Apple MacBook Pro 15 pulgadas (Noviembre de 2011)

Hemos probado a fondo un MacBook Pro de 15 pulgadas de los presentados en noviembre de 2011. Y aunque por fuera los cambios son mínimos -sigue la estética unibody- por dentro se nota la potencia de proceso de su Core i7 de cuatro núcleos a 2,2 Ghz. Sigue la apuesta por el puerto Thunderbolt, el sistema de sonido es impresionante y el modo gráfico dual satisfará a los más exigentes. De todas formas, nos reafirmamos en lo dicho al principio, las novedades integradas son pequeñas mejoras para actualizar esta familia de tanto éxito gobernada desde el verano pasado por el poderoso Mac OS Lion.

El equipamiento de este MacBook Pro es de lujo. Al procesador Intel Core i7 se añade un chip gráfico AMD Radeon HD 6750M con 512 Mbytes de RAM, una memoria de 4 Gbytes a 1333 MHz DDR3 (aconsejamos sin duda ampliar a 8 si no quedemos sufrir con programas gráficos como Aperture), un disco duro de 500 Gbytes SATA a 5.400 rpm y una unidad Superdrive que sólo la hemos utilizado para ver que funciona. Sin duda es un elemento que en la nueva generación de portátiles pasará a ser opcional o externo.

En el terreno del software, además de Mac OS X Lion con todas sus aplicaciones asociadas (Mail, iCal, Agenda, TimeMachine…) incluye las aplicaciones iPhoto, GarageBand e iMovie). Sin duda lo necesario para arrancar. Y después está la Mac App Store donde hay de todo y mucho gratis.

La familia al completo

La nueva familia MacBook Pro se compone de modelos de 13,15 y 17 pulgadas. En el segmento que nos ocupa, el de 15 pulgadas, puede calzar procesadores Intel Core i7 de 2,2 ó 2,4 GHz y 6 Mbytes de caché y cuatro núcleos o, el más potente de la gama, un Core i7 a 2,5 GHz y 8 Mbytes de caché. Por nuestro laboratorio han pasado casi todos los MacBook de los últimos años: os recomendamos ver los test del MacBookPro 13 pulgadas (para los que todavía estén dudando sobre que MacBook elegir), el nuevo Macbook Air y el vídeo sobre los MacBook Air que seguro que os ponen los dientes largos.

El modelo analizado tiene unas dimensiones de 2,41 x 36,4 x 24,9 cm y un peso de 2,54 kilos, medio kilo más que el modelo de 13 pulgadas. El teclado es retroiluminado de tamaño estándar con 79 teclas (12 de ellas de función y 4 de ellas de flecha). También dispone como todos los MacBook trackpad Multi-Touch, altavoces estéreo con refuerzo de graves, micrófono omnidireccional, entrada combinada de audio/auriculares, toma de corriente MagSafe…

La pantalla es uno de los puntos fuertes de este nuevo MacBook. Si se utiliza como monitor principal está justificado el salto a las 15 pulgadas de esta pantalla con retroiluminación LED con una resolución nativa de 1.440 x 900 pixeles.

El acceso a disco es otro punto a tener en cuenta. Los MacBook Pro pueden disponer de disco duro serial ATA de 500 Gbytes (como el nuestro) o 750 Gbytes o bien SSD de 128, 256 o 512 Gbytes. Los tiempos de acceso y grabación son rápidos para tratarse de un disco duro, rondando los 55- 60 Mbytes /s.

La batería integrada de polímeros de litio de 95 vatios hora es otro de los puntos fuertes de este MacBook que nos permite trabajar perfectamente unas cuatro horas sin estar enchufados a la red eléctrica. Eso sí, de las 7 horas que habla el fabricante nada. En nuestro caso, el ventilador salta con demasiada frecuencia -el procesador de cuatro núcleos tiene un alto TDP– y además del molesto ruido, vacía la batería por la vía rápida. Es importante optimizar el sistema para evitar este problemilla.

Dos chips gráficos

Uno de los apartados más novedosos de la familia MacBook Pro es el gráfico. El modelo analizado cuenta con un procesador Radeon HD 6750M de AMD con 512 Mbytes de memoria. La configuración más alta, integra el modelo superior, el Radeon HD 6770M con 1 Gbyte GDDR5. También integran el chip gráfico de Intel 3000 con 384 Mbytes compartida con la memoria principal.

Los modelos de 15 y 17 pulgadas cambian automáticamente a las dos nuevas GPUs Radeon de AMD cuando usas aplicaciones más exigentes. Su rendimiento hasta 2 veces superior al de la generación anterior y te permite ver más imágenes por segundo en juegos 3D o trabajar en tus proyectos de vídeo en alta definición mejor y más rápido que nunca.

La nueva cámara FaceTime HD integrada en la pantalla del MacBook Pro es incluso más delgada que la del iPhone 4 y ofrece una resolución tres veces mayor que la versión anterior, hasta 720p en formato 16:9. Para disfrutar de FaceTime en HD puedes hacerlo entre nuevos MacBook Pro en HD 720p o con la resolución anterior con cualquier Mac con procesador Intel, el iPhone 4, el iPad 2 o el iPod touch de cuarta generación.

Thunderbolt, la apuesta a medio plazo de Apple

Ya integrada en los MacBook Pro de principios de año, la inclusión de la tecnología Thunderbolt basada en Light Peak de Intel es la principal novedad. Thunderbolt ofrece un ancho de banda de hasta 10 Gbps, es decir, transferencias teóricas de 1.250 Mbytes/segundo, suficiente para transferir la información de un disco Blu-ray en poco más de 30 segundos.

Thunderbolt permite usar, en cascada, hasta seis dispositivos con el mismo conector. De esta forma podremos centralizar nuestros periféricos de salida de vídeo (DisplayPort), USB, eSATA y FireWire en un único puerto. Thunderbolt es compatible con DisplayPort.

Conclusiones

Un modelo excelente… pero esperábamos más

Sin duda, el MacBook Pro es un modelo de solidez probada, optimizado para operar bajo Mac OS Lion. No defraudará ni a los usuarios de Mac que renueven sus máquinas ni a los que den el salto por primera vez a la compañía de la manzana. Su integración -vía iCloud- con el ecosistema creciente de Apple (iPhone e iPad) es casi perfecta. Pero esto no quita que esperásemos más novedades en una máquina cuyo precio de partida supera los 1.700 euros. Los MacBook necesitan un repulsivo: han pasado tres años largos desde el lanzamiento de la alabada carcasa unibody y ya toca meter mano al diseño.

En el apartado críticas una ya histórica. ¿Por qué incluye este lujosísimo MacBook Pro sólamente 2 puertos USB teniendo un lateral donde caben perfectamente cuatro?  ¿Y por qué los pone tan juntos que al enchufar una llave USB un poco gruesa se inutiliza el otro puerto? Otro punto que, acostumbrados a los 2 kilos pelados del modelo de 13 pulgadas, no nos ha gustado es el peso. Se nota y mucho las dos pulgadas extras, medio kilo largo. A ver cuando se anima Apple a lanzar su esperado MacBook Air de 15 pulgadas y los usuarios pueden disfrutar de una buena pantalla con un peso asequible y quitarse de en medio el lector de CDs.

Pero quedémonos con lo positivo. Estamos ante un maquinón que no defraudará a sus usuarios, por su elegancia y fiabilidad. Una opción de compra recomendada… para el que pueda permitírselo.