Récord de ingresos Microsoft, nada hace mella en el gigante

Microsoft ha publicado resultados financieros correspondientes a su segundo trimestre fiscal (último trimestre 2013) que superaron las previsiones de los analistas, incluyendo nuevo récord de ingresos hasta 24.500 millones de dólares y un aumento del beneficio del 3 por ciento hasta 6.560 millones de dólares.

Ni la fuerte caída del sector PC donde Windows domina, ni la presencia todavía débil en el sector de la movilidad, ni la importante reestructuración interna en la que está inmersa incluyendo el nombramiento de nuevo CEO, hacen mella en una máquina muy bien engrasada capaz de ofrecer resultados financieros notables trimestre a trimestre.

El récord de ingresos Microsoft viene apoyado en el negocio de aplicaciones profesionales y corporativas con la suite de productividad Office a la cabeza donde crecen con fuerza las licencias de la suite local y especialmente las de la versión en nube Office 365. Los clientes de Azure crecieron un 100 por cien y también el software para servidores. En general, los ingresos por licencias comerciales crecieron un 7 por ciento hasta 9.590 millones de dólares.

En cuanto a los ingresos por licencias Windows disminuyeron un 3 por ciento, bastante menos que la caída global de ventas de PCs. Windows Phone también reporta pérdidas globales aunque los ingresos aumentaron un 50 por ciento gracias a la subida de ventas de los Nokia Lumia.

Los tablets Surface parece que comienzan a despegar y doblaron ingresos de 400 a 893 millones de dólares aunque el departamento sigue ligeramente en números rojos por Surface RT, el punto negro del apartado.

En global, la división de Dispositivos y Hardware para consumo aumentó ingresos un 68 por ciento gracias a los 3,9 millones de unidades de la Xbox One enviadas, complementadas con 4,7 millones de consolas Xbox 360 vendidas.

Como vemos, sólidos resultados en casi todas las divisiones en un momento especialmente complicado para el sector PC y la misma Microsoft. Los desafíos siguen siendo enormes. Windows para impulsar el sector PC, Windows Phone para situar a la firma en la era de la movilidad o Surface para comprobar si Microsoft puede convertirse también en una empresa de dispositivos.

Y en medio, el nombramiento del nuevo CEO, ‘cuestión de estado’ por la importancia de Microsoft en la tecnología mundial.