Análisis

PicoProyector 3M MP410

Publicado

11 octubre, 2012

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He de confesar que me resultan muy atractivos los productos que buscan su espacio en los entresijos de la oferta de dispositivos tecnológicos, que ocupan un espacio que no había reclamado nadie hasta el momento de su lanzamiento. El caso paradigmático es el Samsung Galaxy Note, una categoría de producto (con el infame nombre de phablet) a caballo entre el smartphone y el tablet que ha recogido un éxito considerable. No aporta propuestas tecnológicas revolucionarias pero sí un formato inédito.

Ficha técnica

También es el caso del Picoproyector MP410 de 3M que hemos analizado. Se trata de un modelo que ocupa un lugar sin ocupar (aunque tiene características similares al Dell M110) en una franja de mercado cada vez más popular, la de los proyectores de tamaño compacto. Se trata de una via intermedia entre los picoproyectores más pequeños y proyectores compactos, menos portables y de tamaño algo más grande.

Con respecto a los de talla reducida el MP410 ofrece más conectividad y una potencia superior, hasta 300 lúmenes cuando los picoproyectores habitualmente no suelen llegar a los 100. Otra diferencia es que el MP410 no dispone de batería por lo que para utilizarlo tendremos que conectarlo a la red eléctrica.

En cambio no alcanza los 500 lúmenes o más de proyectores compactos pero éstos no son tan pequeños como el MP410 y sin embargo sí son más caros, más grandes y tienen un peso que en la mayoría de los casos supera un kilo. El proyector de 3M iguala por otro lado la resolución de este tipo de dispositivos (1280×800), una definición superior a la mayoría de los picoproyectores.

En resumen se trata de un proyector de poco más de 10×10 centímetros y un peso de 375 gramos que ofrece prestaciones muy considerables: 300 lúmenes y una resolución de 1280×800 puntos. 3M proporciona además una bolsa de transporte en la que podemos alojar tanto el proyector como el alimentador y los cables.

En el apartado de la conectividad el MP410 abarca casi todo. Podemos conectar dispositivos mediante RGB (con adaptador), HDMI, insertar una llave de memoria USB o utilizar una tarjeta microSD (hasta 32 GB). También es posible (mediante un cable adicional) conectar el dispositivo al PC mediante USB para gestionar el almacenamiento interno de 1 GByte.

También se ofrece como opción la conectividad WiFi.Si queremos dejar el PC (el tablet, el smartphone) en casa el proyector permite reproducir todo tipo de formatos de vídeo, como MOV, MP4,AVI e incluso MKV, de imagen y de sonido desde la memoria interna, la llave USB o el microSD. Sin embargo no es compatible con formatos de Office como otros picoproyectores de la competencia.

Poner en marcha el MP410 es sencillo, dispone de un teclado en la parte superior que permite configurar el proyector y seleccionar la entrada. El enfoque se realiza de forma manual con la anilla tradicional. No dispone de corrección de geometría pero sí de regulación de altura.

Durante las pruebas el proyector de 3M enseguida mostró sus talentos. En habitaciones iluminadas los 300 lúmenes consiguen unas imágenes si no brillantes sí suficientemente claras para una presentación siempre que limitemos el tamaño a una imagen de unas 55 pulgadas. Igualmente la alta resolución del dispositivo contribuye a la buena legibilidad de los textos y la definición de los gráficos en sesiones de PowerPoint.

Más a oscuras se obtienen imágenes muy nítidas y con un contraste más que aceptable incluso con una imagen equivalente al tamaño de una pantalla de hasta 100 pulgadas. El color se mostró adecuadamente saturados y el contraste bastante bueno, con una gama de grises más que adecuada. La posibilidad de reproducir películas de 720p (el reproductor es compatible con ficheros de 1080) es una ventaja con respecto a los picoproyectores.

En el apartado del sonido los altavoces son algo más capaces que el de los proyectores más pequeños, pero si se les pone a prueba enseguida encontraremos defectos en la reproducción. Como para otros modelos, recomendamos unos altavoces externos, sobre todo en el caso de reproducción de películas. Por otro lado el sonido del ventilador es bastante bajo, aunque a partir de una hora de funcionamiento empieza a ser algo molesto.

En definitiva se trata de un proyector extremadamente portátil en el que encontramos características propias de proyectores de un tamaño y peso bastante mayor. La calidad de imagen es excelente y no vemos que los inconvenientes como la falta de batería o algo de ruido tras un funcionamiento prolongado pueda hacer que dejemos de recomendarlo.