Sony Xperia Tablet S, análisis
Con este lanzamiento, Sony mantiene la apuesta por la diferenciación que ya vimos en su primera propuesta tablet, un producto de diseño innovador pero al que le faltaban argumentos para destacar en los lineales. El nuevo Sony Xperia Tablet S se presenta como una gran evolución de aquel concepto y la gran apuesta de la compañía japonesa para competir con Apple y Samsung en la gama alta.
Si por algo destaca este Sony Xperia Tablet S es porque no se parece a ningún otro tablet. La marca asiática ha dado un importante paso adelante en términos de calidad de construcción, con el aluminio y los plásticos de alta calidad como materiales dominantes. Sony vuelve a confiar en un diseño tipo «revista», con un bisel posterior que mejora el agarre y sirve para equilibrar el peso del aparato: el resultado es una tableta más cómoda de utilizar con una sola mano.
El Sony Xperia Tablet S es una tableta compacta, en parte gracias a que la diagonal de su pantalla se queda en las 9,4 pulgadas rodeada de un fino marco exterior. El chasis está sellado y promete protección frente a pequeñas salpicaduras, aunque el precio a pagar son unas incómodas tapas para proteger los puertos que se pierden con facilidad. Además, no terminamos de entender porque no se ha incluido una para la clavija de auriculares, si el objetivo era proteger al máximo el interior del gadget.
A nivel técnico estamos ante un producto de primer nivel; Sony basa el dispositivo en el SoC de cuatro núcleosNVIDIA Tegra 3, capaz de alcanzar los 1,4 GHz en caso necesario. Además, incorpora un quinto núcleo que procesa las tareas menos exigentes y le permite mejorar las cifras de autonomía globales. Un gigabyte de memoria RAM y 16 Gbytes de almacenamiento interno completan la dotación de serie de nuestro modelo.
Un aspecto interesante es la inclusión de una ranura para tarjetas de memoria, que permitirá a los usuarios que opten por la versión más básica del modelo (16 Gbytes, WiFi) ampliar su capacidad de forma sencilla y económica. Un acierto ahora que cada vez más fabricantes se suman a la estrategia de Apple de forzar la segmentación de producto por capacidades.
En lo relativo a conectividad, el Sony Xperia Tablet S es compatible con redes WiFi 802.11 a/b/g/n sobre 2,4 y 5 GHz, una ventaja interesante si tenemos un router de doble banda. Además, incorpora soporte para el último estándar de comunicación Bluetooth, un receptor A-GPS y, opcionalmente, un módulo de conectividad 3G.
El espíritu Bravia en formato tablet
Una de las primeras decisiones que adoptó Kaz Hirai, el nuevo CEO de Sony, fue la de integrar sus distintas líneas de producto y aprovechar sinergias entre las divisiones de la compañía. La pantalla de esta Sony Xperia Tablet S es un buen ejemplo de lo acertada que puede ser esa estrategia y una buena muestra de qué debe hacer Sony para desmarcarse de los gigantes coreanos.
Ficha técnica
Con una diagonal de 9,4 pulgadas y una resolución nativa de 1.280 x 800 píxeles la pantalla de esta propuesta está lejos de la Retina de Apple o de los impresionantes 1.920 x 1.200 del Asus Transformer Pad Infinity pero no todo es una cuestión de resolución. Sony ha conseguido fabricar un panel que muestra un contraste brutal, los mejores negros que hemos visto en una pantalla de este tamaño y unos ángulos de visión sobresalientes; esperemos que a la próxima generación le acompañe también un salto en el número de píxeles.
Los ingenieros de Sony también han realizado un esfuerzo considerable por mejorar la calidad de audio, un trabajo complicado en dispositivos donde no sobra el espacio. La combinación de dos altavoces estéreo con la tecnología exclusiva CLEARAUDIO convierten al Sony Xperia Tablet S en uno de los mejores tablets del mercado en este apartado, ofreciendo un sonido limpio y alcanzando un volumen más que suficiente para una estancia de tamaño medio. Una lástima que Sony no incluya unos auriculares de calidad con el dispositivo.
Sony cierra el círculo del entretenimiento doméstico con Remote, una fantástica aplicación que permite utilizar el tablet como control remoto de cualquier dispositivo con puerto infrarrojos, incluso los de otras marcas. El sistema de reconocimiento semi-automático funciona a la perfección y no solo con televisores, sino con reproductores de Blu-ray, Apple TV o un WD TV Live, por citar algunos ejemplos.
Además de utilizar los controles básicos, una de las opciones más interesantes de Remote es la posibilidad de programar macros. Así, podemos definir un «modo cine» que cambie el televisor a la entrada HDMI, encienda el reproductor de Blu-ray y el equipo de sonido con solo pulsar un botón. Incluso si tenemos otros aparatos como un sistema de aire acondicionado o un mando para controlar las persianas podemos añadir esas opciones a la secuencia.
Nuestras pruebas: rendimiento y autonomía
Por el laboratorio de MuyComputer ya han pasado varias propuestas basadas en NVIDIA Tegra 3 con excelentes resultados y este Sony Xperia Tablet S no es una excepción. Se han realizado pruebas para medir rendimiento general y específico en cálculo 3D, con el valor intermedio sobre tres mediciones para cada test.
En frames por segundo, mejor cuanto más.
Puntuación global, configuración por defecto. Mejor cuanto más.
Puntuación global, configuración por defecto. Mejor cuanto más.
Los resultados dibujan un tablet que demuestra un rendimiento fantástico, especialmente en todo lo relativo a rendimiento gráfico. El potencial del chip de NVIDIA con los videojuegos es impresionante, solo superado por el apabullante chip del nuevo iPad. Sobresaliente para Sony en este punto.
En lo relativo a autonomía nos hemos encontrado con una sensación agridulce. Nos da la sensación que la calidad de la recepción WiFi es muy deficiente en ocasiones y esto drena con facilidad la carga del dispositivo, siendo bastante complicado superar las 4 horas de uso real. En escenarios donde la conectividad WiFi era muy buena, se alcanzaron las seis horas y media sin demasiados problemas. Es posible que sea un caso aislado de nuestra unidad pero, en cualquier caso, esperemos que Sony pueda resolverlo en futuras actualizaciones del firmware.
Un Android al estilo Sony
El Sony Xperia Tablet S funciona con un Android 4.0.3 ligeramente personalizado, aprovechando todo lo bueno de la plataforma de Google y añadiendo soluciones de accesos directos, menús personalizables y algunas aplicaciones para aprovechar las posibilidades del tablet desde el primer minuto.
Entre las adiciones encontramos apps para acceder al ecosistema digital del Sony (Music Unlimited, Video, Reader, Walkman, etc.) y algún extra interesante, pero siempre ofreciendo al usuario la posibilidad de eliminar todo lo que no va a utilizar sin complicaciones de ningún tipo. La apuesta de Sony para por sumar valor añadido, sin restar nada al sistema original.
Especialmente interesante nos ha resultado el modo invitado, que permite configurar otras cuentas de usuario personalizando perfiles. Así, es sencillo crear una cuenta para niños, en la que solo puedan iniciar los juegos u otra con solo el navegador, si queremos prestar el tablet a un amigo sin preocuparnos de que pueda ver nuestro correo o abrir nuestras redes sociales. Funciona realmente bien y nos parece una idea fantástica para futuras revisiones de Android.
Conclusiones
Desde nuestro punto de vista, el Sony Xperia Tablet S es una de las mejores tablets Android del mercado. La combinación de un hardware de gran calidad, un software muy trabajado y un diseño que se desmarca de la competencia convierten a este producto en una de las mejores opciones dentro de la gama media alta.
La versión básica de este producto cuesta 399 euros, una diferencia notable respecto a alternativas más económicas como el omnipresente Google Nexus 7 (de especificaciones técnicas similares, a excepción de la diagonal de la pantalla). Resulta sencillo justificar esta diferencia dando un repaso al valor añadido de la propuesta analizada, pero no cabe duda que el Xperia Tablet S corre el peligro de quedarse en tierra de nadie: la competencia en gama baja es feroz y el trinomio Apple, Samsung y Google Nexus 10 en la franja de los 500 euros se le queda grande.
Mantieniendo todo expuesto a lo largo del análisis, no podemos dejar de destacar el gran esfuerzo que realiza Sony por innovar en un mercado manido de productos prácticamente idénticos; la casa japonesa presenta un tablet a la altura de lo esperado, repleto de ideas interesantes y que se posiciona con claridad como una de las mejores alternativas en su rango de precios.
El Sony Xperia Tablet S nos parece una tableta especialmente recomendable para usuarios que quieran dar un salto de calidad respecto a opciones más básicas, tengan en la reproducción multimedia su prioridad a la hora de elegir un tablet y piensen aprovechar las opciones de contenido que el ecosistema digital de la firma puede poner a su alcance.