El precio del iPhone SE se dispara en Europa: un 40% superior

Cuando he visto el precio del iPhone SE en dólares (399), en la entrada donde Isidro nos ha presentado el nuevo móvil inteligente de Apple, he pensado que se trataba de un precio correcto para sus características, siempre teniendo en cuenta su pequeño tamaño (para la tendencia actual) y la habitual fijación de precios de productos Apple (elevada por lo general).

Al finalizar de leer el artículo y ver el precio del iPhone SE para Europa ya he torcido el gesto. Si bien muy mejorado frente al fracasado iPhone 5c, con el chasis de aluminio, una cámara decente y un chipset competente con el Apple A9 y el coprocesador M9, 489 euros son muchos euros para un «iPhone mini». 

Poco después he visto una entrada de PhoneArena que pone en situación la diferencia de precio entre Estados Unidos y Europa. Y suponemos con otras regiones. El rápido y contundente fortalecimiento del dólar frente al resto de divisas está impactando en el precio de la tecnología y junto al tema de impuestos y a la estrategia de los fabricantes, está resultando en unos precios muy superiores en Europa.

Cuidado con ese iPhone «económico»

489 euros convertidos a dólares con el cambio actual se convierten en 549 dólares. Teniendo en cuenta que el precio oficial es de 399 dólares, los europeos tendrán que pagar un sobreprecio del 40 por ciento si quieren comprar el terminal.

Hablamos del modelo básico con 16 Gbytes de capacidad. Teniendo en cuenta que Apple hace años que no soporta tarjetas microSD no podrás ampliar la capacidad en el futuro. Ello nos lleva a la siguiente variante con 64 GB que cuesta en Europa la friolera de 589 euros.

Una auténtica pasada en nuestra opinión. Por debajo de ese precio puedes adquirir en Europa un flamante Microsoft Lumia 950, el tope de gama en smartphones con Windows 10. Y con Android, qué decir, en la barrera de los 600 euros puedes adquirir casi todo lo que quieras.

Cuidado con esos 399 dólares del iPhone SE que algunos medios estadounidenses están publicitando casi como un «ofertón», porque al menos en Europa hay terminales muy superiores en ese rango de precios.