de parar a las huestes de Android, pero hace tiempo que habían sido desbordados.

Estoy convencido que esta es la única razón para que Apple presentara por primera vez dos modelos de smartphone con pantalla diferente: el iPhone 6 Plus con diagonal de 5,5 pulgadas y el iPhone 6 con diagonal de 4,7 pulgadas. Se habían visto empujados por el mercado, algo que no gusta reconocer (y hacer) a los de Cupertino. Por eso, igual que el iPhone 6 es para mí un producto muy recomendable, el iPhone 6 Plus padece algunos males de las «primeras generaciones» de dispositivos de Apple. Seguro que si hay un iPhone 6S Plus o un iPhone 7 Plus, el resultado final será más «redondo», pero todavía quedan cosas que mejorar.

iPhone 6 vs iPhone 6 Plus: mismo diseño, distinta pantalla

La principal diferencia del iPhone 6 Plus frente a otras generaciones de iPhone (dejando a un lado su gran pantalla de 5,5 pulgadas) es su diseño. Aquí no quiero extenderme demasiado porque ya expliqué en el análisis del iPhone 6 qué ha cambiado en esta «Generación 6», aunque sí quiero recordar sus novedades:

– El perfil del iPhone 6 Plus de 0,71 cm de grosor carece de aristas y destaca por su cubierta de vidrio curvado en los extremos que se integra en su estructura de aluminio anodizado. Además, los botones de volumen se han alargado para integrarse mejor con el perfil redondeado y los diseñadores de Apple han trasladado el botón de encendido/apagado desde la parte superior al lateral derecho.

-El iPhone 6 Plus está disponible en tres colores, oro, plata y gris espacial, en versiones de 16, 64 y 128 Gbytes (precios de 799, 899 y 999 euros). Y otro detalle de su diseño son unas líneas gruesas, tanto en la parte superior como en la inferior, que se corresponden con el contorno de las antenas. Esta delimitación (creo que es de plástico o goma dura) separa las antenas del aluminio de la carcasa, solucionando de esta forma posibles problemas de cobertura.

-El iPhone 6 Plus tiene unas medidas de 15,81 cm de alto por 7,78 cm de ancho y los ya mencionados 0,71 cm de grosor. Además, su peso es de 172 gramos frente a los 129 gramos del iPhone 6.

-La pantalla del iPhone 6 Plus con resolución de 1.920 x 1.080 píxeles y 401 p/p presenta un contraste de 1.300:1, frente a la pantalla del iPhone 6 de 1.334 x 750 píxeles y 326 p/p con un contraste de 1.400:1. En ambos modelos el brillo máximo es de 500 cd/m2, guardan compatibilidad total con sRGB y disponen de píxeles de doble dominio para que el ángulo de visión sea mayor.

– Ya decíamos en la prueba del iPhone 6 que no era posible abarcar toda la pantalla con el pulgar al mismo tiempo que tienes bien agarrado el dispositivo. En el iPhone 6 Plus esto todavía se hace más evidente, así que si no quieres ver cómo tu nuevo dispositivo se cae al suelo, deberás acostumbrarte a usarlo con ambas manos.

Lo dicho, aunque iOS 8 permite pulsar dos veces en el botón de inicio para que baje la pantalla y en programas como Safari o Mail se puede ir hacia atrás o hacia delante con deslizar un dedo de un lado a otro, salvo que seas un jugador de baloncesto con manos gigantescas, olvida abarcar toda la pantalla con tu pulgar.

Cámara con estabilizador óptico de imagen

Ya comentamos en el análisis del iPhone 6 que Apple no había aumentado los megapíxeles del sensor de su cámara, manteniendo los 8 del iPhone 5s. También decíamos que la delgadez del dispositivo había provocado que el objetivo sobresaliera ligeramente de la carcasa y que para evitar que pudiera dañarse fácilmente, se había protegido con una lente de zafiro.

Junto a la cámara tenemos el flash True Tone, que cambia la forma alargada del 5s por la circular, así como un pequeño micrófono (entre la lente y el flash) que sirve para el sistema de cancelación de ruido en las llamadas. Además, Apple ha diseñado un nuevo procesador de señal de imagen que activa los Focus Pixels, responsables de enviar más información al sensor sobre lo que hemos encuadrado para que el enfoque automático vaya más rápido y sea más efectivo.

Además, el procesador de señal de imagen y el codificador de vídeo integrados en el chip A8 con arquitectura de 64 bits de segunda generación hacen que la respuesta a la hora de grabar vídeos o tomar fotos sea instantánea, mucho más rápida que en el 5s.

La novedad del iPhone 6 Plus es su estabilizador óptico de imagen que ayuda a mantener más baja la velocidad de obturación sin que por eso se mueva la escena. La verdad es que no se nota mucho la diferencia respecto al iPhone 6 (algo sí apreciamos en fotografías con poca luminosidad) a la hora de tomar fotos, pero sí es un buen punto a su favor durante la grabación de vídeos, ya que reduce el famoso efecto de manos temblorosas.

A continuación os dejamos con algunos ejemplos de fotografías tomadas con el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus.

Conclusiones

Ya he hablado de lo que para mí es lo más importante del iPhone 6 Plus: su nuevo diseño y la cámara de fotos. He dejado a propósito algunos detalles que también hay que mencionar, sobre todo para justificar la afirmación que hacía al principio del análisis respecto a que este iPhone 6 Plus todavía debe mejorar en algunas cosas para merecerse nuestro galardón de «Producto Recomendado».

Para empezar, veamos la batería. Como podéis apreciar en la imagen de abajo (cortesía de ifixit y el «desnudo integral» al que sometieron al iPhone 6 Plus), ocupa casi todo el interior del dispositivo. Hablo de una batería de 2.915 mAh  (frente a los 1.810 mAh del iPhone 6), lo que, a pesar de tener una pantalla más grande, se nota positivamente en su autonomía.

Apple menciona en sus especificaciones 14 horas conversando en 3G, navegación por Internet durante 10 horas con 3G o 4G LTE y hasta 11 horas con WiFi, así como reproducción de vídeo de 11 horas y de audio de hasta 50 horas. Como siempre decimos, estas cifras se consiguen en situaciones óptimas; mi experiencia es que la batería del iPhone 6 Plus dura más que la del iPhone 6, tanto que en mi uso habitual «pasaba por el enchufe» cada dos días y medio y el iPhone 6 lo hacía cada día y medio.

Y ahora voy a los aspectos que creo debe mejorar el iPhone 6 Plus. Para empezar, su memoria interna de 1 Gbyte es justa, muy justita. No entiendo por qué no se han decidido por 2 Gbytes. Puede que sea suficiente para la generación de apps que estamos usando en estos momentos, pero se supone que un dispositivo que te cuesta 799 euros en su modelo más barato debería tener una vida útil de tres años mínimo, y me parece que en un año esta memoria de 1 Gbyte será insuficiente.

Además, la experiencia de uso con el iPhone 6 Plus que he tenido durante un mes me ha producido cierta inquietud porque bastantes veces se quedaba colgado; era cuestión de tres o cuatro segundos, pero el iPhone 6 Plus se «moría». Y esto no me ha pasado sólo a mí, a un amigo mío que se lo ha comprado, también le sucede lo mismo.

Estoy seguro que estos «cuelgues» los acabará arreglando Apple con una actualización de iOS, pero me hace pensar de nuevo si 1 Gbyte de RAM es poco para un phablet de este tipo.

El segundo detalle que no me convence es que, al cambiar de resolución de pantalla, hay apps que no se ven como deberían. Sé que es una cuestión de que los desarrolladores tengan en cuenta la nueva resolución del iPhone 6 Plus, pero trasladar toda la responsabilidad a ellos no me parece lo mejor.

Por último, no quiero olvidarme del famoso «bendgate», el problema de que el chasis de aluminio del iPhone 6 Plus se doble con facilidad al llevarlo en los bolsillos del pantalón. Lo menciono para que no se diga que no lo he tenido en cuenta, pero en mi experiencia (como podéis ver en las imágenes de todo este análisis) el iPhone 6 Plus permaneció como el primer día, y eso que lo he llevado normalmente en los bolsillos (delantero o trasero) de mi pantalón. Apple ya respondió a este asunto, y creo que no habría que darle más vueltas.

Para finalizar, os dejo con algunas fotos donde se compara el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus.